Vallter 2.000 y La Molina cierran "con buen gusto de boca" después de haber alargado la temporada por las últimas nevadas

Las estaciones de esquí de FGC Turisme dan por cerrada la temporada después de haber podido abrir los dominios esquiables 125 días desde diciembre hasta abril pese a la sequía que sufre Catalunya. Según FGC, las nevadas de marzo y la producción diez nieve han permitido la apertura de los complejos. FGC afirma que esta temporada ha supuesto un negocio agregado de casi 50 millones de euros (MEUR) y 2.800 empleos para los valles.

La Molina, Vallter, Espot Esquí y Port Ainé, que inicialmente tenían previsto cerrar el lunes 1 de abril, finalmente han despedido la temporada de invierno una semana más tarde, este domingo. Boí Taüll aún tiene previsto reabrir el próximo sábado y domingo. Vall de Núria, por su parte, mantuvo abierto su dominio esquiable hasta el día 31 de marzo, pero el equipamiento turístico está abierto todo el año.

Buen cierre de temporada

En declaraciones a ACN, el director del complejo, David Ros, ha mostrado "satisfacción" pese a la temporada "irregular". Pese a que la temporada empezaba en diciembre en un contexto "difícil" debido a las pocas precipitaciones, las grandes nevadas del mes de marzo dejaron un escenario "espectacular" para practicar el deporte con unas condiciones que se han alargado más allá de Semana Santa. La estación fue la que registró las mejores cifras de todas las estaciones de FGC con unos 150.000 esquiadores.

La Masella es la única estación de Pirineo gerundense que mantendrá las pistas abiertas hasta el 14 de abril. "Hemos acabado la temporada con buen gusto de boca", explica la responsable comercial de La Molina, Marta Viver, que dice que todo y la poca nieve de la temporada, "se han podido hacer todas las actividades previstas" porque están "muy preparados para fabricar nieve".

Por lo que respecta a Vallter, la estación inició la temporada el 6 de diciembre. La temperatura media del invierno ha sido de 5,8 grados, con puntas de temperatura de 15 grados a mediados de febrero. Este hecho ha provocado que el grosor de nieve durante la mayor parte de la temporada haya oscilado entre los 5 cm y los 15 cm.

El director de Vallter 2.000, Enric Serra, hizo una buena valoración de la temporada, pese a reconocer que "ha sido difícil" por la falta de nieve. "Nos costó mucho arrancar; empezamos por el puente de la Purísima con la zona de debutantes y no fue hasta febrero que pudimos abrir la zona alta", relata, pero dice que diversifican la actividad en la estación "tanto cómo se puede, sobre todo cuando no hay nieve suficiente". "Hemos alargado por las buenas condiciones y la gente respondió", concluyó.

Otras actividades de nieve

La estación de Port Ainé ha concluido temporada con un total de 34 nevadas que han acumulado 243 cm de nieve y un grosor máximo de 190 cm. Pese a cambios repentinos de temperatura, donde se han llegado a registrar hasta mínimas -12,4 grados, finalmente las condiciones han permitido abrir el 100% del dominio esquiable.

Por su parte, Espot Esquí ha acabado acumulando unos 245 cm de nieve con las nevadas registradas, el grosor máximo de nieve registrado ha sido de 180 cm y también se han registrado temperaturas invernales donde el lunes 8 de enero el termómetro descendió hasta a los -9,2 grados en la cota 2000.

En el Ripollès, la estación de esquí de Vall de Núria ha permanecido abierta un total 112 días. A lo largo de la temporada, las nevadas han sumado hasta 188 cm y el grosor máximo de nieve alcanzado a lo largo del invierno ha sido de 70 cm. El pasado martes 9 de enero fue la jornada más fría registrada, con -10,3 grados. La responsable de comunicación de Vall de Núria, Ruth Bover, resalta que "es una estación de montaña y el esquí es uno además de las actividades que se practican".

Durante esta temporada, Vall de Núria ha podido tener la zona de debutantes abierta todo el año. Algo que Bover considera muy positivo: "Para nosotros esto ya es muy bueno porque es una estación donde se inician muchos esquiadores", ha dicho. Además, la responsable de comunicación de Vall de Núria dice que "las últimas nevadas han atraído a visitantes", llegando a alcanzar una cifra de 10.000 visitantes en Semana Santa entre el 23 de marzo y el 1 de abril. "La nieve ha permitido llegar a fin de temporada en buenas condiciones", afirma.