Dudas y respaldos

El pacto de estabilidad parlamentaria que firmaron en diciembre CiU y ERC, y en general el papel que debería desempeñar la fuerza republicana en el actual contexto, genera respuestas contradictorias entre los catalanes, muy en función de lo que se les pregunte. A modo de resumen rápido se puede decir que los encuestados apoyan por poco el pacto, que mayoritariamente, sin embargo, dudan de su eficacia y que, de igual modo mayoritario, afirman que ERC debe apoyar al Govern y no hacer oposición.Itemmás. La principal medida que prevé el acuerdo firmado entre Artur Mas y Oriol Junqueras, la convocatoria de una consulta de autodeterminación, tampoco se considera más prioritaria que, por ejemplo, un nuevo acuerdo de financiación. La crisis aprieta.

El 45% de los encuestados creen que el pacto es positivo, por el 41,5% que opina lo contrario. El respaldo cae con respecto a enero, donde se alcanzó un resultado de 53,3% a 38%. En el análisis por electorados, el que con mejores ojos lo ve es el republicano: el 83% de los que optaron por la papeleta de ERC el 25-N apoyan el acuerdo. Los de CiU son el 69,3%, casi las mismas cifras que los de la CUP (68,2%).

Aplastante y abrumador

La visión negativa de la entente CiU-ERC triunfa de modo aplastante entre los que votaron al PP (87,3) y Ciutadans (86,2%). De manera abrumadora entre los socialistas (60%) y simplemente es la opción más elegida en ICV (45,7%).

Ahora bien, si se pregunta sobre la eficacia que los encuestados adjudican al pacto en tanto que garante de la estabilidad al Govern, el 59,1% opinan que poca o ninguna, por el 35,3% que le conceden mucha o bastante. Los que más fe tienen en el acuerdo son, de nuevo, los republicanos, El 69,2% consideran que sí, que el pacto da estabilidad. En CiU se acercan a la división de opiniones (54, 9% a 42,8%). El resto no le da ningún tipo de crédito a la alianza entre los dos primeros partidos en el Parlament.

Los votantes de la CUP, que apoyaban mayoritariamente el pacto, creen en un 59% que no da estabilidad. ICV-EUiA (72,9%), PSC (78%), y Ciutadans (82,7%) van detrás del PP (92,8%) en la lista de los escépticos.

Tercer capítulo. El papel de ERC en esta legislatura. ¿Debe mantener el apoyo al Govern o dedicarse a hacer oposición? El 58,3% cree lo primero, por el 31,3% que preferiría que los republicanos se dedicasen a fiscalizar críticamente la acción del Govern. Los votantes de la CUP (45,5% a 45,5%) y los del PSC (44% a 45%, a favor de la postura crítica de los republicanos) están casi perfectamente divididos. La fuerza con mayor porcentaje de partidarios de mantener la alianza Mas-Junqueras es CiU (84,7%). Mientras, los republicanos tienen un 26% de electores que desearían estar en la oposición. La última paradoja: hay más votantes del PP (36,4%) que de ICV-EUiA (32,9%) que creen que el papel de ERC debe ser respaldar a Mas.

La prioridad

Para el 48,8% de los catalanes lo prioritario a negociar con el Estado sería un nuevo pacto de financiación, por el 44,1% que optan por la consulta. Los electorados de CiU (53%), ERC (77,6%) y la CUP (63,6%) se quedan con la autodeterminación. Eso sí, la federación nacionalista cuenta con un 40% que preferirían encauzar un nuevo sistema de financiación. Cabría interpretar que en algunos casos pueda tratarse de un ejercicio de pragmatismo viendo que la posibilidad de negociar con el Estado una posible autodeterminación de Catalunya tiene pocas opciones de éxito. Ciutadans (86,2%), PP (76,4%) y PSC e ICV-EUiA (con más ahínco incluso estos últimos, un 62,9% por el 61% de los socialistas) abogan por anteponer la negociación para alcanzar un nuevo pacto fiscal.

Por último, los catalanes consideran que no es bueno que el Govern todavía no haya presentado los presupuestos. Hasta el 73,4% lo ven negativo para el país, y solo el 15,1% creen que es positivo. El 64,2% de los electores de CiU y el 61,7% de los de ERC no están convencidos de la decisión que ha tomado el Ejecutivo con el apoyo de los republicanos.