ESTRENA SERIE EN HBO MAX

Steven Soderbergh: "Los móviles han arruinado la capacidad de crear tensión"

10 cosas que los Emmy 2023 no deberían olvidar

Del 'Círculo cerrado' de Soderbergh a la nueva temporada de 'Fundación': las 5 series para ver esta semana

Crítica de 'El resort' (Movistar Plus+): de la comedia romántica al misterio y más allá

Steven Soderbergh: "Los móviles han arruinado la capacidad de crear tensión"

Steven Soderbergh: "Los móviles han arruinado la capacidad de crear tensión" / Fingerprint Releasing

Juan Manuel Freire

Juan Manuel Freire

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Tener casi una hora de charla virtual con un cineasta importante, aunque sea compartida con otros tres medios de países distintos, es casi un milagro, sobre todo si tenemos en cuenta el ritmo de trabajo del entrevistado en cuestión. Pero el prolífico y, a menudo, brillante Steven Soderbergh, ganador de la Palma de Oro en Cannes con 25 años por 'Sexo, mentiras y cintas de vídeo', o del Oscar al mejor director por 'Traffic', quiso cedernos ese valioso tiempo para hablar sobre su miniserie 'Círculo cerrado' (HBO Max, desde el jueves, día 13) o sobre lo que quisiéramos. 

Esa nueva serie no es mal tema: es otro buen resultado de su alianza con el guionista Ed Solomon, su compañero de viaje en la app/serie 'Mosaic' de 2018 y el reciente 'thriller' de HBO Max 'Sin movimientos bruscos'. "La cabeza de Ed siempre está bullendo de ideas", explica Soderbergh con una sonrisa. "Que después me planta delante como esos tíos que van por Times Square con una chaqueta llena de relojes. Está todo el tiempo ofreciendo cosas. Y cuando me habló de su interés en hacer una variación de 'El infierno del odio', de Akira Kurosawa, no me pude resistir. De Kurosawa siempre me han gustado todavía más sus dramas criminales que sus películas de samuráis". 

Como el maestro japonés en 'El infierno del odio', Soderbergh cuenta aquí la historia de un secuestro que sale mal. Sin entrar en excesivos detalles, diremos que el matrimonio privilegiado de Manhattan que forman Sam (Claire Danes) y Derek (Timothy Olyphant), hija y yerno de un chef mediático, Jeff (Dennis Quaid), del que llevan los negocios, ha de lidiar una mala noche con la noticia de que han secuestrado a su hijo. Detrás de ello hay una red criminal liderada por la misteriosa Mrs. Mahabir (CCH Pounder), cuyo sobrino Aked (Jharrel Jerome) pierde todo el crédito una vez empiezan los problemas.

A Soderbergh le gusta trabajar con Solomon porque, según dice, sabe "crear historias que son muy activas y muy accesibles a un nivel superficial, pero que tienen una especie de aspecto subterráneo que evita que sean plástico de un solo uso". En este caso, debajo de una trama adictiva late cierta pregunta: "Si te dijera que voy a darte un millón de dólares por apretar este botón y que alguien va a resultar herido, pero que no sabes quiénes son, nunca lo sabrás y, además, están al otro lado del mundo… ¿Qué harías?". El aspecto subterráneo es la mecánica del karma

Todo está conectado

No es la primera vez que Soderbergh juega a unir los puntos entre personajes y puntos geográficos a priori distantes. Esa clase de conectividad en expansión "se parece a la vida", dice el director. "Y especialmente a nuestra vida ahora. Cuando hicimos 'Traffic', la idea era mostrar un poco los lazos invisibles que nos ligan a todos. Hoy en día no tendría el mismo sentido hacer esa película: nuestra experiencia del mundo se ha vuelto mucho más explícitamente conectiva". 

Es aquí cuando el director empieza a despotricar divertidamente sobre la implantación del 'smartphone', el invento que acabó con el suspense. "Antes alguien carecía de cierta información y podías jugar con ello un buen rato para crear tensión", explica. "Ahora estás jodido. Todo el mundo lo sabe todo rápidamente. Hace veinte años podría haber hecho diez episodios con esta serie. Pero por culpa de toda la tecnología que existe, nos las hemos visto y deseado para llegar a seis. Dos de ellos duran cuarenta minutos. ¡Y es porque todo el mundo lo sabe todo, todo el tiempo!". 

Por otro lado, este hombre enfadado habló un día del iPhone como la cámara del futuro. Con ella rodó dos películas: 'Perturbada' en 2018 y 'High flying bird' en 2019. En casi todos sus proyectos se ha marcado alguna clase de reto, se ha puesto a sí mismo las cosas difíciles. ¿Cuál era el principal desafío en 'Círculo cerrado'? "En este caso, lo complicado era manejar los hilos narrativos de manera que pudiéramos hacer creer al espectador que está pillando la trama, cuando en realidad solo iba a pillarla cuando nosotros quisiéramos. Y a un nivel puramente práctico, la agenda era muy agresiva. Ocho, nueve páginas de guion al día. Hacer eso intentando que existiera una especificidad en la gramática cinematográfica y en las interpretaciones… Eso me daba miedo. Pero yo necesito justamente eso para abrirme camino: miedo y un poco de Dr Pepper".

Hábitos culturales

Cuando no está rodando nueve páginas de guion al día, Soderbergh está viendo y leyendo cosas sin parar, como refleja esa querida lista anual de su blog. Le pregunto si puede revelar algo de lo que descubriremos el próximo enero. "En los últimos meses he vibrado con series como 'Enjambre' y, sobre todo, 'Dave', que me parece de lo más delirante de lo que he visto nunca. Pero este año, sobre todo, he leído muchísimo. Vamos solo por la mitad de 2023 y creo que voy por los cuarenta libros. Después he hecho los deberes y he visto muchas películas para prepararme para dos proyectos de cine que espero hacer. Uno es una pieza de género, pero de un género que nunca he tocado. El otro es una comedia, pero una clase de comedia que nunca he hecho; una diseñada para escandalizar y desconcertar".

Cuando Soderbergh habla de proyectos 'de cine', se refiere básicamente a la duración, al formato. Cree que hoy en día los directores "deben ser fluidos" y no resistirse a la idea de ver sus películas estrenadas directamente en plataformas, como cinco de las últimas seis que él ha dirigido. "Obviamente, todo el mundo quiere que su película se vea en cines, pero la realidad del mercado es que, sobre todo, funciona el espectáculo, alguna clase de espectáculo fantástico. Y el cine 'indie' de A24. En medio ya no hay nada: las películas con las que yo me hice famoso, como 'Un romance muy peligroso', 'Erin Brockovich' o 'Traffic', filmesde tamaño medio para gente adulta, han desaparecido de los cines". 

Suscríbete para seguir leyendo

TEMAS