El TJUE da la razón a Junqueras y le reconoce su inmunidad como eurodiputado

El presidente del Parlamento Europeo, David-Maria Sassoli

El presidente del Parlamento Europeo, David-Maria Sassoli / periodico

Silvia Martínez / Estrasburgo

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El líder de ERC, Oriol Junqueras, debería haber sido reconocido como eurodiputado desde el momento en el que la Junta Electoral Central proclamó oficialmente los resultados de las elecciones del 26 M, el 13 de junio, gozar desde entonces de la inmunidad que acompaña al cargo y haber sido excarcelado para recoger su acta. Así lo ha sentenciado este jueves el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) en un fallo que da la razón al líder independentista catalán, supone un varapalo para la línea defendida por el Tribunal Supremo y abre la puerta a que Carles Puigdemont, Toni Comín y Clara Ponsatí consigan sus actas de eurodiputados.

“Una persona que resulta elegida al Parlamento Europeo adquiere la condición de miembro de dicha institución por el hecho y desde el momento de la proclamación de los resultados electorales, de modo que goza de las inmunidades reconocidas por el artículo 9 del protocolo”, señala la sentencia que también precisa que dicha inmunidad “implica el levantamiento de la medida de prisión provisional impuesta para permitir al interesado desplazarse al Parlamento Europeo y cumplir allí las formalidades requeridas” aunque se encontrara “en prisión preventiva en un proceso penal por delitos graves”. 

En el caso de Junqueras esto significa que el Supremo debería haberle dejado salir de la cárcel, donde cumplía prisión preventiva, para poder acudir a la sesión constitutiva el 2 de julio en Estrasburgo y si creía necesario mantenerlo en prisión “solicitar a la mayor brevedad posible al Parlamento Europeo la suspensión de la inmunidad” por medio de un suplicatorio. Algo que el Supremo no hizo. Es más, el alto tribunal español rechazó el permiso extraordinario solicitado por Junqueras para acudir a acatar la Constitución española, tal y como exige la ley electoral española, y decidió plantear varias cuestiones prejudiciales al TJUE. 

A mediados de octubre el líder político catalán fue condenado a 13 años de cárcel por sedición y malversación. De ahí que el fallo no implique necesariamente que el dirigente catalán podrá salir de prisión. Según la corte europea, es el Supremo quien deberá ahora “apreciar los efectos aparejados a las inmunidades de que goza el señor Junqueras en otros posibles procedimientos”.

La sentencia sigue la línea del abogado general de la UE, Maciej Szpunar, que en sus conclusiones del pasado 12 de noviembre ya recomendó reconocer la inmunidad y rechazó las alegaciones de España de que no eran eurodiputados porque no acudieron a la JEC a acatar la Constitución. La corte europea no entra a valorar directamente esta cuestión pero desvincula el acceso a la condición de eurodiputado de este requisito.

Repercusiones para Puigdemont y Comín

Los primeros en beneficiarse de este fallo pueden ser ahora Carles Puigdemont y Toni Comín, además de Clara Ponsatí una vez se consume el brexit y España sume los escaños adicionales que le corresponderán, ya que también obtuvieron su escaño. El presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, ha dado orden este mismo jueves a los servicios jurídicos de la cámara de “que evalúen lo antes posible los efectos de la aplicación de la sentencia en la composición del Parlamento” y el dictamen podría estar listo tan pronto como “este viernes”.

Varias fuentes consultadas consideran que la sentencia es “clara” y que “no tiene vuelta de hoja” y dan por hecho que el Parlamento Europeo reconocerá a los dos políticos independentistas la condición de eurodiputados. Es más, según han confirmado varias fuentes de la Eurocámara, los servicios de seguridad de la institución “ya han dado la orden" de que pueden acceder a las instalaciones del Parlamento, algo que tenían prohibido tras la reactivación de la Euroorden. Si se confirma en las próximas horas su condición de eurodiputados, la única forma en la que España podrá mantener la tramitación de la euroorden será que el Supremo pida el suplicatorio a la cámara, un procedimiento que podría prolongarse hasta seis meses y que daría un nuevo balón de oxígeno al ex president.