"Quiero ganarme la vida pintando otra vez"

El rostro de Miquel Fuster no es desconocido. Después de pasar 15 años viviendo en la calle, este artista barcelonés no solo decidió acogerse a los programas de reinserción de la Fundació Arrels, sino que se ha convertido en una de las caras más visibles de la asociación, puntal en trabajo con los sintecho en la ciudad. "Soy profesional del cómic y pintor, y he pasado 15 años de mi vida en la calle. Quiero volver a ganarme la vida pintando y espero que este blog me ayude a ello", se presenta Fuster en su blog (miquelfuster.com).

Nacido en Barcelona en 1944, Fuster -cuyas facciones explican sin necesidad de mediar palabra qué es vivir tres lustros al raso-, no se quita jamás la característica gorra de visera con la que se cubre la cabeza, regalada, como el resto de ropa que lleva. Con la gorra, cómo no, se ha dibujado en el autoretrato con el que participa en Retrats Sense Sostre. El hecho de ser artista hace su caso especial. Él no es solo el retratado, sino que es a la vez el pintor. Su obra, en aceite sobre tela, está expuesta desde hoy en Casa Piera, tienda especializada en materiales para pintura artística, en la calle del Cardenal Casañas, en Ciutat Vella, en la que Fuster siempre ha comprado sus pinturas. Ayer enseñaba su obra satisfecho de participar en la exposición junto a artistas como Benjamí Tous, Matilde Grau o Jaume Montserrat.

"El alcohol tiene gran parte de la culpa"

Fuster empezó a dibujar cómics en los años 60 para países como el Reino Unido y Suecia -"se ganaba bien, sobre todo teniendo en cuenta el cambio de divisa en la época". Pero la mala gestión del dinero -explica-, sumada a un desengaño amoroso, un incendio en su piso y la crisis del cómic le llevó a la calle, donde vivió 15 años. Las duras experiencias allí vividas - "te marchas de los albergues porque allí hay normas, colas y peleas con gente que está tan jodida como tú"- las ha retratado en el libro 15 años en la calle y explicado en charlas en colegios, institutos y universidades, organizadas por la Fundació Arrels para sensibilizar a la población sobre la realidad que hay detrás de estas personas. Personas.