La Cleopatra de María Bayo

Es el sueño de toda 'prima donna'. Y no me refiero a debutar Norma o Lucia, sino a que, ya al final de una gran carrera en el mundo de la ópera, una artista pueda reinventarse con un traje hecho a medida. Es lo que ha podido hacer María Bayo con esta 'Divina Cleopatra', a medio camino entre obra de teatro y recital lírico. La soprano navarra comenzó con esta segunda vida escénica en 2018, y con un reto mayúsculo, llevar a escena su propia versión de 'Master Class' de Terency McNally interpretando nada menos que a Maria Callas, obra teatral que en Broadway protagonizaron Zoe Caldwell y Faye Dunaway y que en Barcelona se había visto en dos montajes diferentes con otras dos grandes de las tablas como son Núria Espert y Norma Aleandro. 

Entonces María Bayo superó con nota su debut como actriz. Ahora, en este personal homenaje a la reina de Egipto vuelve a combinar de manera más que convincente canto y teatro gracias a su fuerza escénica y a la complicidad de dos expertos en sus ámbitos, el director musical Dani Espasa -que realiza un pequeño milagro con el repertorio al adaptarlo a guitarra, chelo y acordeón- y al director y dramaturgo Marc Rosich, que ha cosido un texto con chispas de genialidad. Nace de un par de sencillas anécdotas para convertirse en un discurso feminista y reivindicativo, con toques de humor y de melancolía. La obra revisa al mítico personaje desde sus estereotipos, pero también repasa parte de la carrera de Bayo y mira a la ópera y a sus costumbres desde dentro.

La intérprete declama a Shakespeare y a Shaw y canta a Händel, Sartorio, Hasse o Massenet, pero también a Piazzolla, Guastavino y Weill, entre otros, contando con los virtuosos Roman Gottwald (acordeón), Darío Barroso (guitarra) y Joan Palet (violonchelo), en un montaje con escenografía de Sergi Corbera, vestuario de Joana Martí, iluminación de Sylvia Kuchinow y con un prodigioso diseño de sonido de Rai Segura.