Eduard Sallent, jefe de los Mossos: "Me presentaré a la plaza de mayor, es un acto de responsabilidad"

El comisario jefe Eduard Sallent fue nombrado máximo responsable de los Mossos d'Esquadra desde 2022. En las próximas semanas podría ser nombrado mayor del cuerpo, en el marco del proceso administrativo abierto por el Departament d'Interior para cubrir esta plaza. Se trata del segundo puesto creado de este rango, el más alto de los Mossos. Hasta ahora únicamente lo tenía Josep Lluís Trapero. El nombramiento de Sallent reafirmaría su autoridad dentro del cuerpo policial en un momento en el que la policía catalana afronta retos como el incremento de la delincuencia.

Esta semana se conocía la convocatoria de una futura plaza de mayor de los Mossos d'Esquadra. ¿Se presentará?

Es un acto de responsabilidad presentarse. Me confiaron la responsabilidad de liderar el cuerpo de Mossos con un equipo de comisarios. Se presenta una plaza administrativa de mayor y, por tanto, por coherencia, me presentaré.

"El cargo de mayor puede dar estabilidad en la gestión de la organización"

¿Supone este nombramiento un refuerzo para la actual cúpula policial?

Es una decisión administrativa y se debe circunscribir a eso. Se crearon dos puestos de mayor en 2016 y el Departament d'Interior ha realizado otras convocatorias en categorías profesionales. Hace 15 días se anunció a todos los mandos la voluntad de cubrir esa segunda plaza de mayor, como se ha hecho en el resto de rangos.

Pero la designación avala su gestión.

Puede dar estabilidad en la gestión de la organización, siempre dentro de la normalidad de una convocatoria administrativa para cubrir una plaza.

En todo caso seguirán afrontando el reto de combatir el incremento de la delincuencia en Catalunya. ¿Qué tipo de delitos han crecido más?

Tenemos un vector de incremento delincuencial que es el delito virtual, que crece año tras año, aunque ahora lo hace de forma exponencial. Aquí los policías tenemos muchas veces dificultades para poder actuar, no está vigente el principio de territorialidad y debes instar a comisiones rogatorias para perseguir el delito fuera de nuestras fronteras. Además, a veces el coste de una investigación es superior proporcionalmente a lo sustraído. Lo que está claro es que la principal transformación criminal que hemos tenido en nuestro tiempo es la aparición y consolidación del delito virtual.

"A partir de la pandemia hemos notado un crecimiento de las violencias, en un sentido amplio y transversal: lo vemos en las sexuales, que cada año registran incrementos importantes"

También hay más violencia.

Principalmente, a partir de la pandemia, hemos notado un crecimiento de las violencias, en un sentido amplio y muy transversal. Lo vemos en las violencias sexuales, en las que cada año tenemos porcentajes de incremento importantes. Alguien podría decir, desde un punto de vista cuantitativo relativo, que estos hechos no tienen tanto peso como otros delitos, pero seguramente las violencias sexuales son de las tipologías criminales más graves que podemos tener en nuestra sociedad y por eso merecen nuestra atención.

Sin embargo, el delito que más se denuncia son los hurtos.

El hurto siempre fue el delito rey en Catalunya. Se trata de una delincuencia que gira sobre hechos menos graves y se ha mantenido a lo largo del tiempo. Los hurtos, junto con el crecimiento del delito virtual y de las violencias, marcan el incremento de la delincuencia en Catalunya.

¿La inteligencia policial se puede aplicar a estos ámbitos?

La inteligencia policial nos debe ayudar en el futuro a predecir muchos delitos. La Comisaría General de Tecnología de la Información trabaja con modelos predictivos, como qué puede pasar en un barrio concreto de una ciudad si introducimos la variable de que vendrán 10 cruceros. A partir de ahí se puede establecer un plan de patrullaje o prevención para dar respuesta a una necesidad futurible.

"Los hurtos, junto con el crecimiento del delito virtual y de las violencias, marcan el incremento de la delincuencia"

Catalunya se ha convertido en el jardín de la marihuana de Europa, no solo por las numerosas plantaciones sino tambiñen por el desembarco de droga. ¿Qué tecnología permitirá aumentar la persecución de este delito?

Con las capacidades que tenemos queremos interactuar de forma conjunta por tierra, mar, aire y el mundo virtual. Así creamos sinergias para llegar a ámbitos en los que ahora tenemos dificultades para actuar. La lucha contra el tráfico de drogas es un ejemplo claro. El vuelo con drones nos permite sobrevolar zonas forestales de difícil acceso o estar pendientes de desembarcos de droga, cada vez más habituales en nuestro litoral. Es la combinación de lo sensórico, la detección de embarcaciones, la investigación y la información que ofrecen las patrullas marítimas. En la lucha contra este tipo de delincuencia la combinación de ámbitos sin duda nos traerá mejores resultados.

"La inteligencia nos debe ayudar a predecir delitos. Por ejemplo: ¿qué puede pasar en un barrio si introducimos la variable de que llegarán 10 cruceros? A partir de ahí se pueden activar medidas"

¿Seguirán con el 'abordaje integral' para combatir las violencias sexuales y machistas contra las mujeres?

Alrededor de estas violencias puede haber ideas preconcebidas que se deben demostrar empíricamente y por eso es fundamental la inteligencia: saber lo que nos está pasando. El plan de violencias sexuales que iniciamos hace más de un año nos permite el análisis de datos para identificar ámbitos en los que podemos realizar acciones preventivas o predictivas. En todo caso, la base es obtener conocimiento.

Está claro que la información y su intercambio es fundamental para el trabajo policial, como demuestran sus actuaciones contra el crimen organizado en colaboración con otros cuerpos de seguridad.

Estamos en un mundo colaborativo. A diferencia de lo que hemos vivido hasta ahora, el mundo virtual tiene una fuerte base colaborativa. Es fundamental para ganar eficacia y un elemento central es la capacidad de trabajar con otras agencias junto con la flexibilidad de adaptarse a formas diferentes de trabajar e integrar perspectivas diferentes. Es la llave del éxito, lo hemos visto en varias operaciones, como las que hemos realizado contra el crimen organizado marsellés.

Ahora el crimen no tiene fronteras...

La interconexión entre policías es muy importante. Hemos ganado en eficacia en el Estado al formar parte del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado, que nos permite compartir información y esfuerzos en la lucha contra la criminalidad. Igual que todo el trabajo con policías europeas, que están dando buen resultado.

¿Cuál es el futuro de los Mossos?

Nuestra fortaleza es que somos más competitivos desde el punto de vista adaptativo y nos podemos adaptar más rápido a los cambios. Hay tres elementos que debemos tener en cuenta de cara al futuro: los perfiles de los nuevos policías dentro de la sociedad de la información; el liderazgo dentro de la organización, y la formación y las competencias que les damos a los nuevos agentes. La formación es muy importante.

Hay un cambio digital que afecta al cuerpo.

Piense en el secreto profesional. Antes era muy fácil saber cuándo se vulneraba. Ahora, en cambio, cómo le explicas a una generación de profesionales habituada a colgarlo todo en la red que este secreto afecta a un bien jurídico y de la persona que no se puede vulnerar. Esa es la transformación que afronta el cuerpo de Mossos en la que la información seguirá siendo la materia básica de la función policial.

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