Protestas en prisiones de toda España por el asesinato de Nuria, la trabajadora de Mas d'Enric

Personal de seguridad, psicólogos, agentes sociales, sanitarios, docentes y otros funcionarios de tratamiento penitenciario de cárceles de todo el país han protestado al medio día de este viernes en las puertas de acceso a los centros carcelarios por el asesinato el pasado miércoles de Nuria, trabajadora de la prisión tarraconense de Mas d'Enric.

Los principales sindicatos del colectivo de las prisiones -Acaip-UGT, CCOO, CSIF y CGI- habían convocado para este viernes concentraciones en 81 centros penitenciarios, todos los regidos por el Ministerio del Interior. Los actos de protesta se han llevado a cabo en medio de un tenso silencio en buena parte de las prisiones. En algunas del sur, grupos de técnicos penitenciarios han llevado lazos negros en su vestimenta, si bien como iniciativa individual, explican fuentes sindicales.

En las concentraciones de Madrid, Andalucía, Comunidad Valenciana y otros puntos del país se seguían las noticias que iban llegando desde Catalunya, sobre las movilizaciones de sus compañeros de las prisiones regidas por la Generalitat, cuya protesta ha sido más airada y ha registrado incidentes y cortes de acceso, y en la que se piden dimisiones en el Departament de Justícia, incluida la de la consellera Gemma Ubasart.

Cambio de política

El asesinato de la trabajadora catalana es el primero que se produce de un profesional penitenciario en su centro de trabajo. El año pasado se produjeron en las prisiones que rige Interior 508 agresiones de presos a empleados públicos, y 582 se contaron en las cárceles catalanas, en cuyo sistema estadístico se suman también aquellos incidentes que no acaban en lesiones para la persona agredida. De ahí lo abultado de la cifra, mayor que la del resto de España.

"Consternación, rabia y dolor son los sentimientos de todos los compañeros de Nuria. La pregunta que nos hacemos los trabajadores penitenciarios es ¿dónde será el siguiente?", dice un comunicado de las centrales convocantes de los actos en las prisiones no catalanas. En la mañana de este viernes se ha leído la nota con un contenido que va más allá del luto, también es reivindicativo: los funcionarios exigen un cambio de política en el tratamiento de los presos.

En el comunicado de la protesta, los sindicatos denuncian que "la política penitenciaria actual centrada en maquillar estadísticas no tiene en cuenta uno de los principios básicos de nuestra legislación penitenciaria, que es adaptar el tratamiento al perfil concreto de cada interno, es decir, la individualización del tratamiento. No se pueden aplicar políticas generalistas a perfiles tan distintos".

El trágico suceso de Mas d'Enric ha vuelto a encender lo que las centrales califican de "una reivindicación histórica de todo el colectivo": que se considere agente de autoridad a los funcionarios de prisiones. Esa media llevaría aparejado mayor castigo para el preso que los agreda, y provocaría, en opinión de los sindicatos, más disuasión entre muros.

Esa exigencia, que los funcionarios de prisiones llevan años pidiendo a Interior, "debe ser asumida como prioridad para la clase política", dice el comunicado. "No se puede quedar en palabras vacías que no se concreten en las modificaciones legislativas precisas para dotar de esta condición a los empleados públicos que trabajan en las prisiones españolas".