Tú y yo somos tres

La crítica de Monegal: Chorizo con diamantes, el desayuno de Georgina

La Sexta MVT El embutido que vuelve loca a Georgina 4

La Sexta MVT El embutido que vuelve loca a Georgina 4 / La Sexta

Ferran Monegal

Ferran Monegal

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Agotado, exprimido por la tele el simulacro de Tamames y su moción de censura, llega ahora a todo color a nuestros domicilios el fenómeno Georgina Rodríguez. Su aparición el jueves en ‘El hormiguero’ (A-3) rompió audímetros.

Georgina cuenta con más de 40 millones de ‘followers’ en redes, y Pablo cada noche con casi tres millones de adictos. O sea, para los amantes de las cifras potenciadoras del ‘business’, fue una operación magnífica. El reflejo en el imperio Atresmedia de esta ‘joint venture’ entre Pablo y Georgina ha sido celebradísimo. En el programa ‘Y ahora Sonsoles’ (A-3) se enternecían con el caso del gato que se coló un día en la mansión de Madrid de Georgina. No sabemos si el felino buscaba calor, ternura o lujo. Probablemente las tres cosas a la vez. Pero no era un gato vagabundo. Venía de otra casa aledaña, la de Fernando Torres, ex jugador del Atlético de Madrid. Celebraba Sonsoles que gracias a ‘El hormiguero’, el gatito pudiera regresar con su dueño legítimo. En el programa de La Sexta ‘Más Vale Tarde’ también hubo una gran vibración con esta aparición de Georgina. Su presentador Iñaki López , en lugar de fijarse en lo del gatito se fijó en lo del chorizo. También es un tema muy bonito. Contó Georgina que sigue consumiendo el embutido que comía cuando vivía en Jaca. un tipo de chorizo artesano, típico de Graus. Aseguró que en las cocinas de su jet privado no falta nunca.

A esta celebración del imperio Atresmedia sobre Georgina le ha faltado, no obstante, el factor diamante. Dada la afición a los brillantes que tiene Georgina, Motos colocó frente a ella una parada de diamantes y rompió uno con un martillo. Hubiera sido más oportuno tomar como base aquel café con cruasán que se tomó Audrey Hepburn frente al escaparate de Tiffany, y poner a Georgina ante los diamantes desayunando un bocata de chorizo. Sobre la personalidad de Georgina es mejor ir a su docuserie en Netflix, ‘Soy Georgina’. En el capitulo 2 de la primera temporada hay una escena que, cinematográficamente hablando, es un prodigio. Un plano-secuencia de casi cinco minutos seguidos sumergida ella en su vestidor enseñándonos montañas de zapatos, bolsos y vestidos. "Hijo mio, la felicidad está hecha de pequeñas cosas: un pequeño yate, una pequeña mansión, una pequeña fortuna” decía Groucho Marx con sarcasmo profundo.