Mayoría de 178 diputados

El Congreso aprueba la amnistía y abre la campaña electoral en Catalunya

Republicanos y posconvergentes sacan pecho de la medida de gracia y recuerdan que buscarán la autodeterminación

El Congreso aprueba la ley de amnistía con los votos del PSOE y sus socios parlamentarios

El Congreso aprueba la ley de amnistía con los votos del PSOE y sus socios parlamentarios / ZIPI / EFE / VÍDEO: EFE

Miguel Ángel Rodríguez

Miguel Ángel Rodríguez

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Pocas horas después del adelanto electoral en Catalunya y con el miedo instaurado en el Gobierno ante la posibilidad de que peligre la legislatura, el Congreso ha aprobado la ley de amnistía, la norma que Pedro Sánchez -ausente durante el debate- pacto con ERC y Junts para seguir en la Moncloa y que ha protagonizado la vida parlamentaria de los poco más de 100 días del actual Ejecutivo. En un debate en el que ya se ha notado el clima de precampaña electoral, PSOE, Sumar, ERC, Junts, EH Bildu, PNV, Podemos y BNG han respaldado la ley, todos ellos con la convicción de que cierra una etapa de conflicto en Catalunya, aunque con opiniones diversas sobre lo que está por venir. PP y Vox, en contra, han arremetido duramente contra Sánchez.

Un mes y medio después de que Junts rechazara la norma, este jueves sí se han cosechado los escaños necesarios para que la medida de gracia sea aprobada por el Congreso. Tampoco hubiera habido una tercera oportunidad. El bloque de la investidura -con la excepción de Coalición Canaria- ha dado su 'sí' a la amnistía, permitiendo que la norma continúe su tramitación en el Senado, donde aún le queda un periplo de casi dos meses ante la mayoría absoluta que tiene el PP en la Cámara Alta.

"Esta ley no pasará el filtro del Senado, de la justicia, de las instituciones que la tienen que evaluar. No pueden saltarse la constitución así", ha sido el aviso del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. En un discurso en el que ya ha dejado claro que los votos al PP en Catalunya no servirán nunca para apoyar al independentismo, ha repetido los mismos mantras de las pasada semanas, asegurando que Sánchez está en manos del expresident Carles Puigdemont, que "el Gobierno y sus socios son los mayores agentes de inestabilidad política" y que la aprobación de la amnistía es "la estafa que el partido de Sánchez está consumando con sus votantes".

Minutos antes, el portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, se ha centrado en arremeter contra el PP, sin mencionar a los independentistas, para denunciar que el único proyecto de Feijóo para Catalunya sea esconderse "detrás de los tribunales". "A España, lejos de romperla, la unimos y la vertebramos con nuestras políticas. (...) Sigan en las soflamas, sigan en la bronca, pero no nos esperen ahí", le ha espetado a la bancada popular. Mensajes claros de ambos de cara a las urnas: el PP alzándose como dique a los acuerdos con ERC y Junts; el PSOE como formación clave para solucionar el conflicto político.

El choque electoral

Y lo mismo ha ocurrido en la pugna entre ERC y Junts. Los posconvergentes se han arrogado la autoría de la norma, asegurando que el PSOE no impulsó la ley "por convicción", sino por un acuerdo con ellos. Pero, no solo eso. El diputado Josep María Cervera también ha recordado que la ley aprobada este jueves es “la mejor ley de amnistía posible” gracias a que su formación rechazó la versión anterior hace un mes y medio y presionó a los socialistas para que la norma cubriera a todos los implicados en el procés y fuera de aplicación inmediata. 

La respuesta, velada y sin referencias directas, de ERC ha llegado de boca la diputada Pilar Vallugera, que también ha reivindicado el origen de la ley en la insistencia de su formación y ha criticado el retraso de dos meses provocado por Junts con el único objetivo de blindar a Puigdemont ante los movimientos del juez Manuel García-Castellón: "Es para la gente que puso la cara, el cuerpo, para ellos estamos haciendo esto. No para esas personas con nombres y apellidos que pueden liderar partidos, porque nosotros ya sabíamos a lo que nos exponíamos". 

Lo que han dejado claro ambos diputados es que la amnistía no es el final. Cervera ha dejado claro que la aprobación de la norma abrirá "una ventana de oportunidad de negociar de tú a tú el futuro de Catalunya" con el Gobierno. Más contundente ha sido Vallugera: "No vamos a parar hasta el ejercicio del derecho de autodeterminación". 

Las claves de la norma

La norma, que se ultimó la pasada semana en la comisión de Justicia del Congreso, permitirá amnistiar todos los actos relacionados con el procés independentista desde el 1 de noviembre de 2011 y hasta el 13 de noviembre de 2023. En este periodo se incluyen no solo la organización y celebración de la consulta y el referéndum, sino también otros posibles ilícitos que guardan una profunda conexión con los mismos.

Sin embargo, el principal foco de discrepancia en la negociación ha estado en aquellos hechos que quedan excluidos de la medida de gracia. Fruto de estas tensiones, Junts rechazó la norma hace más de un mes para seguir presionando al PSOE. El texto final deja claro que tanto el terrorismo como la alta traición quedan fuera de su ámbito, aunque solo en su versión más grave. 

En el primero de los casos, se hace referencia a los hechos que hayan causado de forma intencionada graves violaciones de derechos humanos. Con este redactado, según los tres partidos, queda claro que tanto el expresident de la Generalitat como la secretaria general de ERC, Marta Rovira, también investigada por terrorismo en el Tsunami, se beneficiarán de la norma. En relación a la alta traición, se excluye aquellas acciones que hayan producido tanto una amenaza efectiva y real como un uso efectivo de la fuerza en contra de la integridad territorial o la independencia política de España.

Sigue la tramitación

Ya con el visto bueno del Congreso, la ley será remitida al Senado en los próximos días, donde el PP tiene mayoría absoluta. Justo esa mayoría fue la que usaron los populares en noviembre para modificar el reglamento de la Cámara Alta y poder retrasar ahora al máximo la ley de amnistía. El cambio introducido por el PP otorga a la Mesa del Senado la capacidad de decidir si una proposición de ley proveniente del Congreso se tramita por la vía de urgencia, lo que supone tener 20 días naturales para todas las cuestiones, o no, pudiendo estar la norma hasta un máximo de dos meses en el Senado.

Así, lo más seguro es que los conservadores apuren esos plazos. Para ello, ya han avisado que citarán a comparecer a distintos expertos para que den su opinión sobre la norma. Después, podrán vetar el texto, primero en comisión y más tarde en pleno, o enmendarlo por completo para dejar sin efecto la amnistía e incluir otros aspectos. Por lo tanto, se prevé que este trámite no termine hasta mediados de mayo. Después, la Cámara Baja deberá revertir todos los cambios. Así, la ley estaría aprobada y publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) a finales de mayo.