Espaldarazo a Rajoy

Catorce jefes de Estado y gobierno europeos, entre ellos Angela Merkel, Jean-Claude Junker o el húngaro Viktor Orban, corearán todos a una, en el congreso del Partido Popular Europeo (PPE) que se celebrará hoy y mañana en Madrid, que España y sus reformas son un ejemplo a seguir, después de la tormenta interna en el PP, el desafío al alza catalán y unas encuestas que indican que Ciudadanos está ganando terreno a los conservadores. Todo un espaldarazo internacional a las reformas económicas y a la gestión de Mariano Rajoy en Catalunya que impulsará su candidatura después de que los reproches que Bruselas hizo a los presupuestos del 2016 -que ayer fueron aprobados- ensombrecieran la precampaña conservadora basada precisamente en trasladar una imagen de credibilidad y estabilidad que convezca a los españoles de volver a confiar en el PP.

La reunión llega después de unos días marcados por las tensiones internas, consecuencia de los choques entre ministros y la falta de coordinación, que han puesto en entredicho el liderazgo de Rajoy. Pero el equipo del presidente espera que los mensajes laudatorios de los referentes de la derecha europea hacia Rajoy, como el impulsor de las reformas, y acerca de la necesidad de que en España sigan las medidas destinadas a la recuperación económica disipen definitivamente las dudas sobre su candidatura.

LA COYUNTURA

La fecha del cónclave se eligió hace tres años, y por tanto no se puede atribuir al comité de campaña popular la brillante idea de que Rajoy reciba el calor de su familia política a dos meses de las elecciones. Pero sí es achacable al líder del PP el trabajo necesario para que sus colegas decidieran, hace año y medio, que el congreso se celebrase en Madrid. Según el secretario de relaciones internacionales del PP, José Ramón García-Hernández, el PPE quiso con este gesto «hacer un reconocimiento» al país y al presidente que ha conseguido disipar las «dudas» que España generaba en la UE.

Como anfitrión del congreso, Rajoy entregará hoy el premio al mérito del PPE a Herman Van Rompuy y José Manuel Durao Barroso -y, fuera del marco del congreso, un galardón a Juncker-, dirigirá unas palabras a sus colegas previas a la cena y mañana, después de varias reuniones bilaterales, clausurará la cumbre con un discurso que su equipo califica de «potente» y que dejará mensajes en clave electoral. Junto a él, María Dolores de Cospedal, Soraya Saénz de Santamaría, Esperanza Aguirre y Alberto Nuñez Feijóo tomarán también la palabra. José María Aznar, por contra, ha declinado la invitación.

LA INTEGRIDAD TERRITORIAL

Francia, Alemania y España han consensuado una resolución sobre la integridad territorial, a la que previsiblemente se adherirán el resto de miembros del PPE, en cuyo borrador se plasma la versión del Gobierno central sobre el conflicto catalán. El documento señala que los tratados «no reconocen la libre determinación» y por tanto los ciudadanos de territorios que promuevan una declaración de independencia «perderían su estatus como ciudadanos europeos».

Asimismo, incluye una advertencia directa a Artur Mas: la UE es una «comunidad de derecho» - señala la resolución- donde «nadie está por encima de la ley». Rajoy se apuntará así un tanto después de granjearse el apoyo de Barak Obama, David Cameron o Merkel en plena campaña de las catalanas.

OTROS PARTIDOS

El presidente saca partido por tanto a su posición como jefe del Ejecutivo, una estrategia que repetirá de aquí a diciembre en cuatro cumbres más. El líder del PSOE, Pedro Sánchez, exhibirá por su parte que también cuenta con apoyos en la UE en una reunión hoy en París con François Hollande y Manuel Valls. El país galo es una de las grandes referencias del PSOE. Por ejemplo, en laicidad, materia en la que el partido propone derogar el concordato con la Santa Sede y desterrar la asignatura de religión del expediente académico. El ejemplo, dijo ayer Sánchez, «es Francia», informa Juan Ruiz Sierra. Podemos, por su lado, aún no tiene nada cerrado pero es previsible que reciba en campaña el apoyo del griego Alexis Tsipras, informa Iolanda Mármol.