Entrevista | Àngels Pont Directora y fundadora del GESOP

Àngels Pont: "Las encuestas señalan el camino y lo que decían se ha dado"

Los datos completos de todas las encuestas del GESOP sobre las elecciones del 23J

Ángels Pont.

Ángels Pont. / Ricard Cugat.

Marta López

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Àngels Pont es directora y fundadora del Gabinet d’Estudis Socials i Opinió Pública (GESOP), la empresa de estudios demoscópicos que realiza las encuestas electorales para EL PERIÓDICO DE CATALUNYA y el resto de diarios del Grupo Prensa Ibérica y que en la reciente campaña electoral fue la más certera en sus pronósticos. El sondeo del 17 de julio, solo erró en la estimación de voto del PSOE y el ‘tracking’ publicado el 23 al cierre de los colegios acertó en los porcentajes de todos los partidos y en los escaños del PP.

 -Da la sensación, después de unas elecciones, que con las encuestas pasa un poco como con los partidos políticos. Todos los partidos han ganado y todos los encuestadores dicen que han acertado. Pero la sensación entre los electores es que al final las encuestas no acertaron y que erraron en mayor o menor proporción. ¿Usted podría decir en qué acertó y en qué no GESOP?

-La verdad es que nosotros estamos contentos de cómo nos han ido las encuestas, pero creo que no solo GESOP, sino también otras empresas han hecho una buena predicción de los resultados. Tenemos que tener en cuenta que las encuestas no son la realidad, nos ayudan a explicar la realidad y nos ayudan a explicar cuáles son las tendencias más importantes. Y todo lo que decían las encuestas se ha dado: el PP ha tenido un incremento importante de votos y ha ganado las elecciones. Era uno de los titulares de las encuestas. Otro titular de las encuestas era que el PSOE aguantaba bien los resultados que tenía y la mayoría de ellas incluso le daban un poco mejor de lo que había tenido en 2019. Lo que ha ocurrido es que ha sido todavía mejor de lo que de lo que preveían las encuestas, pero no había ninguna o prácticamente ninguna que preveía una bajada muy importante del PSOE. Vox y Sumar, con porcentajes diferentes, salían más o menos empatados en la mayoría de las encuestas. Por tanto, era un buen reflejo de lo que ha pasado finalmente.

-¿Dónde radica, pues, esta sensación como de fracaso entre la ciudadanía?

-Me atrevería a decir que esta sensación radica, incluso dentro del sector, en que después de las elecciones municipales se creó un marco mental de gran victoria del PP y de gran derrota del PSOE que ha marcado la percepción general de la población, pero incluso también de los especialistas del propio sector. Y había calado muy fuerte que la derecha tendría una mayoría muy amplia. Y entonces se daba por descontado de que iban a llegar a la mayoría absoluta y, por tanto, como no han llegado, parece que hay esta sensación de fracaso. Quiero recordar que las elecciones las ha ganado la derecha. La derecha sumada, Vox y PP, tiene 169 escaños. Nosotros, concretamente la noche electoral, dimos que sumados sacarían entre 167 y 173 o 174. El PSOE sacó el 28% de los votos la última vez y nosotros le dimos en la última encuesta 29%. Efectivamente, está por debajo de lo que sacó, pero estaba por encima de lo que había sacado.

-Defiéndame usted entonces las encuestas ante los descreídos

- Bueno, las encuestas sirven para señalar el camino, las tendencias por donde van las cosas y en este caso se han señalado. Quiero dejarlo muy claro. Es verdad que quizá algunas empresas se han desviado mucho de lo que ha acabado siendo. Pero insisto, lo que ha acabado pasando estaba señalado por las encuestas. Y quizá no se puso suficiente énfasis en decir qué bien que aguanta el PSOE porque esto sí que lo decían todas las encuestas y, en cambio, poníamos el énfasis en si Feijóo acababa teniendo la mayoría absoluta o no con Vox.

-Dice que señalan el camino, pero parece que lo que se les pide es que anticipen el resultado.

-Quiero repetir que una encuesta no sirve para saber exactamente la realidad. Entre otras cosas, porque es muy difícil hacer una encuesta en España con 52 circunscripciones. Incluso desde el punto de vista estadístico, es prácticamente imposible porque en estadística existen unos márgenes de error. Y en el caso del PSOE es verdad que ninguna encuesta le dio tan buen resultado como el que ha acabado teniendo. Bueno, el CIS le dio muy buen resultado. El CIS dijo que ganaba el PSOE. No ha ganado el PSOE. Y ahora salen titulares diciendo que la única encuesta que había acertado era el CIS, pero el CIS decía que ganaba el PSOE. Es un poco el mundo al revés.  Acertó, o en todo caso se acercó al resultado del PSOE, pero no de los otros. A mí además, no me gusta entrar en debate de esta empresa o institución porque creo que todo el mundo lo quiere hacer honestamente. Al final no estamos en una ciencia exacta, estamos haciendo estadística, estamos trabajando con la opinión pública. Estamos trabajando con los comportamientos electorales de las personas. Sabemos que hay personas, que ya saben su voto antes de empezar las elecciones. Pero sabemos que hay personas que tienen dudas. En estas elecciones hemos visto claramente que el PSOE ha tenido un voto útil muy importante contra la derecha que en cierto modo puede haber perjudicado a Sumar.

 -Por lo que ustedes vieron, ese voto útil, ¿se decidió en la última semana?

-Yo creo que fue no solo la última semana, sino incluso mucho en el último día. De hecho, nosotros en la última encuesta que hicimos, los bloques prácticamente los dimos a la décima. La derecha sumaba a la décima y en la izquierda había seis décimas de diferencia. Y las diferencias venían porque habíamos sobreestimado a Sumar y subestimado al PSOE, pero la suma de la izquierda era el dato que estábamos dando. Además, cuando les preguntábamos a los electores de Sumar y del PSOE mayoritariamente, los de Sumar dudaban con votar al PSOE y los del PSOE dudaban con votar a Sumar. Es decir, no ha habido muchas transferencias de voto entre bloques, ha habido transferencias de voto intrabloques.

-Si como usted dice, buena parte del voto se mueve a última hora, ¿qué opinión le merece que en la última semana de campaña no se hagan públicas las encuestas?

- Yo creo que se tendrían que seguir publicando, entre otras cosas porque se están haciendo y de hecho se están publicando, por tanto, no tiene ninguna razón de ser. Hay otras cosas de la ley electoral junto con esta que seguramente tendrían que actualizarse. Las encuestas son una fuente de información que nos va explicando lo que las personas opinan en los diferentes momentos. Creo que sí, que es importante que la gente pueda ir teniendo esta información.

-¿Es más difícil ahora hacer encuestas que hace unos años?-

- Es diferente, tampoco muy diferente. Pero bueno, van cambiando las formas de hacerlas. Primero eran presenciales, después por teléfono, posteriormente por internet. Tenemos que ir combinando métodos y desde el punto de vista político, pues sí que es más complicado porque hay más rechazo, en general. Hemos vivido una época de mucho cansancio político y esto nos hace un poco más difícil conectar con las personas. Desde punto de vista y del análisis, cada vez existe más movilidad, más volatilidad de voto. Es decir, cuanto mayor eres, y esto es lógico y seguirá siendo así, pues también más fiel eres a una marca, a una forma de pensar. Entre los jóvenes o cuanto menos mayor eres, va creciendo esta volatilidad de voto, pero incluso esta ya está bastante extendida. Y esto, pues hace también nuestro trabajo más difícil porque realmente cuando estás haciendo estimaciones, hay un número de personas que puede acabar votando a más de una formación.

-¿La gente suele mentir a los encuestadores, sobre todo si vota extremos?

-Mentir no, no sería la palabra. También depende de entornos. Por ejemplo, en Catalunya, el voto al PP, más que el de Vox, es más difícil de exteriorizar. Por el motivo que sea. Y esto es histórico y en el caso del PP y Catalunya es siempre un voto infravalorado, de personas que dicen que no saben, no contestan. No nos pasa tanto con Vox porque el de Vox es un voto con un perfil mucho más joven. Y normalmente las personas más jóvenes tienen una cierta tendencia a expresar lo que hacen. Nos pasa también con Sumar.  Pero en el caso de los partidos tradicionales, pues a veces a la decisión final de una parte del electorado se toma al final y se sabe que se toma el final. En el PSOE, es muy característico. Si vemos los 10 últimos años, casi siempre acaba teniendo mejor resultado que las estimaciones y es en parte es porque hay una parte importante de su electorado que durante el proceso ya te dice que simpatiza, pero no te dice que le votará, o se decide un poco más tarde.

-¿Observan ustedes muchos impactos en los comportamientos electorales? Por ejemplo, los debates

-Tienen un impacto sobre todo momentáneo, de animar o desanimar a la tropa. Lo que hemos visto nosotros en la última semana es que sirvió es para movilizar a las personas que tenían dudas, no tanto para cambiar votos. De hecho, en las encuestas publicadas de todos los días, vamos viendo que cada vez hay más gente que se va decidiendo. Pero nuestra estimación de los votos del PP del primer día al último prácticamente no cambió, un poco más los del PSOE, que fue hacia arriba, pero tampoco ha habido excesivas variaciones. Lo que sí se notó muchísimo fue el impacto de la convocatoria electoral. En las encuestas que teníamos antes de la convocatoria de las elecciones, en intención directa de voto, el PP iba por delante.  El día que se convocan las elecciones, el PSOE se puso por delante. En intención directa de voto en nuestras encuestas realizadas para Prensas Ibérica, desde la convocatoria de las elecciones, el PSOE siempre ha ido primero en intención directa de voto. Lo mismo pasó en la preferencia por el presidente. Hasta la convocatoria, Feijóo era el presidente preferido. Desde el día de la convocatoria, Pedro Sánchez empieza a ser el candidato preferido. Sale siempre en primera posición en todas las encuestas que hicimos desde la convocatoria hasta las elecciones. Desde el mismo día de la convocatoria, la izquierda empezó a movilizar.

-¿Les preocupa mucho a los partidos políticos las encuestas?

- Están esperando que salgan las encuestas para ver cómo les sitúan, por tanto, es un tema que les preocupa porque efectivamente es una fuente de información del electorado. Para sus estrategias electorales, ellos deben conocer, incluso estar obligados a conocer cuál es la sensibilidad general de la población, sus comportamientos y al final, sus preocupaciones.

-¿Esta ya trabajando el GESOP en alguna encuesta sobre las preferencias de gobierno de los españoles?

-No. (risas). Supongo que sí, que alguien debe estar trabajando ya en esto. Realmente es una época complicada también para hacer encuestas, pero creo que hasta septiembre no haremos otra encuesta política.

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