La artista francesa Suzanne Valadon y el retrato de judíos y conversos, protagonistas del Mnac en 2024

El Museu Nacional d'Art de Catalunya, el MNAC, dedicará 2024 a recuperar figuras olvidadas como Eveli Torrent o Adolf Fargnoli, e incorporará a sus salas las obras del ceramista catalán Josep Llorens Artigas. Además, mantendrá el espacio para el cómic, una figura afianzada en el museo, a través de la obra de Jordi Longaron y su ‘Friday Foster’. 

El Museo Nacional continúa apostando por las colaboraciones con otras instituciones tanto del panorama nacional como internacional. A partir del próximo 22 de febrero podrá visitarse la exposición ‘El espejo perdido. Judíos y conversos en la Edad Media’, en coproducción con el Museo de El Prado de Madrid, que muestra el retrato de judíos y conversos concebido por los cristianos en España entre 1285 y 1492, y constata cómo la estigmatización visual de los judíos fue un reflejo fiel del espejo cristiano, de sus creencias y ansiedades; un poderoso instrumento de afirmación identitaria.

Esta exposición reunirá obras procedentes de una treintena de museos, bibliotecas, iglesias, archivos y colecciones particulares, de maestros del gótico como Pedro Berruguete, Bartolomé Bermejo, Fernando Gallego o Bernat Martorell.

En la parte internacional, el MNAC junto al Centre Pompidou-Metz y el Musée d’Arts de Nantes, presentarán por primera vez en nuestro país la obra de Suzanne Valadon ‘Una epopeya moderna’ a partir del 18 de abril. Seudónimo de Marie-Clémentine Valadon (1865-1938), Valadon fue pintora, dibujante y grabadora y practicó todos los géneros artísticos, pero destacó en el retrato y las naturalezas muertas, con un interés especial por los desnudos femeninos y las odaliscas. La muestra reunirá 112 obras, de las cuales 48 sólo se podrán ver en Barcelona.

También en 2024 abrirán sus puertas cuatro grandes proyectos museísticos, que irán acompañados del MNAC en el proceso. Entre ellos, el Museo del Barroco de Cataluña en Manresa, el Museo de Granollers, el Morera Museo de Arte Moderno y Contemporáneo de Lleida y, dentro del Palau Requesens de Molins de Rei, se inaugurará el Museo del Renacimiento. 

Tras algunos años de intermitencia, el museo vuelve a consolidar objetivos, a través de la recuperación del patrimonio nacional y su apuesta por destacar el país, la diversidad social y las colaboraciones con entidades locales e internacionales.

Su director desde hace una década, Pepe Serra, reitera la estabilidad que ha conseguido el museo en los últimos años, pese a estar en constante cambio para mejorar y extender la institución. 

De los proyectos futuros, como la ampliación del museo, no ha dado muchos datos ni fechas hoy en la presentación del programa para este 2024, más allá “de la complejidad extrema que tiene el proyecto del ‘nuevo museo’ y las mejoras urbanísticas ligadas a Montjuic que afectan al mismo”, ha explicado Serra. 

En cuanto a los presupuestos, Josep Desquens, encargado de la administración, ha hecho un balance positivo, aunque debe mantenerse y mejorar. De hecho, si la Generalitat aprueba los presupuestos, podría darse un aumento de 1 millón de euros, pasando de los 18,7 actuales a 20 millones. 

De la programación del centenario de la Exposición Universal de 1929, Serra ha afirmado “que aún no saben nada de lo que harán”. Están centrados en la ampliación del museo, de la cual asegura que “tendremos novedades en 2024, porque se ha acelerado el proceso”. Se encuentran en fases de negociación, realizando estudios de impacto y viabilidad, a la vez que buscan aprovechar las mejoras urbanísticas que tendrán lugar en la Fira de Barcelona y por ende, en Montjuic, que afectan directamente a dos de los pabellones que pertenecen al Museo Nacional.