Movilidad

Rodalies registró 831 incidencias graves en 2022, según un informe del Govern

Nueva mañana de desconcierto en Rodalies: avería y retrasos en la R2 y la R11 y corte en la R3

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Un tren de Rodalies en la estación de La Garriga

Un tren de Rodalies en la estación de La Garriga / JORDI COTRINA

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Los problemas con el servicio de Rodalies siguen siendo material sensible tanto en términos de movilidad y afectación a los ciudadanos como para la batalla política que libran la Generalitat y el Gobierno. Este martes el Govern del 'president' Aragonès han presentado un informe que denuncia que Rodalies registró 831 incidencias graves en 2022, 2,27 al día. Que es un tema delicado lo demuestra que el Ministerio de Transportes no ha tardado en reaccionar admitiendo que hay incidencias, pero minimizando su impacto.

El Govern ha presentado el informe en un momento que no es inocuo. Una de las carpetas que hay en la negociación entre ERC y el PSOE sobre la investidura de Pedro Sánchez es que los republicanos ponen como condición el traspaso "integral" de Rodalies a la Generalitat. Es decir, que también quiere gestionar los trenes, la catenarias y las vías, que aún mantiene el Estado en su poder.

Además, la Generalitat no quiere la competencia así sin más, sino que pide que vaya acompañada de la dotación presupuestaria adecuada para hacer frente a todas las inversiones pendientes para mejorar el servicio. Una dotación que no ha transcendido públicamente, aunque en su día ERC habló de unos 4.000 millones de euros.

El informe del Govern -elaborado con datos de Adif, la empresa pública administradora de la infraestructura- asegura que estas 831 incidencias superaron los 100 minutos de retraso acumulado y "son atribuibles a la infraestructura o a los trenes". Además, establece que afectaron un total de 22.500 convoyes. El documento también trata de poner en contexto las cifras y llega a la conclusión que no han mejorado con el tiempo, sino todo lo contrario. Así, sitúa en 797 las incidencias graves de 2019; en 631 las de 2020 y en 706 en 2021. Por lo tanto, atendiendo a esta serie histórica, el año pasado se superó por primera vez la barrera de los 800.

La Generalitat pone el foco también en los minutos de retraso acumulados. Según los datos ofrecidos este martes, en 2011 la cifra del retraso en minutos acumulados alcanzaba los 200.000, mientras que ahora este número se ha doblado hasta los 400.000 minutos. "No mejoramos en nada. Solo vamos a peor", ha dicho la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, la encargada de presentar los datos tras la tradicional reunión de los martes del ejecutivo catalán.

Es imprescindible y urgente el traspaso integral

Pere Aragonès

— 'President' de la Generalitat

En una acción coordinada, han sido varios los miembros del Govern que este martes han criticado la gestión del Estado en este asunto y han reclamado que se deje todo en manos de la Generalitat. El primero, el 'president' Aragonès: "Es imprescindible y urgente el traspaso integral con la infraestructura y los recursos para revertir años de dejadez". La portavoz Plaja ha lamentado que los catalanes tienen un servicio "más propio del siglo XIX que del siglo XXI" y que el Gobierno debería acceder a cerrar cuanto antes el traspaso definitivo. "Peor no se puede hacer", ha concluido.

Los problemas continúan

Los datos disponibles sobre las incidencias del 2023 no parecen ser mucho mejores: de los 243 días primeros días del año en que la Generalitat tiene números, "solo en 44 no hubo ningún problema". De hecho, este martes ha sido una nueva jornada de desconcierto en Rodalies: se ha registrado una avería y retrasos en la R2 y la R11 y un corte en la R3.

El informe presentado por el Govern también denuncia otro problema: las incidencias que se registran en los trenes repercuten negativamente en otros medios de transporte público. El motivo es que, ante la dificultades que se encuentran en Rodalies, los usuarios acaban optando por otras vías para viajar y las acaban saturando. "La falta de fiabilidad y puntualidad del servicios de Rodalies de Catalunya tensiona el sistema de transporte público", concluye el documento.

Este fenómeno se ha detectado, por ejemplo, en la "demanda desproporcionada" que la Generalitat ha registrado en algunos corredores, como por ejemplo en el bus exprés entre Barcelona y Vilafranca que puede llegar a tener el aumento de un 30% de sus usuarios.

Guerra de cifras

Con los mismos datos que la Generalitat, el Ministerio de Transportes ha hecho una lectura opuesta de las cifras. Es decir, no niega que fueron 22.500 los convoyes afectados por las incidencias, pero añade que, si se tiene en cuenta que fueron 278.000 los que estuvieron en circulación, eso significa que el 92% funcionaron con "absoluta normalidad".

También asume el dato de los 400.000 minutos de retraso acumulados en 2022, pero considera que, si se tiene en cuenta que los trenes prestaron 26,5 millones de minutos de servicio, solo un 1,5% del tiempo hubo afectaciones graves. El ministerio admite que en 2022 hubo "incidencias" que supusieron "molestias" para los usuarios, pero si la Generalitat lo atribuye a la mala praxis, el Estado lo hace a las obras que se están haciendo para mejorar la red.