Los meteorólogos avisan de un "crudo golpe invernal" para el final de febrero

El adiós del mes de febrero estará pasado por agua. Así lo avisan los meteorólogos de instituciones como la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) o de medios como eltiempo.es. Respecto a este segundo, la especialista Marta Almarcha ha avisado de que se acerca un final de mes alocado en cuanto a temperaturas, precipitaciones y rachas de viento. "Febrero se despedirá "a lo loco" con un crudo golpe invernal en el que veremos no solo lluvia, viento y más frío a lo largo de los próximos días", comenta la experta.

El motivo de esta inestabilidad será la entrada de sucesivos frentes, que dejarán hasta 120 milímetros de lluvia en el norte peninsular, más de un metro de nieve en los Pirineos, un tobogán térmico y fuertes rachas de viento y oleaje (más de 100 km/h y seis metros). "Durante el martes y el miércoles la situación de una borrasca sobre Italia y el anticiclón sobre las Azores, favorecerán un flujo de norte sobre la península. Así tendremos precipitaciones principalmente en el extremo norte", escribe la meteoróloga en el citado portal. Estas importantes descargas de lluvia en la zona del Cantábrico también sucederán en Baleares y, en menor medida, al Interior del país, donde se esperan recoger alrededor de 30 o 40 milímetros para los mismos días. Por su parte, en el Mediterráneo, "apenas recogerán alguna gota".

Febrero dice adiós con un golpe invernal que traerá lluvias, nieve, viento y frío

Segunda mitad de la semana

El tren de borrascas seguirá su curso con la llegada de un nuevo frente el jueves, que cruzará la península hasta llegar al este del país. Entrará por la zona de Galicia, por lo que inicialmente las lluvias volverán a ser protagonistas en todo el cuadrante noroeste. Más tarde, el viernes, podría afectar a la mitad oriental, aunque con lluvias débiles en Catalunya, Comunitat Valenciana, Región de Murcia y Baleares.

Lejos de terminar ahí, un nuevo frente asociado a una borrasca entrará nuevamente por tierras gallegas a partir del viernes por la tarde, causando inestabilidad durante la jornada siguiente con "precipitaciones postfrontales casi generalizadas, aunque a priori no serán muy abundantes". Por último, la llegada de este fenómeno volverá a repetirse de la misma manera y por la misma zona de entrada durante el domingo.