Los agentes del CNI que habrían filtrado información a EEUU cayeron por una investigación interna

En septiembre pasado, cuando se les presentó la policía, los dos agentes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) a los que investiga un juzgado de Madrid no se esperaban su detención. Llevaban meses siendo investigados sin que lo supieran, desde que diera la alarma un sistema de control de robo de información y filtraciones que tiene el CNI. El centro puso entonces en marcha una investigación interna para confirmar esa fuga de datos e identificar a la totalidad de los autores, según fuentes cercanas al caso.

Las mismas fuentes confirman a este diario que son dos los agentes detenidos por la Policía Nacional bajo la acusación de un delito de revelación de secretos. Los dos fueron detenidos en septiembre pasado, en una operación llevada a cabo en Madrid rápidamente, muy poco después de que la Fiscalía hubiera recibido una denuncia del propio CNI sobre esta presunta traición. A la detención se le dio la máxima prioridad para evitar filtraciones sobre la denuncia que pudieran ponerles sobre aviso

Los dos agentes no eran conscientes, según las mismas fuentes, de la investigación a la que estaban siendo sometidos; la llegada de la Policía les pilló sin que hubieran podido escapar del país.

Robo de información

La justicia valora el caso manejando el supuesto más grave del delito de revelación de secretos, el de robo de información clasificada. La instrucción judicial trata de confirmar si esa información fue pasada a la inteligencia estadounidense, según adelantó este lunes El Confidencial. De los dos detenidos, uno de ellos está en prisión en un centro penitenciario madrileño; el otro está en libertad con cargos y sometido a medidas cautelares.

Los dos agentes, de nacionalidad española y no colaboradores sino funcionarios de plantilla del centro, incurrieron supuestamente en la conducta que les ha llevado ante la justicia a comienzos del verano pasado. El cohecho no figura en el relato que, en su denuncia, hizo el CNI a la Fiscalía, y es un extremo que aún ha de aclarar la investigación judicial.

El CNI tiene habilitado un sistema de detección de filtraciones y robo de información desde hace más de diez años, a raíz del caso Flórez. El ex agente del servicio de inteligencia español Roberto Flórez fue condenado en febrero de 2010 por sustraer información (supuestamente militar) para pasársela a la inteligencia rusa. En aquel caso, al agente le cayó una condena a 12 años de cárcel por un delito de traición. Desde entonces, el CNI tomó nota del punto débil e implantó discretos controles internos.

Al término de una visita a las tropas españolas desplegadas en Letonia, la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha confirmado este lunes la existencia de esa causa judicial, subrayando que se trata de un procedimiento que está bajo secreto y que se abrió por una denuncia del propio Centro Nacional de Inteligencia.