Esfuerzo económico

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Construcción de bloques de pisos en Barcelona.

Construcción de bloques de pisos en Barcelona. / JORDI OTIX

Raúl Vázquez

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El acceso a la vivienda continúa siendo cada vez más difícil para jóvenes y familias debido al alto precio del mercado. Así lo ha confirmado un estudio de la Cambra de Comerç de Barcelona, que ha permitido saber las comarcas catalanas más perjudicadas en este aspecto.

Hace veinte años, la media de ingresos que debía destinar una familia para pagar el alquiler de un piso era del 14,6%, mientras que actualmente este porcentaje asciende hasta el 22,5%. "Si no tenemos una población joven que pueda acceder a la vivienda de propiedad o de alquiler bajo unas condiciones económicas adecuadas, es muy difícil que puedan emprender un proyecto de vida, tener trabajo estable y poder contribuir a la seguridad social o cotizar", explica Joan Ramón Roviera, jefe de gabinete del departamento Estudis Econòmics i d'Infraestructures de la Cambra.

Territorios más afectados

Según el estudio, las comarcas que resultan más perjudicadas por la subida de los precios son las costeras del centro y norte de Catalunya, como el Barcelonès, el Garraf, el Maresme, el Baix Llobregat, el Baix Penedès o el Baix Empordà. En el caso del alquiler, el porcentaje de renta familiar que se destina es del 18%.

Sin embargo, respecto a las viviendas de propiedad, son los comarcas de la Cerdanya y el Vall d'Aran las más afectadas, con un porcentaje de renta familiar que asciende hasta el 40%, además de otros territorios del litoral donde hay más turismo, segundas residencias y actividad económica.

Propuesta de la Cambra de Comerç

La solución que propone la entidad es aumentar la oferta de vivienda de alquiler, pero sin limitar los precios, siguiendo lo que establece la nueva ley de vivienda que entró en vigor el año pasado, aunque aún no se ha aplicado, ya que se está a la espera de que el Gobierno central defina la lista de municipios con el mercado tensionado.

Además, reclaman a las administraciones públicas que se aumente el gasto público en vivienda, se incentive la inversión privada y se realice una mejora en el transporte para facilitar vivir fuera del núcleo urbano de Barcelona.