Garisenda

Alerta máxima en Bolonia por el posible derrumbe "impredecible" de una de sus torres inclinadas: "En fuerte peligro"

Las autoridades italianas han tomado medidas para reducir el riesgo de colpaso de la torre Garisenda, una de las dos edificaciones gemelas que se levantan en la ciudad

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La torre Garisenda, en Bolonia, que sufre riesgo de caer

La torre Garisenda, en Bolonia, que sufre riesgo de caer / JENNIFER LORENZINI / REUTERS

Carla Torres

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La torre de Pisa no es la única edificación italiana que está inclinada. En Bolonia, al norte de la bota, se encuentran las "torres gemelas" de la región, ambas inclinadas. Una de ellas, la torre Garisenda, está ahora en alerta máxima por riesgo de derrumbe, mientras que su compañera, la Asinelli, con el doble de altura, no está tan inclinada y está abierta a los turistas para su acceso.

La torre, que data del siglo XII, tiene una altura de 47 metros y una inclinación de 3,22 grados, lo que la convierte en una de las más inclinadas del mundo, aunque su torcimiento es ligeramente inferior al de la famosa torre de Pisa, que tiene unos 4 grados de inclinación.

Un informe revela la situación crítica

El riesgo de derrumbe se ha incrementado en los últimos meses, según un informe de los expertos que la están supervisando, a cargo del Ayuntamiento de Bolonia. El informe, publicado el 15 de noviembre de 2023, confirma que la torre ha estado en una "condición inevitablemente crítica durante algún tiempo" y sugiere que un colapso podría ocurrir en cualquier momento.

"Fuerte peligro e impredecible"

Según medios locales de Bolonia, uno de los técnicos implicados en el análisis del informe, el arquitecto Amedeo Bellini, explicó que la situación es "de fuerte peligro y sobre todo, impredecible". En la misma intervención a los medios, remarcó que "no se puede decir si le pasará algo a la torre: si habrá un derrumbe parcial o repentino, ni cuando se dará".

Las autoridades italianas han tomado medidas para reducir el riesgo de derrumbe. La torre ha sido cerrada al público y, en la primera fase del proyecto, se está levantando una barrera metálica de 5 metros alrededor de ella para contener los escombros en caso de colapso.

Los expertos están trabajando en un plan para estabilizar la torre, que correspondería a la fase 2. El plan, que aún está en desarrollo, podría incluir la construcción de pilares de soporte o la inyección de hormigón en la base de la torre.