Llibrestiu, la fiesta que reformula el Sant Jordi de verano

¿Por qué si a principios del verano nos ponemos a pensar en los libros que nos llevaremos a la playa, de viaje o allí donde haga falta eso no se traduce en una promoción específica de la lectura? Esa fue la pregunta que se realizaron en la Cambra del Llibre, capitaneada por el Gremi de Llibreters de Catalunya y por el Gremi de Editors. Material para ponerse a pensar tenían de sobras. Habida cuenta de la experiencia del denominado, bien o mal, Sant Jordi de verano de 2020 que, necesidad obliga, se realizó el 23 de julio, porque la pandemia impidió que fuera en abril. Sant Jordi de verano 2020 distó mucho de ser como el de primavera pero sí dejó la semilla para que, tras el éxito casi abrumador de la ‘diada’ del 2021, se pensase en reformular aquella propuesta.

Pues bien, el invento ya está aquí . Se llama Llibrestiu. Se realizará este jueves, 15 de julio y acoge a algo más del 50% de las librerías barcelonesas y a un 30% de las catalanas de presentaciones, talleres, música, lecturas, mesas redondas, programas de radio, juegos literarios y actividades infantiles. En total serán 110 librerías que proporcionarán unas 300 actividades. Y aunque en este momento muchas todavía tengan su programa por confirmar, todas colocarán puestos de venta a la entrada de los establecimientos. Pese a empezar tímidamente, la propuesta tendrá incluso sus estrellas como laws visitas a Barcelona del escritor griego afincado en Suecia Theodor Kallifatides, el norteamericano Mark Bakker autor de 'Nam,' una impresionante historia oral del conflicto vietnamita y el realizador y ahora también novelista Rodrigo Cortés.  En Girona, las diez librerías se la ciudad se han unido, para hacer girar las actividades de la ciudad entorno a la novela negra.

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Modesta pero con potencial

El horario dependerá de cada librería pero se desarrollará en una horquilla que va desde las 18 o 19 horas de la tarde hasta las 11 de la noche como máximo. Las actividades que se realizarán mayoritariamente en el interior de las librerías mantendrán un aforo ya acordado por el Procicat de un 70% y algunas deberán reservarse en la web del Gremi de Llibreters.

Llibrestiu es, por ahora, una tímida propuesta a la que los gremios ven mucho potencial. Quieren volver a convertir las librerías en polos de atracción aprovechando el importante crecimiento de la lectura durante la pandemia y la demostrada vinculación de los lectores con las librerías de proximidad a las que tanto apoyaron en los malos tiempos. Esto es algo en lo que se quiere incidir especialmente en la ciudad de Barcelona: huir de los ejes más conocidos y descentralizar la compra de libros en las pequeñas librerías de los barrios. “La idea era consolidar y reafirmar esta recuperación trabajando para que lleguen los fondos europeos para la modernización del sector pero sobre todo fortaleciendo las actividades alrededor del libro”, explica Patrici Tixis presidente del Gremi de Editors de Catalunya. La Generalitat, el Ayuntamiento de Barcelona, los municipios de Catalunya y el Ministerio de Cultura han colaborado en esta propuesta que llega en un momento en el que se mantiene el nivel de ayudas oficiales del año anterior.