Los Mossos se alían con los puertos para luchar contra el tráfico de drogas

Los Mossos d'Esquadra han firmado este viernes un protocolo operativo con Ports de la Generalitat --el organismo encargado de gestionar los puertos deportivos y pesqueros catalanes-- encaminado a mejorar la comunicación entre el cuerpo policial y los guardamuelles sitos en las infraestructuras marítimas. Es decir, la Conselleria de Interior y Ports se comprometen a trabajar conjuntamente para garantizar la seguridad y la protección de unas instalaciones, los puertos, cuya seguridad es clave para prevenir, entre otras actividades ilegales, el tráfico de drogas.

En palabras del director general de la Policía, Pere Ferrer, “en el contexto actual es estratégico reforzar los canales de comunicación con los puertos, no sólo para reforzar la seguridad de estos equipamientos, sino para perseguir el tráfico ilegal de drogas en Catalunya”.

Ferrer recordó que "los puertos son una vía de entrada para muchas drogas ilegales, y la mejora de la comunicación entre los guardamuelles y los Mossos ayudará a frenar su distribución".

Un buen ejemplo es la detención por parte de la policía catalana de 13 personas la semana pasada (cuatro pasaron a disposición judicial) que transportaban droga con una narcolancha y la descargaron en el puerto de Mataró, la llamada Operación Pekín, cuya investigación sigue abierta. Los Mossos recibieron el aviso de la llegada de una lancha de gran potencia cargada de fardos en una zona privada del puerto de la capital del Maresme y pudieron actuar con celeridad, una dinámica que con la firma del protocolo se intensificará para mejorar la lucha contra el tráfico de drogas. La cooperación reforzada entre Mossos y las autoridades portuarias ayudará también a prevenir accidentes, incendios y otras emergencias.

De hecho, el protocolo establece una serie de procedimientos y medidas que permitirán a los Mossos y a los guardamuelles coordinarse de forma eficaz en situaciones que requieran la intervención policial. Entre las medidas acordadas se encuentran la creación de un sistema de comunicación directa e inmediata entre ambos cuerpos, la definición de las áreas de responsabilidad de cada uno y la planificación conjunta de ejercicios y simulacros para mejorar la coordinación y la respuesta en situaciones de emergencia.

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