EN LA PLAZA ARTÓS DE BARCELONA
El fiscal reclama cuatro años para un ultra por agredir a un mosso con una bandera
La acusación rebata la petición inicial tras confesar el imputado la agresión al agente
La policía tuvo que separar a dos grupos de ideología contraria para que no se enfrentasen
J. G. Albalat
Redactor
Ha trabajado en el Diario de Barcelona, El País y AVUI. Desde hace años en El Periódico cubriendo los acontecimientos judiciales. Premios Ortega y Gasset, Save the Children, Ramon Barnils y Josep Maria Planes por la investigación del 'caso Maristas' sobre abusos sexuales en los colegios. En el 2016, mención honorífica de la Generalitat en el Día de la Justicia. Colaborador de publicaciones jurídicas. Profesor asociado Master de Criminología de la Universitat de Barcelona.
La fiscalía ha solicitado este miércoles cuatro años y dos días de prisión para M. R. C. que el 17 de octubre del 2019 participó en una manifestación ultraderechista en la plaza Artós de Barcelona convocada a través de las redes sociales y golpeó a un mosso con el palo de una bandera cuando la policía intentaba separar a los integrantes de este grupo con otro de ideología contraria. La acusación pública le imputa un delito de desordenes públicos y otro de atentado a la autoridad con uso de instrumento peligroso y ha rebajado la solicitud de pena inicial, que era de siete años y medio de cárcel. En el juicio se ha celebrado en la Audiencia de Barcelona el imputado a reconocido que agredió al agente por nerviosismo, pero que no tuvo la intención de menoscabar su integridad física. El policía, que no sufrió lesiones, también le ha identificado.
Los hechos ocurrieron sobre las 21 horas de ese 17 de octubre, cuando el acusado se encontraba formando parte de una manifestación ultra en “defensa de España” que no había sido comunicada a la autoridad gubernativa y que había sido convocada a través de las redes sociales. Portaba una bandera de gran tamaño con un palo de madera de un metro aproximadamente. Frente al numeroso grupo en el que se encontraba, compuestos por unas 250 personas, había otro de 400 individuos, muchos de ellos encapuchados de ideología contraria, que se reunieron también sin haber comunicado formalmente la concentración.
Cordón policial
Ante esta situación, los Mossos formaron dos líneas de separación para evitar que se enfrentaran los dos colectivos. El grupo en el que se hallaba el acusado, sostiene el fiscal, intentó romper el cordón policial. Entonces, , M. R. C. , detalla la acusación, "con ánimo de menoscabar la integridad física”, golpeó a un agente con el palo de la bandera. El mosso no sufrió lesiones debido a la protección que portaba. El imputado estuvo 15 días en prisión.
El acusado ha reconocido que asistió a la manifestación al recibir un mensaje de un amigo. Fue ha admitido, con una bandera de los Tercios de Flandes, con el águila bicéfala, y que acudieron otro grupo de signo contrario, “CDR y gente de extrema izquierda”, precisó. Según su versión, la policía hizo un cordón para separar a ambas concentraciones. “Varias calles estaban bloqueadas”, ha explicado. “Nos comenzaron a llegar petardo y ahí comenzó a calentarse la cosa”, ha recordado. El joven ha reconocido que agredió al joven.
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