NATALIDAD

La infertilidad es un problema de salud pública en España y esta es la hoja de ruta para atajarla

Los problemas de fecundidad llegan al Senado, donde diferentes expertos abordan cómo evitar que el país siga a la cola de la natalidad Europea

Imagen de una fecundación in vitro.

Imagen de una fecundación in vitro. / Shutterstock

María G. San Narciso
Nieves Salinas
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España cuenta con una de las tasas de fecundidad más bajas del mundo. En 2023, los nacimientos llegaron a su mínino histórico después de que en solo una década disminuyeran en torno al 24%, tanto por razones de naturaleza socioeconómica como cultural, educativa, sanitaria o laboral. Factores que hacen que formar una familia sea una decisión que cada vez se posterga más, lo que, a su vez, acarrea problemas de esterilidad e infertilidad. Sin embargo, y a pesar de que estos afectan a entre el 15 y el 20% de la población española, "aún existe mucho desconocimiento, estigma y falta de atención mediática y política". Ni siquiera mucha gente sabe bien qué es, más allá de cierta información simplista. Para acabar con esto, y evitar que España se suma en un invierno demográfico, los principales agentes del ámbito de la reproducción y la salud reproductiva han trazado una hoja de ruta para atajar cuanto antes "este problema de salud pública".

A través de los distintos estadios reproductivos de las ciudadanas españolas, el Documento de consenso sobre natalidad y salud reproductiva en España, presentado este lunes en el Senado, recoge recomendaciones sobre medidas dirigidas tanto al público, en general, como a los decisores públicos. Con él, buscan que se impulse la información y educación en salud reproductiva desde el colegio o el instituto. También, que se incida en la prevención de la infertilidad y esterilidad y su tratamiento a tiempo. O que se articule un sistema de abordaje eficiente de los retos sociosanitarios que plantea la reproducción y la reproducción humana asistida (RHA) en el país.

Porque "la sociedad sigue sin saber lo que es la fertilidad humana", como ha resaltado Elena Fernández, presidenta de la Asociación de Pacientes Red Nacional de Infértiles (RNI). "Y −añade−, si para la mujer es bastante desconocida, no os quiero ni contar la información que maneja un hombre. Para muestra, de las 3.124 asociadas que tenemos, solo hay 46 hombres. Porque se sigue pensando que la infertilidad es un problema de mujeres, cuando las estadísticas muestran que el porcentaje es el mismo".

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Coincide con ella Corazón Hernández, secretaria general de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), que enfatiza en que tanto los problemas sociales como los clínicos afectan a ambos sexos por igual. Por eso, piden seguir trabajando en colegios e institutos para que, desde chavales, toda la sociedad conozca cómo funciona el ciclo reproductivo y cuánto tiempo dura la reproducción activa. "Escuchamos a muchas mujeres, de todos los niveles culturales, decir: 'Si a mí esto me lo hubieran contado antes...'. Eso quiere decir que hay que empezar a educar en un nivel mucho más bajo, aunque después hagamos también el trabajo en las consultas de Ginecología", afirma.

Elena Palacio, de la Federación de Asociaciones de Matronas de España, propone que se utilice "la gran ventaja" que tienen estas profesionales a la hora de acceder a mujeres en edades tempranas mediante los programas de cribado de cáncer de cérvix que empiezan a los 25 años. Si en vez de limitar esas consultas a 10 minutos como se hace ahora se alargan para poder preguntarle a una mujer sobre "su deseo genésico o su proyecto de vida a nivel sexual y reproductivo", razona, les pueden ayudar a tomar decisiones en este ámbito que van a tener "repercusión a lo largo de toda su vida".

La portavoz de las matronas también considera importante que se implante una consulta preconcepcional de manera unificada y protocolizada en los diferentes servicios de salud, que sirva para educar a las mujeres de forma personalizada sobre su propio ciclo menstrual o sobre su salud. Cuanto antes se tenga información, mejor. Porque, como señala la portavoz de los pacientes, los problemas de fertilidad no siempre se resuelven de una forma tan sencilla como acudiendo a una clínica. Pese a que la medicina ha avanzado mucho, "no es magia". Tampoco la vitrificación de ovocitos, que siempre se hace mirando al futuro, hace que desaparezcan los problemas que que puede sufrir el cuerpo en el embarazo y cuyo riesgo aumenta con la edad, como la diabetes gestacional, la preeclampsia y los partos prematuros.

Inicio de negociación de partidos

Este documento, en el que han colaborado diferentes sociedades científicas, ha llevado un largo año de trabajo, según ha explicado en su presentación en el Senado el presidente de la Sosciedad Española de Fertilidad, Juan José Espinós. La secretaria de la entidad, Elisa Gil, ha señalado que esperan que "sea el inicio de negociación entre partidos para que las cosas empiecen a cambiar"; para que España deje de tener una de las tasas de natalidad más bajas en Europea o la más alta de madres mayores, lo que conducirá a que en "uno de cada seis parejas tengan problemas reproductivos".

Para eso, los portavoces piden, entre otras medidas, que se impulse una percepción positiva de la familia como elemento de cohesión y riqueza de una sociedad, con la creación de espacios amables con la vida familiar y la conciliación entre el ocio y la familia o posibilitando que los jóvenes que desean ser padres y madres no tengan que renunciar al acceso a espacios socioculturales ni al progreso laboral.

En el documento también sugieren que se desarrollen políticas que promuevan el empleo juvenil y el acceso a una vivienda asequible y de calidad, que proporcione una emancipación más temprana de los jóvenes españoles; que se emprendan políticas de apoyo directo a empresas y organizaciones laborales para que aprueben medidas que incentiven una conciliacion real entre vida laboral y familiar y fomenten la corresponsabilidad en la crianza y el trabajo; o que aseguren la adherencia a dietas saludables que favorezcan los mariscos, las aves, los cereales integrales, las frutas y las verduras, lo que se relaciona con una mejor fertilidad en las mujeres y una mejor calidad del semen en los hombres. Porque, como ha resaltado Mercedes López-Pardo, de la Federación Española de Nutrición, "no le puedes pedir a la gente que no puede llegar casi a comprar alimentos que adquiera los más caros". Aumentar la natalidad en España, han asegurado, es cosa de todos.