La luz aprieta: el Liceu estudia instalar placas solares y el MNAC ha pagado ya 1,8 millones de recibo

El precio de la luz ha disparado los presupuestos de todas las empresas culturales. Las públicas, intentarán hacer el máximo esfuerzo en ahorro energético esperando que las Administraciones les apoyen al máximo. A las privadas les preocupa que la factura desbocada de la energía perjudique su futuro. Por ahora nadie piensa en aumentar los precios de las entradas pero todos están pendientes del coste del kilowatio/hora. "Según la previsión, la temporada 22-23 pagaremos un millón más de lo previsto en el recibo eléctrico, en total 1,6 millones de euros a causa de la subida", señala Valentí Oviedo, director general del Liceu.

En el Teatre Nacional de Catalunya (TNC), el presupuesto calculado inicialmente será el doble o más, calcula Mònica Campos, la directora ejecutiva. "Es el primer año que dependemos del mercado mayorista, algo que genera mucha incertidumbre porque es algo que no controlas." El TNC, dependiente de la Generalitat, ha tomado siempre medidas de ahorro pero esta situación le supera. De momento confía en que la puesta en marcha de placas solares en el tejado de la Sala Tallers, ayude. "Su puesta en marcha, que será pronto, reducirá la factura". Su instalación se aprobó mucho antes de la guerra de Ucrania y de la subida de la energía. Aparece presupuestado con una partida de 147.000 euros en el contrato-programa 2019-2022. "Es solo la primera fase", apunta Campos. Está previsto colocar más en el tejado del edificio principal.

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En el Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC) la previsión de gasto en energía para este año estará en un máximo de entre 2,7 y 2,8 millones de euros (IVA incluido). "Gastaremos un 144% más en electricidad este año que el anterior pese a haber reducido un 0,45% el consumo en un año con condiciones climáticas extremas", explica Xavier Abelló, jefe de infraestructuras y servicios del museo. "Lo peor del precio de la energía es que es imprevisible".

En el MNAC también hay un estudio realizado para poner energía solar en una pérgola que se construirá en el parking, "que además de energía proporcionará sombra a los coches", y en el tejado del edificio, aunque al ser un edificio patrimonial será más complejo. Según los cálculos, "entre ambos se conseguiría un ahorro del 12%". A partir del 1 de enero, como otros centros culturales públicos, van a adherirse a la Comisión Central de la Energía de la Generalitat. "Esperamos así tener un precio más bajo". Y es que el gasto en energía ha cambiado radicalmente. Si en 2019, el último año antes del covid, el MNAC pagaba 761.600 euros, en 2021 fueron 1,3 millones y la factura de este año, solo hasta agosto, ya sube a 1,8 millones.

Medidas de compensación

En el sector del cine la factura eléctrica también preocupa. "Los cines de España se están ahogando con la factura de la luz", comenta Camilo Tarrazón, presidente del Gremi de Cinemes de Catalunya. "En algunos casos ha subido un 40% largo y, en otros, un 60%. Todo depende del tipo de sala". Por ahora están mirando de buscar soluciones a través de la Conselleria de Cultura. "Nos han escuchado con atención pero ellos no diseñan medidas de compensación, eso depende de otro departamento, el de Industria. Esperemos que haya un buen entendimiento entre todos para asegurar que la cultura tenga recursos suficientes y no se apague".

También en Adetca (Asociación de Empresas de Teatro de Catalunya) han mostrado su preocupación. "Con el kilowatio/hora fuera de control el gasto es brutal", apunta Isabel Vidal, presidenta de Adetca. "Si hay medidas de compensación para empresas queremos que se cuente con nosotros. A menudo las características de nuestras empresas no se adaptan a las bases de las ayudas".

La Associació de Sales de Concerts de Catalunya (Asacc) estima que la factura de la luz de sus afiliados se ha doblado. Y remarca otro precio disparado que aprieta al sector de la música en directo: el de la gasolina. No en balde el precio del kilómetro es un apartado de las negociaciones para contratar a artistas internacionales, cuyas giras suponen el desplazamiento de importantes equipos humanos y de material. El combustible se repercute en el caché y finalmente en la entrada.

Fondos europeos

Los fondos europeos Next Generation han ayudado a financiar inversiones y reformas en materia energética. La mayoría de teatros ha realizado grandes esfuerzos para implementar medidas de ahorro. El Grup Focus ya cuenta con placas solares en su nueva sede. Pero cualquier medida queda corta cuando la luz se dispara. "En septiembre tuvimos que aplicar un plan de choque energético adicional porque en agosto, sin actividad en los teatros, la factura subió el doble que el año anterior", explica Vidal, también directora general de Focus. Los precios de las entradas, de momento, no van a subir, pero teme que el precio de la luz pueda afectar a nuevas producciones. El imprevisible coste de la energía les ha puesto en alerta. En invierno, además, la climatización es clave y con la guerra de Ucrania encendida nadie sabe qué escenario esperar.

Placas solares en el Liceu

Muchos centros de cultura llevan años haciendo esfuerzos en ahorro energético. "El MNAC, de 2011 a 2019, redujo el consumo a la mitad", recuerda Abelló. En el Liceu y el TNC, como en otros centros de cultura públicos, también se han aplicado medidas para ajustar al máximo el gasto energético y ser lo más sostenibles posible. "En el Liceu hace años hicimos un estudio para poner placas en el tejado -señala Oviedo-. Suponía un ahorro solo del 5% y lo desestimamos. Pero ahora con estos precios estamos trabajando en ello. Esperamos contar con ayudas de los fondos Next Generation".

También cines como los Verdi han colocado placas solares. "Las instalamos en verano y nos ha supuesto un ahorro de entre el 25% y 30% en la factura eléctrica", explica David García, responsable de márketing y programación. "La idea es colocar más en el terrado de los cines cuando podamos porque, pese a las ayudas, es costoso".

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