Elecciones municipales

El cambio imprescindible de Girona

Girona hace tiempo que se marchita como ciudad, pero ha sido en este último mandato que la decadencia ha sido plenamente palpable

El río Onyar, a su paso por Girona

El río Onyar, a su paso por Girona / CEDIDA ACN

Marc Lamuà

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La transformación global y sectorial de Girona, hoy, es evidente que solo la puede hacer Silvia Paneque y la candidatura que la acompaña, donde hay expertos gerundenses de renombre en cada uno de los sectores donde más inmediatamente tenemos que actuar para hacer dos tareas esenciales: volver a hacer de Girona la ciudad orgullosa que todos queríamos y, a la vez, no perder ninguna de las oportunidades que hoy estamos dejando pasar y que son clave para el futuro de nuestra ciudad.

Estas próximas elecciones tienen que ser el punto de inflexión de esperanza para Girona, donde la dejadez dé paso a la dedicación, donde el olvido de amplias zonas de la ciudad sea algo pasado, donde la mirada de melancolía hacia el pasado se cambie para mirar con esperanza a las oportunidades del futuro. Estas próximas elecciones tienen nombre propio, Silvia Paneque.

Porque Girona hace tiempo que se marchita como ciudad, pero ha sido en este último mandato que la decadencia ha sido plenamente palpable. El olvido insistente de Marta Madrenas ha resultado en la pérdida sistemática de oportunidades que otras ciudades sí que han estado aprovechando. Ni siquiera la entrada en el gobierno de ERC permitió reavivar un proyecto que difícilmente ha satisfecho a ningún ciudadano de Girona, más allá de ideologías supramunicipales.

Hace cuatro años ya se votó en Girona para que hubiera un cambio de rumbo con un cambio de Gobierno, pero entonces se despreció la oportunidad por miedo a una presión ficticia de las fuerzas independentistas de la ciudad. Entonces era ya un clamor ciudadano que había que cambiar el gobierno, hoy es ya un cambio imprescindible para Girona y para todos los gerundenses.

Lo más importante es decidir, hoy, quien encabezará este cambio. Girona no está para hacer inventos, revertir la dejadez del gobierno Madrenas es una tarea que hacer de manera inminente, desde el primer día, por eso hace falta que sea alguien que conozca a la perfección el Ayuntamiento como institución y Girona, toda, como ciudad. Esto no es sencillo, tampoco, porque la ciudad ha sido troceada por la mala gestión y algunos barrios, olvidados sistemáticamente, requieren que el nuevo equipo los ponga al día y sean redignificados. Es por eso que el actual equipo de gobierno, con este olvido constante de los barrios, no puede llevar a cabo un cambio tan drástico.

Los deberes son muchos, empezando por una ciudad más segura para todos los ciudadanos independientemente del barrio en el que vivan, ser mucho más activos en garantizar el derecho a la vivienda para todo el mundo y, a la vez, combatir las ocupaciones que deterioran los barrios gerundenses, volver a tener unos equipamientos deportivos suficientes para todos los clubes y entidades en cada barrio, rehacer el panorama y oferta cultural para que volvamos a ser punta de lanza y referentes en la provincia y más allá, repensar la movilidad y proyectar cómo será la movilidad de Girona en el futuro, garantizando la de todo el mundo a la vez que luchamos efectivamente contra la contaminación y el cambio climático, hacer una ciudad más amable para el ciudadano y atractiva para vivir y visitarla, un salto adelante en todos los niveles que no es nada fácil de llevar a cabo.

Este salto estoy convencido que tiene que venir de la mano de Silvia Paneque y de toda la gente que desde la plataforma cívica de Gironins pel canvi, desde la diversidad y transversalidad, pero sobre todo desde la necesaria esperanza por Girona, lo harán posible.