El Govern se propone destinar el 0,7% del PIB a la cooperación internacional en 2030

El Govern se compromete a aumentar cada año los recursos destinados a la cooperación internacional hasta llegar al anhelado 0,7% del PIB que marca la ONU. Así lo ha anunciado el 'president' Pere Aragonès, junto con la 'consellera' de Exteriors, Meritxell Serret, en su viaje a Colombia, en el marco de la gira latinoamericana, justamente uno de los países prioritarios para Catalunya en materia de cooperación y desarrollo. Sin embargo, los miembros del Consell Executiu han evitado marcar una fecha concreta para este objetivo, pero su intención es que sea en 2030, algo que podrían cumplir si las perspectivas económicas son las más optimistas.

La fórmula parte de que, en los presupuestos de 2023, la Ajuda Oficial al Desenvolupament (OAD) (de todos los departamentos del Govern, no solo el fondo directo) se sitúa en los 65 millones es decir, un 0,21% de los ingresos propios. Partiendo de este porcentaje, para llegar al 0,7%, se haría necesario un aumento de 0,49 puntos porcentuales durante los próximos 7 años. La propuesta, pues, para que la AOD catalán represente el 0,7% en 2030 es incrementar este porcentaje, como mínimo, 0,07 puntos porcentuales anualmente.

Llegar al 0,7% del PIB es una de las tareas pendientes del Govern desde hace décadas. La ONU lo acordó en 1970 y en 1994 la Generalitat se comprometió a hacerlo tras una protesta ciudadana que acampó en medio de la Diagonal de Barcelona. 29 años después, no se ha logrado. En 2010 se destinó un poco más del 0,4% del PIB, pero los recortes hicieron retroceder de nuevo esta partida. Actualmente está en el 0,21%, aunque el presupuesto de 2023 aprobado el pasado viernes en el Parlament amplia un 30% esta bolsa respecto al año anterior –de 35 millones a 45 millones de euros–.

La 'consellera' Serret ya adquirió el compromiso de hacer una nueva propuesta para logar llegar al objetivo del 0,7% cuando asumió el cargo en octubre. Ahora se ha materializado. El Govern se compromete a blindar con una fórmula que cada año crezca el porcentaje destinado a la cooperación internacional y que nunca decrezca, a pesar que el contexto económico sea negativo.

La propuesta, que ha sido trabajada entre los departamentos de Exteriors y Economia, quedará plasmada en el Plan director de cooperación al desarrollo 2023-2026 y será aprobada el próximo 28 de marzo por el Consell Executiu, antes de llevarla al Parlament. A día de hoy tan solo cinco países cumplen el hito del 0,7%, según datos de 2021 de la OCDE: Luxemburgo, Noruega, Suecia, Alemania y Dinamarca. España tampoco llega al 0,3%, aunque el Gobierno de Pedro Sánchez aprobó una ley hace un año para conseguirlo en 2030.

Los catalanes, a favor de la cooperación

Según una encuesta del Govern elaborada por SIGMADOS y avanzada por EL PERIÓDICO, tres de cada cuatro ciudadanos quiere que se cumpla el objetivo fijado por Naciones Unidas. Además, la inmensa mayoría de ellos –un 87,6%– está de acuerdo en ampliar este gasto también en un contexto de crisis como el actual. En términos generales, el apoyo a la aportación de dinero público en este tipo de políticas es muy amplio en Catalunya, llegando a alcanzar el 84,2% de los encuestados. Unas cifras que han mejorado mucho en los últimos años. En 2009 solo el 43,6% de los ciudadanos lo consideraba útil para mejorar la vida de lo países pobres. Ahora esta cifra llega al 68,9%.

Entre las principales preocupaciones que señalan los ciudadanos hay las desigualdades económicas y la pobreza (43%), la crisis energética (29,8%) o los conflictos armados (29,1%). Y un 66,8% cree que puede hacer algo para combatir estas desigualdades, hasta 24 puntos más que en la última encuesta de 2009. Sin embargo, el Govern también ha detectado que los ciudadanos desconocen qué es la cooperación al desarrollo y hasta un 38,5% ni siquiera ha oído a hablar de ello. Una situación que es especialmente preocupante entre los jóvenes.

País prioritario

El anuncio de Aragonès se ha producido en Colombia (en Villavicencio) y no por casualidad. Colombia ha sido tradicionalmente un país prioritario para la cooperación catalana y es, de hecho, el que más fondos recibe de la ayuda oficial al desarrollo del Gobierno ha recibido: más de 14 millones de euros desde 2017, según datos de la propia Generalitat . La participación activa de la diáspora colombiana en Cataluña y de organizaciones de personas exiliadas, y del Parlament que, a través de declaraciones y otros instrumentos, ha instado al Gobierno a mantener firme este compromiso hacia ese país.

Y es que Catalunya ha sido históricamente un país de acogida de población colombiana. Actualmente, un 4,31% de la población migrante que reside en Catalunya procede de Colombia. Gran parte de esa migración ha llegado al país huyendo del conflicto armado y siendo víctimas de amenazas contra su integridad física y la de sus familiares.

Esta prioridad, apunta el Govern, se va a seguir produciendo en los próximos años, centrado, sobre todo, en el programa de ayuda para la búsqueda de personas desaparecidas y en la protección de defensores de los derechos humanos, que siguen siendo objetivo de las partes antiguamente en lucha.