De la Vega aplaude que se salven las «líneas maestras»

El Gobierno aplaudió ayer la sentencia del Tribunal Constitucional por dos razones. Primero, porque, a su juicio, supone «una derrota en toda regla» del PP y, segundo, porque el dictamen «no afecta en ningún caso a las líneas maestras de profundización del autogobierno» que establece un Estatut que el Parlament, las Cortes Generales y los catalanes aprobaron, y que se está aplicando «con total normalidad desde hace tres años y 10 meses».

Eso dijo la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, que compareció ante los medios de comunicación apenas una hora y media después de conocerse el fallo. La número dos del Ejecutivo inició su declaración subrayando la «independencia» del alto tribunal y asegurando que ha actuado «sin presiones ni injerencias». «Los tiempos políticos no siempre coinciden con los jurídicos», añadió.

CUESTIÓN DE PORCENTAJES / De la Vega dijo que la sentencia ha ratificado «prácticamente en su totalidad» la Carta autonómica y destacó que, de los 187 pronunciamientos de inconstitucionalidad que reclamó el PP, el organismo ha rechazado el 92%. «El PP presentó una enmienda a la totalidad y la sentencia deja claro que el Estatut se integra perfectamente en nuestra Constitución y en el Estado autonómico», aseguró.

El Ejecutivo destaca que el fallo no afecte a los símbolos propios de Catalunya establecidos en el documento, que considere conforme a la Constitución la regulación del uso de las lenguas oficiales y que, contrariamente a lo que señalaba el PP, no sea «cierto» que el Estatut establezca una relación confederal entre el Estado y Catalunya.

De la Vega confirmó que José Luis Rodríguez Zapatero había hablado con el president José Montilla, pero no reveló el contenido de la conversación. Fuentes del Gobierno aseguraron, después de escuchar las belicosas declaraciones de Montilla, que «entendían» su actitud por estar en periodo preelectoral, pero que consideraban que el contenido final de la sentencia «era mucho mejor» de lo esperado.