El juez retira el pasaporte a los dos torturadores franquistas

El exinspector de policía Antonio González Pacheco, alias Billy el Niño, y el excapitán de la Guardia Civil Jesús Muñecas se mostraron ayer muy «contrariados» ante la decisión del juez Pablo Ruz de retirarles el pasaporte y obligarles a comparecer semanalmente en un juzgado, según fuentes presentes en la declaración. Los policías, acusados de torturas entre los años 1971 a 1975, se negaron a ser extraditados a Argentina, donde la jueza María Servini investiga una querella por crímenes durante el franquismo. La próxima semana la sala penal de la Audiencia Nacional estudiará si les entrega o abre un proceso en España por los delitos por los que han sido reclamados.

Billy el Niño y Muñecas llegaron a la Audiencia casi una hora y media antes de su comparecencia ante el juez. El magistrado les leyó los cargos por los que Servini ordenó su búsqueda y captura el pasado septiembre. Billy el Niño, según fuentes jurídicas, escuchó la lista de las 13 personas que le han acusado de haberlas torturado mientras estaban detenidas. El policía, según estas fuentes, aseguró al juez que no los conocía ni sabía quiénes eran y que no había tenido trato con ellos. La misma versión ofreció Muñecas, que ha sido señalado por Andoni Arrizalabalada como el agente de la Guardia Civil que le torturó durante los 22 días que permaneció incomunicado.

A pesar de ello, el fiscal solicitó la adopción de las medidas que luego acordó Ruz. El togado justificó esta decisión porque el Gobierno decidió el pasado 29 de noviembre tramitar la extradición planteada por Argentina. Asimismo, el juez subrayó que el delito imputado, torturas, está sancionado tanto en España como en Argentina con penas de entre 8 y 25 años de cárcel. Además, sostuvo que la orden de detención cursada por la jueza argentina sigue vigente. Y aclaró que no adopta medidas más duras porque ambos tienen arraigo en España.

LA DOCTRINA / Ruz elevará este proceso a la sala penal de la Audiencia Nacional la próxima semana. Por ello, el juez evitó pronunciarse sobre «la viabilidad» de la demanda de extradición, ya que este asunto es competencia de la sala. El Tribunal Constitucional estableció hace unos meses que España no entrega a sus nacionales, pero abrió la puerta para que estos puedan ser juzgados en nuestro país por los delitos por los que han sido reclamados.

La entrada y salida de los policías fue polémica, ya que estuvieron permanente protegidos por el servicio de seguridad de la Audiencia Nacional. Billy el Niño y Muñecas abandonaron este edificio en vehículos similares a los que usan los policías de paisano de esta sede judicial.