EN EL PARLAMENT

JxCat y ERC ratifican la declaración del 9-N pese al aviso de los letrados

La oposición elude votar la moción de la CUP que desafía al Tribunal Constitucional

riera

riera / periodico

Júlia Regué

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Los independentistas han ratificado este jueves en el Parlament su voluntad de lograr la desconexión y recuperar las leyes suspendidas o anuladas por el Tribunal Constitucional (TC). La moción, que se reafirma en la declaración de soberanía del 9 de noviembre del 2015, ha levantado ampollas entre sus impulsores, la CUP, y sus socios, JxCat y ERC, después de que estos últimos la enmarcaran en el mero "simbolismo". El texto ha salido adelante pese a la advertencia de los letrados de la Cámara, que han pedido no tramitarlo.

El debate en el pleno se ha iniciado con el aviso de los asesores jurídicos del Parlament. En una carta leída por el secretario de la Mesa, David Pérez, han señalado que el texto final sometido a voto "no resuelve las cuestiones inicialmente advertidas respecto al pronunciamientos del TC". Caso omiso. La votación se ha sacado adelante con los apoyos previstos y con una bancada naranja manos arriba. Tampoco socialistas ni populares se han pronunciado.

CsPSC y PPC han exigido hasta el último minuto una reunión urgente del cortafuegos del debate en el pleno. Todos ellos ya presentaron sus peticiones de reconsideración la semana pasada, pero fue en vano debido a la mayoría independentista en este órgano. El intento de trasladar el rifirrafe al hemiciclo para forzar su convocatoria tampoco ha funcionado. El presidente del Parlament, Roger Torrent, no ha reculado. El texto aprobado corre peligro de ser suspendido si algún grupo lo impugna ante el TC. 

Rivera se dirige a Sánchez

El presidente de CiudadanosAlbert Rivera, ha reclamado este mismo jueves al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que recurra el texto ante el alto tribunal. "Sánchez debe rectificar y recurrir inmediatamente al TC y suspender la moción separatista aprobada hoy otra vez en el Parlament contra la Constitución y la convivencia. Volvemos a las andadas", tuiteó. 

El portavoz de Cs, Carlos Carrizosa, ya lo ha dado por noqueado y lo ha definido como una maniobra para ahondar en el "victimismo" de los independentistas. Ha acusado a la Mesa de "incurrir en responsabilidades personales innecesariamente" y de "dejarse arrastrar por la CUP".

Desde la bancada del PSC, Ferran Pedret ha diagnosticado que "persisten en el error de imponer un proyecto político sobre la mitad de un país que no lo quiere ni lo comparte" y ha recordado que "fuera de las paredes de la Cámara no hay mayoría independentista".

Para los populares el escrito es tan solo la "carta de presentación" del 'president' Quim Torra ante el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en respuesta a su actitud de "querer agradar al independentismo".

"Me suena antiguo"

La propuesta de la CUP tampoco ha entusiasmado a sus socios en la votación. La portavoz de los 'comuns', Elisenda Alamany, les ha reprochado que "sigan mirando atrás, anclados en el pasado y en la gesticulación", y ha recibido el asentimiento del republicano Sergi Sabrià.

"Me suena antiguo", ha reconocido el portavoz de ERC. "Es un gesto simbólico pero poco efectivo", ha disparado a los anticapitalistas. "Nos dirigimos a los convencidos y no a los que nos falta por convencer. No se trata de ser más independentistas sino de ser más los independentistas", ha resumido. 

El posconvergente Josep Costa ha certificado que "Catalunya no tiene ni Constitución ni Estatuto" y ha cargado contra el PP por "tener blindada la mayoría" en el TC y usar la Carta Magna como "camisa de fuerza".