Disturbios en la capital catalana

14 detenidos en Barcelona tras la manifestación en favor de Hasél

Los incidentes, tras la marcha convocada por la CUP, se extendieron por el Eixample y la Rambla

Un grupo de encapuchados prendió fuego a un furgón de la Guardia Urbana con un agente dentro

La noche se salda sin encontronazos directos entre la policía y los manifestantes, aunque sí hubo daños materiales

Fuego en una furgoneta de la Guardia Urbana

RICARD CUGAT

Xabi Barrena

Xabi Barrena

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Transcurridos 12 días desde el inicio de las protestas por el encarcelamiento de Pablo Hasél, y tras un par de días de tregua, los alborotos tomaron de nuevo el centro de Barcelona. Y lo hicieron, como es habitual, tras una manifestación que transcurrió en los márgenes de la normalidad y empleando, eso sí, una nueva táctica, la de rehuir el cara a cara con las fuerzas policiales. Un 'quemar y correr', en el caso de cajeros de entidades financieras o de algunos contenedores o bien "derribar y correr", para las motocicletas de alquiler y el mobiliario urbano de la Rambla de Catalunya. El incidente de mayor gravedad se registró en la Rambla, cuando un grupo de encapuchados prendió fuego a una furgoneta de la Guardia Urbana, con un agente dentro, que tuvo salir por la puerta del copiloto. Los destrozos causados por algunos manifestantes por el Eixample, tras ser dispersados por la policía en la misma Rambla, se saldaron con 14 detenidos.

La concentración iniciada este sábado en la Plaza de la Universitat no puede ubicarse solo en el terreno de la libertad de expresión del rapero leridano. De hecho, los convocantes, entre ellos Arran, la CUP (en plena negociación para entrar a formar parte o no del próximo Govern), Endavant, el Sindicat d'Estudiants dels Països Catalans (SEPC) y los CDR y reclamaron la "amnistía total, disolución de los antidisturbios, autodeterminación y pan, techo y trabajo". Un 'totum revolutum' que bajo el lema "Sense futur no tenim res a perdre", acompañado de la etiqueta #Fins que Caiguin, se concentró delante del edificio histórico de la Universitat de Barcelona y donde confluyeron tres columnas de manifestantes que habían partido una hora antes de la plaza de Lesseps, del cruce de Gran Via con la calle de Marina, y de la plaza de Sants.

Además de en Barcelona, ha habido protestas también en el resto de capitales catalanas, en las que apenas ha habido incidentes. En Tarragona, un grupo ha roto las cristaleras de una oficina bancaria y han pintado diversas consignas en mobiliario del campus universitario de la ciudad. En Lleida apedrearon una patrulla de la policia municipal y se registaron importantes daños en los principales ejes comerciales de la ciudad. En Sabadell, al acabar un acto de protesta, un grupo de personas ha levantado contenedores en los laterales de la Gran Via. Previamente, habían lanzado material pirotécnico y botes de pintura negra contra los agentes de la brigada ARRO que custodia el edificio de los juzgados de Sabadell. Fuentes de los Mossos d’Esquadra, han informado de que en ninguna de las dos ciudades se han producido detenciones.

Condenas de los hechos

El presidente en funciones Pere Aragonès ha maniestado su condena a los hechos con el siguiente mensaje: "Siempre al lado del ejercicio de los derechos y las libertades de manera pacífica, nunca de los actos vandálicos o la violencia. El saqueo o destrozo de comercios, la quema de mobiliario o el ataque a trabajadores públicos no son ni libertad de expresión ni de manifestación". Al igual que la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que ha recordado que "el derecho a la protesta es totalmente legítimo. La violencia y el vandalismo no", y añadesu "condena rotunda a los hechos violentos de hoy en Barcelona después de una manifestación pacífica" y su "apoyo a la Guardia Urbana de Barcelona y a los agentes de la comisaría de las Rambles, los vecinos y los comerciantes afectados por los disturbios".

El 'conseller' de Interior, Miquel Sàmper, ha indicado a través de Twitter que ha hablado con la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y que condena todos los actos violentos ocurridos en la capital catalana, "especialmente el grave incendio de una furgoneta de la Guardia Urbana de Barcelona". "No puede haber espacio para esta violencia reiterada. Apoyo a la Guardia Urbana de Barcelona, Mossos, el SEM y Bombers", concluye el conseller. A la condena se ha sumado también el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. "Inaceptables los actos de vandalismo y violencia que está sufriendo esta noche Barcelona. Todo nuestro apoyo a la Guardia Urbana, Mossos y agentes de Policía", ha tuiteado el jefe del Ejecutivo.

La condena ha llegado también por parte de los sindicatos policiales que han manifestado su indignación a través de mensajes en Twitter, en algunos casos interpelando a los partidos que están negociando la formación del Govern con la CUP.