Muere una joven italiana tras renunciar a la quimioterapia para dar a luz

Creyó en ello hasta el final, incluso cuando ya no había esperanza. Azzurra Carnelos falleció el sábado 13 de abril a los 33 años tras padecer un cáncer de mama. Había caído enferma en 2019, pero con la quimioterapia el período oscuro parecía haber terminado, tanto es así que tomó las riendas de su vida nuevamente, se casó en 2022 y en febrero de 2023 descubrió que estaba embarazada.

Una alegría inesperada para ella y su marido Francesco Favero, que se derrumbó el pasado mes de julio cuando, durante un reconocimiento médico, descubrió que la enfermedad había regresado. Más agresivo que la primera vez. A pesar de su preocupación, continuó el embarazo hasta la semana 32, suspendiendo los tratamientos por temor a que pudieran afectar la salud del feto. Hasta los médicos del servicio de Neonatología del hospital Ca’ Foncello de Treviso decidieron adelantar el parto para que naciera el pequeño Antonio y asípermitirle a la madre dedicarse a nuevos ciclos de tratamiento.

El descubrimiento del primer tumor se produjo hace cinco años, después de soñar con su abuela Nori, que murió a causa de la misma enfermedad y que le sugirió someterse a una serie de pruebas, como ella misma confesó la joven de 33 años. Una especie de sueño premonitorio que, sin embargo, no fue suficiente para salvarla. Además de su hijo Antonio y su marido Francesco, Azzurra también deja atrás a sus padres Antonella y Fabrizio y a sus hermanos Davide y Andrea.