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El curioso motivo por el que Alfonso Basterra no ha visto aún en prisión la serie de Asunta en Netflix

La crítica de Monegal: Netflix busca recuperar prestigio con ‘El caso Asunta’

Alfonso Basterra, en septiembre de 2013 horas después del asesinato de Asunta, seguido por los medios.

Alfonso Basterra, en septiembre de 2013 horas después del asesinato de Asunta, seguido por los medios. / ECG / Onda Cero

Eduardo Calle

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El creador del nuevo true crime de Netflix que acerca el crimen de la pequeña Asunta –suceso que conmocionó a Santiago de Compostela en el año 2013– a la plataforma de streaming norteamericana, el noiés Ramón Campos, ha revelado esta semana nuevos detalles de la serie El caso Asunta.

Un crimen difícil de entender

En un vídeo compartido por Netflix, Ramón Campos comienza asegurando que “el caso Asunta es un caso muy complicado de entender”. Por ello, el productor gallego reconoce que “era muy importante que el espectador tuviese claro desde el minuto uno que lo que le íbamos a contar era lo que había sucedido”. Para conseguirlo, se eligió como primera secuencia la entrevista en televisión de Alfonso Basterra y Rosario Porto cuando habían adoptado a Asunta. “Si a partir de ahí, cada secuencia que el espectador recuerda es igual a la realidad, le dices que te estoy contando lo que pasó”, declara Campos, quien añade que “lo primero que se eligió fue a actores que se pareciesen a los protagonistas para tener una base”.

Sobre Alfonso Basterra

Alfonso Basterra lleva casi 11 años encarcelado en Teixeiro, de donde únicamente salió para realizar las reconstrucciones del horrendo crimen, acudir a declarar en sedes judiciales o policiales, a la larga e intensa vista en la que fueron condenados o ante la sesión del recurso presentando en el TSXG. No hay constancia de que en todo este tiempo haya podido acudir a alguna visita médica en un centro hospitalario (Instituciones Penitenciarias es muy estricta a la hora de preservar el derecho a la intimidad de los reclusos); pero sí está contrastado que en estos casi 11 años privado de libertad Alfonso Basterra no disfrutó de ningún permiso penitenciario, a pesar de que, dado el tiempo transcurrido, sí que podría tener derecho a disfrutarlas.

Tampoco muestra interés por la producción en la que tiene, junto a su exmujer ya fallecida, Rosario Porto, un papel relevante por la condición ambos de culpables y condenados. Tampoco podría ver los seis capítulos si quisera. Netflix es una plataforma de pago que, como el resto de este tipo que requieren suscripción, están prohibidas en las cárceles de España.

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