Hamás, la tregua y el retorno de la causa Palestina con el drama de Gaza

El despreciable ataque de Hamás en Israel el 7 de octubre de 2023 rompió años de desapego de la causa Palestina en Occidente. Hasta ese momento dramático, la situación de la Franja de Gaza había casi caído en el olvido de las 'agendas setting' de todo el mundo. Los acuerdos de Abraham y la normalización de las relaciones de EEUU con los Emiratos Árabes, Bahréin, Marruecos o Arabia Saudí habían desplazado el eje regional de la atención a la zona del golfo Pérsico. Prioridades energéticas frente a lógicas humanistas. Palestina había quedado olvidada a nivel de pañuelo a cuadros hasta el ataque de Hamás de 2023 y la respuesta israelí. La limpieza étnica emprendida por el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, en la Franja de Gaza ha situado esta pequeña zona del este del Mediterráneo en foco internacional de atención, ha desatado la caja de la industria militar y ha puesto trabas al comercio internacional por el bloqueo del mar Rojo por parte de los hutís de Yemen.

La reedición este 2024 de un libro de Óscar Monterde Mateo es útil para dibujar con precisión los orígenes de este nuevo escenario mundial, con el relato ágil de la historia contemporánea de Palestina y Oriente Próximo. Y es precisamente ese factor histórico el que permite entender algo más de lo que sucede en Gaza, pero sin justificar absolutamente ninguna de las atrocidades que se narran a diario en los medios de comunicación. El Próximo Oriente es la zona más caliente del mundo, un polvorín que requiere apoyo internacional y la invención de nuevos consensos. "Décadas de colonización occidental (y un torpe proceso de descolonización), la propia constitución de Israel y la consiguiente cuestión palestina, la riqueza de recursos petrolíferos (y el interés de las grandes potencias), el auge e intensificación del islamismo fundamentalista... Sería imposible entender el presente de la región sin conocer su historia desde mediados del siglo pasado", explica clarividente Monterde.

Tras el drama de la destrucción de Gaza, la reconstrucción será dantesca. La solución de dos estados propuesta por buena parte de la comunidad internacional parece lejana y los consensos están todavía en fase de entelequia. La vorágine informativa en torno a Gaza deberá dar paso más pronto que tarde a protagonismos internacionales de mediación siempre que la política interna de Israel y el neosionismo no ponga más trabas de las lógicas. Pero las heridas no cerrarán en décadas, el temor a vengadores de actuales dramas, organizados o no, podría enquistarse los próximos años salvo mediaciones milagrosas y una reconstrucción millonaria a cargo principalmente de los países del Golfo. Y antes llegará una tregua, que debe aspirar a ser definitiva. Estos países del Golfo son los guardianes de los lugares más sagrados del Islam y para normalizar sus relaciones con Israel, Riad debe abanderar la creación de un Estado palestino con garantías de seguridad de Estados Unidos. La causa Palestina es la vergüenza humana de este siglo, una terrible asignatura pendiente necesaria de reválida. Antes de que vaya a peor, si es que eso es posible.