Molenbeek, a seis paradas de metro
La descordinación policial ha hecho del barrio de Molenbeek de Bruselas un campo abonado para el yihadismo
![Mercado callejero en una plaza de Molenbeek.](https://estaticos-cdn.prensaiberica.es/clip/c2f843af-b051-40f8-9722-981c230a9329_16-9-discover-aspect-ratio_default_0.jpg)
Mercado callejero en una plaza de Molenbeek.
Estación de metro de Schuman -frente a las instituciones europeas-, estación de Maelbeek -en pleno barrio europeo y escogida por el suicida para inmolarse en Bruselas-, estación de Ars Loi, Parc, Brouchére -a diez minutos de la emblemática Grand Place- y Etangs Noirs -puerta de entrada al barrio de Molenbeek, cuna yihadista en el corazón de la capital europea-.
Seis paradas de metro, un cuarto de hora escaso, separan a dos mundos en las antípodas que conviven en la poliédrica capital belga.
La comuna de Molenbeek, una de las 19 que conforman la región de Bruselas, es mayoritariamente musulmana, de procedencia marroquí. Básicamente está integrada por emigrantes del país norteafricano que se afincaron en Bélgica en los años 60 al reclamo del trabajo en las fábricas de acero. Emigrantes que ahora tienen nietos belgas.
Nietos que bien podrían ser Abdeslam, cerebro de los atentados de París, o los hermanos Bakraoui, los suicidas del metro y del aeropuerto de Bruselas. Por poner dos ejemplos. Jóvenes musulmanes radicales que campan a sus anchas en un barrio que se ha revelado idóneo gracias al desbarajuste competencial de los distintos cuerpos policiales belgas. Muchas policías tienen competencias pero pocas han puesto los pies en sus calles para, además, ocultarse información. Nadie tiene respuesta clara para la difícil cuestión de fondo. Qué lleva a jóvenes nacidos en el corazón de Europa a hacer la yihad. Un poco de ausencia real de integración de la comunidad musulmana en la sociedad belga, otro poco de agravio en referencia la desigualdad de oportunidades (el índice de paro juvenil en el barrio es de un 40%)...
Resuenan como nunca ahora las palabras de hace un año de la alcaldesa del barrio de Molenbeek, ya conocido internacionalmente. Françoise Schepmans reconocía que había madres que le pedían ayuda al tener constancia de que sus hijos se marchaban a Siria e Irak a hacer la yihad. Hijos que bien podrían ser Abdeslam o los hermanos Bakraoui.
- Esta fruta no la come casi nadie, siempre está en los supermercados y está llena de proteína y antioxidantes
- El apellido de origen gitano que tienen más de tres millones de españoles
- Crisis en una escuela compleja de Badalona: pierde a 20 profesores de un plumazo tras el proceso de estabilización docente
- ¿No sabes qué hacer con tanto calabacín? Tres recetas para aprovecharlos
- Un brote de salmonelosis en un bar de Barcelona deja al menos 22 afectados tras comer tortilla de patatas
- Vecinos de Sants piden al Ayuntamiento de Barcelona que compre su bloque para no quedarse sin alquiler
- Estas son las playas de Catalunya con más medusas
- Muere de forma violenta la influencer Catalina Gutiérrez a los 21 años