Barcelona Open Banc Sabadell

Ruud se toma la revancha de Montecarlo ante Tsitsipas en Barcelona

El tenista noruego derrota al griego por 7-5 y 6-3 para ganar su primer torneo de categoría 500 en su carrera

Ruud celebra la victoria en Barcelona.

Ruud celebra la victoria en Barcelona.

Jaume Pujol-Galceran

Jaume Pujol-Galceran

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Casper Ruud se tomó la revancha de Montecarlo cuando perdió la final ante Stefanos Tsitsipas. Una semana después el tenista noruego derrotó al griego en la final del Barcelona Open Banc Sabadell al vencerle por 7-5 y 6-3. Ruud logró su primer título en un torneo de categoría 500 y le arrebató la misma opción a Tsitsipas, que sumó l undécima final perdida en su carrera. El tenista noruego, sexto mundial, impidió también al griego ganar su primera final en Barcelona después de tres perdidas en 2018, 2021 y 2023.

Esta vez sin Rafael Nadal (2018 y 2021) o Carlos Alcaraz (2023) al otro lado de la red, Ruud le arrebató a Tsitsipas la gloria para escribir su nombre en letras doradas en el palmarés que hay en la pared de entrada del Reial Club de Tennis Barcelona que este año celebra su 125 aniversario. Ruud se convirtió en el 43º campeón del torneo desde que el estadounidense Vic Seixas ganase el primer título en 1953. 

Ruud impuso su tenis diésel y efectivo. Un rodillo que se convierte en un muro infranqueable en el fondo de la pista. No dio opciones a Tsitsipas a pesar de ceder el el primer juego con su saque (0-1). "Hoy era el día", se dijo antes de saltar a la central. El noruego no dejó que el recuerdo de Montecarlo, de la final de hace siete días (6-1, 6-4 para el griego). le agobiase.

La tensión la tenía Tsitsipas, que fue de más a menos en la hora y 29 minutos que duró el partido. El griego no pudo romper su maleficio y sumó su cuarta final sin ganar en Barcelona como sDavid Ferrer, el director del torneo y el argentino Guillermo Vilas. No lo sabía, dijo. "¿Cuatro?", preguntó cuando se lo dijeron. "Pues de todas solo una he tenido posibilidad de ganar el título", dijo recordando la que perdió en 2021, donde tuvo un 'match ball' contra Nadal.

Tsitsipas estuvo demasiado tenso y su físico tampoco le ayudo. Los dos anteriores partidos a tres sets, en cuartos de final salvando dos 'match balls', y los 10 que llevaba ganados seguidos hasta jugar la final, se acumularon en sus piernas ante el muro que estaba al otro lado de la red.

Estadística de récord

Ruud cumplió, además, con una estadística de récord que empieza a ser destacable. En los últimos 25 partidos que ha ganado el primer set nunca ha perdido. En Barcelona sumó el 26. Puede que la manera de jugar del noruego no sea la más atractiva para el espectáculo que ayer querían ver los 8.000 aficionados que llenaron las gradas, entre ellos, en el palco presidencial, la misma sor Lucía Caram, luchadora contra la pobreza infantil desde la Fundación Invulnerables.

El estilo de Ruud quizás no atraiga pero no decepciona a nadie. Su tenis es sobrio, su caracter frío y comedido, pero sabe explotar sus virtudes al máximo. Sus golpes son un martilleo constante con el que presiona al rival hasta deseperarle. Tsitsipas sintió esa presión constante y no encontró la manera de superarlos.

"Si no fuera por Casper, este inicio de temporada habría sido perfecto", le dijo a Tommy Robredo (campeón del 2004) cuando le preguntó al terminar el partido por su inicio en la gira de tierra europea. Aceptó resignado la supreioridad de su rival. "Si jugamos así, nos veremos en muchas otras finales", le dijo.

Ruud se lanza a la piscina para celebrar su triunfo.

Ruud se lanza a la piscina para celebrar su triunfo. / RCT BARCELONA

"Este es el mayor título de mi carrera", destacó Ruud en la entrega del trofeo en la pista, orgulloso de sumar el 11º título en un palmarés donde figuran tres finales de Grand Slam (Roland Garros, 2022 y 2023), un Open de EEUU (2023). El noruego acabó con su racha de tres finales perdidas este año en Los Cabos, Acapulco, y Montecarlo. Puso fin a su maleficio, llevarse un cheque de casi medio millón de euros, felicitar a su hermana que este domingo cumplía 18 años y tirarse en esa piscina del club en la que tantas veces ha visto bañarse a su amigo Rafael Nadal.