Investigación judicial

La víctima de Alves sufre "estrés postraumático severo", según los forenses

La jueza procesa a Dani Alves por violación a la joven del Sutton

Fin de la instrucción del caso Alves: todo listo para el gran juicio de la era del consentimiento

Dani Alves

Dani Alves / HENRY ROMERO / REUTERS

J. G. Albalat

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Los médicos forenses han dictaminado que la víctima de la presunta agresión sexual de Dani Alves sufre un "trastorno de estrés postraumátrico" de "intensidad globalmente elevada". Esta situación, inciden los facultativos, le provoca una "repercusión funcional y deterioro en varias áreas de funcionamiento" que se pueden relacionar "significativamente" con los hechos denunciados por la joven. El informe expresa que ese estrés es "severo".

Se trata de una de las pruebas que expone la jueza en su auto de procesamiento. Esta diligencia no estuvo exenta de polémica, ya que la Audiencia de Barcelona permitió que participara en la misma un perito designado por la defensa.

Síntomas y secuelas

Los forenses realizaron el pasado mes de junio, tal como ordenó la jueza, el examen psicológico. Primero un test y después una serie de preguntas, como es habitual. La magistrada permitió que le acompañara la psiquiatra que la trata desde que padeció la presunta violación.

A la vez, la togada dejó claro que únicamente se podían analizar los síntomas y las secuelas que tiene la mujer, evitando las preguntas sobre los acontecimientos que sucedieron en el interior del local, pues los hechos deben ser juzgados por los tribunales. Y así ocurrió. El letrado del jugador solicitó también en su día que se grabara esta diligencia, pero la jueza se lo denegó. Otros facultativos efectuaron un reconocimiento físico, en el que se constató que la víctima tenía erosiones en la rodilla.

Rápida investigación

Con la práctica de la prueba psiquiátrica, la investigación ya estaba prácticamente finalizada, pues ya habían declarado el imputado, la víctima, su prima y amiga, empleados de la discoteca y el amigo del astro brasileño que le acompañaba. El tribunal de la Audiencia de Barcelona que por segunda vez decidió mantener en la cárcel a Alves reconocía en su resolución que la instrucción del caso estaba prácticamente acabada e instó a la magistrada que dirige las pesquisas a que las pruebas que faltaban (es decir, el examen psicológico ya practicado) se llevaran a cabo "con la celeridad que exige la privación de libertad", a "fin de que en la máxima brevedad se proceda a concluir el sumario". Seis meses es un periodo que judicialmente puede considerarse breve.

El procesamiento era el último de los requisitos para enviar el caso a la Audiencia de Barcelona. La rapidez de la celebración del juicio dependerá del tribunal al que le toque juzgar al futbolista, aunque debe tenerse en cuenta que es una causa con preso y, por lo tanto, tiene prioridad sobre el resto de asuntos.