Compra de mascarillas

Armengol se considera víctima del 'caso Koldo' y defiende que todos los contratos de Baleares fueron legales

La presidenta del Congreso asegura estar "muy indignada" porque la mezclen con la presunta trama de corrupción y aplaude la contundencia del PSOE

Armengol, "indignadísima" con las acusaciones de corrupción, defiende la legalidad de su gestión en pandemia

Agencia ATLAS / Foto: EFE

Miguel Ángel Rodríguez

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Francina Armengol ha roto su silencio sobre el 'caso Koldo'. "Lo que me resulta absolutamente indignante es que, en todo caso, nosotros seríamos afectados, no para nada parte de nada relativo con corrupción", ha sentenciado después de que el Gobierno de Baleares que ella dirigió se viera salpicado por la investigación efectuada por la Fiscalía Anticorrupción. En concreto, en 2020 el servicio de Salud de Baleares compró mascarillas a través del exasesor de José Luis Ábalos, Koldo García, por un valor de 3,7 millones de euros.

"Estoy muy indignada. Indignadísima estoy. Me parece sumamente reprochable y me da asco pensar que alguien se pudo lucrar", ha arrancado la presidenta del Congreso este martes antes de mostrar su enfado porque se le "ponga al nivel" de los implicados en la supuesta trama de corrupción. En este sentido, ha afirmado estar "muy contenta" de que el PSOE "no se haya puesto de perfil, sino que haya dicho que tolerancia cero ante cualquier tipo de corrupción".

Tras días de silencio en los que ha sido señalada reiteradas veces por el PP, que le ha exigido incluso que comparezca para dar explicaciones, Armengol se ha mostrado sumamente enfada por las acusaciones y ha defendido que su Gobierno "se dejó la piel para proteger a la ciudadanía" y que para ello se hicieron "contratos de emergencia pero legales". Además, ha recalcado que esto "se garantizaban a través de todos los rigurosos controles del servicio de salud".

Los contratos

Armengol ha explicado que en el inicio de la pandemia todas las instituciones estaban intentando comprar mascarillas y material sanitario, pero que el mercado en Europa estaba "parado" y se empezó a buscar empresas en China. Según ha dicho, antes de que se centralizaran todas las compras por parte del Estado, "todo el mundo pasaba nombres" de empresas y vendedores a los que poder acudir para adquirir mascarillas. Después, según ha afirmado, esas empresas eran remitidas al servicio de salud que era quien "analizaba y contrataba".

En las pesquisas realizadas por la Fiscalía Anticorrupción se investiga un contrato realizado por IB-Salut, el servicio de salud de Baleares, realizado en 2020 por 3,7 millones de euros. "Ese contrato tiene la fiscalización favorable de la intervención general de la comunidad autónoma", ha asegurado Armengol. Además, ha relatado que las mascarillas que compraron se enviaron a analizar y que al ver que "no tenían la calidad por la que se había pagado", el Gobierno "reclamó en tiempo y forma". En concreto, piden la devolución de 2,6 millones de euros.

La presidenta del Congreso ha explicado que en el traspaso al actual Gobierno del archipiélago, en manos de la popular Marga Prohens, se informó de la existencia de este expediente. A este respecto, Armengol ha pedido que se reclame ese dinero a la empresa. Fuentes cercana a la presidenta de la Cámara Baja afirman que la apertura de este expediente y el inicio de las demandas por el alto coste de las mascarillas se emprendieron meses antes de que se celebraran las elecciones autonómicas del pasado mes de mayo, algo que denuncia el PP.

Explicaciones insuficientes

Las explicaciones de Armengol son del todo insuficientes para el PP. El portavoz de los populares en el Congreso, Miguel Tellado, ha denunciado que la expresidenta de Baleares sigue sin contestar a "dos preguntas básicas". Por un lado, si recibió "instrucciones" de Ábalos o de García para comprar las mascarillas a la empresa de la trama y, por otro, por qué tardó tanto su Gobierno en reclamar el dinero del contrato si las mascarillas eran defectuosas. Además, ha acusado a la presidenta de la Cámara de "mentir", ya que según ha dicho el expediente contra la empresa lo firmó Prohens.