El más importante galardón de las letras en castellano

La poesía tranquila y rebelde de Rafael Cadenas gana el Premio Cervantes

El autor venezolano, de 92 años, es una de las voces más respetadas de la letras latinoamericanas y un opositor al chavismo

Rafael Cadenas

Rafael Cadenas / Fernando Alvarado/Efe

Elena Hevia

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El poeta y ensayista venezolano Rafael Cadenas (Barquisimeto, 1930), de 92 años, una de las voces más respetadas de las letras latinoamericanas, es el ganador del Premio Cervantes 2022. También es uno de los autores más y mejor galardonados de su país porque tiene en su haber el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana y el Premio de Literatura y Lenguas Romances de la Feria Internacional del LIbro de Guadalaja. Muy crítico con el chavismo, el poeta se ha mantenido al margen de las actividades culturalesde su país en los últimos años, como un faro insobornable, reafirmandose en su talante tranquilo pero a la vez rebelde.

En el 2016, cuando visitó España para recoger el Premio Internacional García Lorca en Granada, rompió una lanza por los "poetas venezolanos que están sufriendo más de lo soportable a causa de una crisis total de la que es responsable el actual régimen". Su compromiso con la democracia viene de lejos. Fueron sus posiciones de izquierda -que con el tiempo se deslizarían desde el comunismo hasta el socialismo- las que le llevaron en los años 50 al exilio a la isla de Trinidad, entonces bajo mandato británico, durante la dictadura del nacionalista Marcos Pérez Jiménez. Unos años que el poeta recordaría como muy felices.

Más allá de 'Derrota'

A su regreso, formó parte del grupo poético 'Tabla Redonda', una revista cultural de "artes y letras" que inició sus publicaciones en 1959 y las finalizó en 1965 y que acogió no solo trabajos literarios sino también artículos políticos de autores en su mayor parte afiliados al Partido Comunista. Fue entonces cuando su poema 'Derrota' se convirtió en una carta de presentación de los jóvenes latinoamericanos. "[Yo] que he sido arruinado por tantas marchas y contramarchas / que ansío la inmovilidad perfecta y la prisa impecable / que no soy lo que soy ni lo que no soy / que a pesar de todo tengo un orgullo satánico / aunque a ciertas horas haya sido humilde hasta igualarme a las piedras / que he vivido quince años en el mismo círculo / que me creí predestinado para algo fuera de lo común y nada / ……he logrado / que nunca usaré corbata / que no encuentro mi cuerpo", escribía como una declaración de intenciones generacional. Andando los años, el propio Cadenas renegaría de ese poema, que lo encerraba y simplificaba en exceso en un momento concreto.

Cultivador de una poesía rigurosa, desnuda y sin estridencias que suele servir en un accesible formato de prosa que adoptó del francés Henri Michaux, Cadenas se lanzó a la creación desde muy joven y ha tenido a Hölderlin y Rilke, como poetas de cabecera, aunque la poesía del venezolano sea mucho menos oscura . El jurado del Cervantes, que ha precisado que esta es la primera vez que el Cervantes va a parar a un autor venezolano, ha destacado "la trascendencia de un creador que ha hecho de la poesía un motivo de su propia existencia y la ha llevado hasta alturas de excelencia en nuestra lengua".

Publicado en España

Entre las obras más destacadas del autor se encuentran 'Amante'  (1983), 'Realidad y literatura' (1979) y 'El taller de al lado' (2005). Sus últimos trabajos han estado recogidos en editoriales españolas como Pretextos 'Sobre abierto' (2012) y 'En torno a Basho y otros asuntos' (2016), y Visor, donde ha publicado 'Contestaciones' (2018).