Los Mossos detienen en Santa Susanna a dos fugitivos por participar en un tiroteo en Holanda

Los Mossos d'Esquadra detuvieron en un hotel de Santa Susanna a dos fugitivos, de 35 y 31 años, que estaban buscados por las autoridades de los Países Bajos. Se escondían en este establecimiento, ya que tenían activas órdenes europeas de detención y entrega por los delitos de intento de asesinato, agresiones y posesión de armas. 

El pasado 14 de abril en la ciudad de Brunssum (Países Bajos) hubo un tiroteo de madrugada en la que resultó herida grave una persona. La policía neerlandesa concluyó que había tres hombres implicados en el ataque y que los dos principales sospechosos se habían refugiado en la costa catalana. Por eso, emitió una orden internacional de entrega a los Mossos d'Esquadra y les alertó de que los dos fugitivos eran "muy peligrosos y violentos".

Por eso los agentes realizaron un amplio dispositivo policial para localizar a los sospechosos en un hotel de Santa Susanna y vigilarlos, hasta que se pudo coordinar el operartivo con la policía de los Países Bajos. De esta forma, se hizo la detención a la vez de los tres presuntos implicados en el tiroteo: los dos de Catalunya mientras un tercer sospechoso en Holanda.

El pasado viernes, el Grupo Especial de Intervención (GEI) de Mossos se hizo cargo del arresto, ya que "se trataba de personas peligrosas y violentas y el dispositivo policial debía realizarse garantizando el máximo de las medidas de seguridad" del establecimiento hotelero. 

El Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional ordenó prisión provisional de los acusados a la espera de su extradición a Países Bajos durante la próxima semana. La policía neerlandesa mantiene abierta la investigación para esclarecer las causas del tiroteo, pero todo apunta a un ajuste de cuentas entre bandas rivales.