'TITANIC' Y otros 100 NAUFRAGIOS

Los hundimientos del siglo

La pasada madrugada se han cumplido cien años del desastre del 'Titanic', un suceso que aún hoy es asombroso: la grandeza y la calamidad van siempre en el mismo barco, esa es la idea. El 'Titanic' como sinónimo de catástrofe ha tenido en el último siglo numerosos émulos. He aquí un centenar de personas, cosas o conceptos que también se hundieron.

El 'Titanic', el coloso, el insumergible. El símbolo de que todo lo que flota puede hundirse.

El 'Titanic', el coloso, el insumergible. El símbolo de que todo lo que flota puede hundirse.

ANTONIO BAÑOS / F.J. ZUDAIRE

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Hay acontecimientos que golpean la memoria y el espíritu de la humanidad muy por encima de su importancia real. El hundimiento del Titanic, en la madrugada del 14 al 15 de abril de 1912 es, sin duda uno de ellos. Confluyen varios aspectos para que así sea, más allá del revival actual. Como estamos viendo en esta maldita crisis, la suerte suele favorecer a los que la alimentan con una generosa cuenta corriente. Vamos, que los pobres suelen morirse más que los ricos. Por eso, elTitanic mantiene la fascinación de lo insólito.

Benjamin Guggenheim, John Jacob Astor o Isidor Strauss eran los representantes del gran capitalismo de la época que murieron ahogados. Pensar cómo el más inalcanzable de los lujos acaba en el fondo del mar por culpa de un cubito de hielo gigante sigue teniendo la sombra de cierta cruel justicia redistributiva.

El segundo elemento que singulariza y convierte en eterno el naufragio es el de la vanidad tecnológica. Proclamado como insumergible, vendido como prodigio del ingenio humano, el Titanicestaba llamado a ser el símbolo del nuevo siglo XX. El siglo del progreso, de los avances tecnológicos que solo podían traer felicidad y bienestar. Una fe en la ciencia que hizo despreciar, por inútiles, los botes salvavidas. Dos años después del hundimiento, Europa entera se sometía a un naufragio suicida en la primera guerra mundial demostrando la ambivalencia moral de la tecnología. Cien años después y con la central de Fukushima todavía supurando radiactividad, elTitanic se nos aparece como una lección difícilmente olvidable sobre los límites de la técnica frente a la desmesura de la naturaleza.

Pero más allá de estas metáforas, el naufragio delTitanicsupone en sí mismo un relato enormemente emocionante. Heroísmo y cobardía, tragedia y milagro, todo ello envuelto en misterios que se han convertido, mediante libros y documentales, en una industria en sí mismos.

Tenemos el inexplicable caso de la novelaFutilityde Morgan Robertson, publicada en 1898. En ella se habla de un barco lleno de millonarios llamado Titánque se hunde tras colisionar con un iceberg en abril. Existe también una extendida teoría conspiratoria sobre los magnates que murieron a bordo, todos ellos contrarios a la creación de una Reserva Federal norteamericana que controlase el sistema financiero.

Misterios y debates

Junto a estos misterios, se levantan encendidos debates sobre el papel del capitán Smith, sobre la maldad del armador y su obsesión por la velocidad. Sobre la impericia del primer oficial Murdoch o sobre qué tema tocó la orquesta mientras se ahogaban. El buque más grande y rico de su tiempo pudo ser salvado si no se hubiesen olvidado en puerto algo tan sencillo como los prismáticos.

ElTitanic, a cien años de su naufragio, está más vivo que nunca. Y no por DiCaprio y Winslet, ni por las exposiciones y publicaciones del centenario. La súbita desaparición de aquello que se considera sólido, moderno y perfecto. Lo cerca que está la catástrofe de la despreocupación y lo banal. Los límites de lo que llamamos civilización, en suma, son los temas por los que hoy y siempre, elTitanicserá, más que un mito, una lección que tener en cuenta.

1. El pijama. Los más golosos comían con la urgencia de llegar al postre para pedir aquella barbaridad de calorías llamadapijama. Helados, flanes, piña y melocotón en almíbar, con nata. Desapareció de las mesas, al menos con la contundente presencia de antaño.

2. El sidecar. Una especie de barca unipersonal adherida a la moto aumentaba de dos a tres el número de plazas. A los sidecares los engulló el incremento de la capacidad adquisitiva porque, en el fondo, la moto con sidecar era un quiero y no puedo, y el reto del progreso consistía en cambiar la moto por el coche.

3 Enron. Lo quesalvóal mundo libre fue el ataque terrorista del 11-S. Por eso, cuando la mayor quiebra de la historia hasta entonces, la de la Enron, se hizo pública en diciembre del 2001, todos estábamos mirando la barba de Bin Laden y evitamos el pánico que, finalmente, llegó en el 2008. Kenneth Lay Jeffrey Skilling y Andrew Fastow nos enseñaron lo que era robar a lo grande.

4 Induráin-96. Había dado una señal de debilidad en los Alpes, pero fue en la etapa que finalizaba en Pamplona cuando se desvanecieron las posibilidades de sumar el sexto Tour. Pasó el pentacampeón por la puerta de su casa de Villava y, al saludar a su familia, estaba despidiéndose de su brillante carrera.

5 La pata de elefante. La gente mira fotos antiguas y se ríe de cómo se vestía antes, pero un día serán ellos el objeto de la risa. A las modas se las lleva la corriente, como hizo con los pantalones de pata de elefante o la capa tradicional. La moda es efímera porque su negocio debe ser continuado.

6 El tabaco. Un ataque frontal ha dejado el tabaco como práctica de cuatro apestosos, a los que, todo se andará, les falta la campana al cuello para anunciar su

desagradable presencia. Ahora también se muere, pero los muertos son mucho más sanos, y nunca les olió la ropa a tabaco. Eso sí, en la cruzada contra el fumador persiste la sibilina presencia del Estado que, como Jano, mira dos veces: una lo hace de forma represiva al fumador, y la otra cara sonríe al recaudar cuanto puede de sus malos humos.

7 Pu Yi. Ocupar un puesto que hace 2.132 años que existe y cargártelo no debe de ser plato de gusto. Pu Yi, el último emperador de la China, asistió a algo más que un cambio político. Fue el fin de toda una civilización. Una revolución que empezó republicana en 1911 y que ha acabado siendo capital-comunista en nuestro siglo. Pu Yi pasó a la historia por una película.

8 La mina de Chile. De los mineros se habla poco. Sus picos de sierra mediáticos tienen que ver con la desgracia. En la mina chilena de San José quedaron atrapados 33 hombres y fueron sacados a los 70 días. Mil millones de personas siguieron el rescate. Fue un final feliz, un hundimiento bien resuelto. Por una vez.

9 River Plate, a segunda. El 26 de junio del 2011 el River Plate descendía por primera vez a la segunda división del fútbol argentino. Fue como si el Barça o el Real Madrid perdiesen la categoría: un sinsentido. La intensa corrupción y el desgobierno llevaron a la huida de loscracksy al desastre deportivo. Daniel Passarella, capitán y campeón del Mundo en el 78, fue el presidente que vio lo imposible.

10 El 11-S. Es cierto que el mes de septiembre tiene un palmarés muy movido a lo largo de la historia. Pero el día 11 empieza a acumular un terrible malkarma. Rafael Casanova herido viendo cómo caía Barcelona, Salvador Allende con casco y Kalashnikov, en la Moneda esperando a los golpistas, y George W. Bush con cara de memo mientras explicaba un cuento a unos niños en Florida. Cada siglo tiene sus héroes.

11 El sombrero. Remataba el bien vestir, ayudaba al saludo, rezumaba cortesía al airear las testas y, sobre todo, daba prestancia. Antagonista de la gorra, su decadencia la trajo el tiempo, el crecimiento de una clase media que hasta hace poco nadaba en calidad de vida. En todo caso, mejor cabezas que sombreros.

12 Los tranvías. Aquellas fueron unas ciudades muy distintas, los tranvías modificaban el paisaje urbano, dibujando sus férreos caminos en el asfalto. Ponían el acento al ambiente callejero con sus campanillazos de aviso y se sumaban como posibilidad de transporte a metro, bus y taxi. El petróleo los jubiló, al apostarse por los motores de combustión en detrimento de los eléctricos, justamente lo contrario de lo que hoy sería apropiado. Devuelve romanticismo el recuerdo de estos vehículos, algo que a los nuevos tranvías les costará heredar.

13 La URSS. La gran potencia soviética no lo era tanto, y su fuerza política se mantenía con la rigidez de una dictadura. El tiempo, que todo lo cura, trajo nuevos aires de apertura y por las rendijas se colaron las ganas de terminar con la dureza de un régimen alérgico a las libertades. El resultado es otra historia.

14 El `Kursk¿. Era la más grande nave diseñada para navegar bajo el agua. Pero en agosto del 2000, en unas maniobras, una concatenación de desgracias debidas al mal mantenimiento hundieron alKursken el mar de Barents. La primera catástrofe de la nueva Rusia postsoviética. Se dice que algunos marineros consiguieron sobrevivir seis días sin que pudieran ser rescatados.

15 Islandia. Es un país remoto en una isla fría como ella sola. Su población es como la suma de L¿Hospitalet y Cornellà aproximadamente. Como el bacalao y el aluminio son cosas aburridas, algunos islandeses decidieron jugarse el país en eso de las financias globalizadas. El país quebró en el 2008 y la población, que está bien avenida, se negó a pagar el pufo. Hoy son héroes.

16 'Ciudadano Kane'. Considerada la mejor película de la historia, esta deslumbrante y personal biografía del magnate de la prensa William Randolph Hearst nos muestra el ascenso social y descenso mental del magnate. Pero también supone el punto a partir del cual la suerte de Orson Welles, su director, se va apagando. Nunca más dispuso de tantos medios y atención.

17 Galliano y los judíos. Cómo hundirse la vida tontamente en los tiempos de YouTube. Una mala respuesta en una borrachera tonta fueron suficientes para hundir la carrera del diseñador.«Amo a Hitler»,dijo totalmente beodo mientras insultaba a las clientas de un café parisiense. Alguien tenía un móvil con cámara y el mundo vio su mal beber. A Dior no le hizo ninguna gracia.

18 'Waterworld'. Una película sobre un mundo hundido bajo las aguas rescatado por un tipo que tiene agallas (de las de los peces) era una invitación al naufragio. Con Kevin Costner de protagonista, un auténtico especialista en batacazos taquilleros, la cosa era segura. El rodaje fue en sí mismo una epopeya naval y la crítica le saltó al abordaje.

19 El Carmel. En enero del 2005, en el curso de unas obras de ampliación de la línea 5, se hundió parte del túnel. 84 edificios y dos escuelas fueron desalojados y se instaló una grave crisis política en el Gobierno Maragall. La idea de una Barcelona agujereada se convirtió en una de las leyendas urbanas preferidas de la ciudad, engordada por los trabajos del AVE.

20 Urdangarin. En un principio, su caso no pasaba de ser un grano en el cuerpo corrupto del Palma Arena, la estrella insular del desmadre, pero la misma muleta utilizada para sortear trabas en turbios negocios ¿cuidado, soy el yerno¿ se volvió en su contra y dio volumen al grano. El terremoto mediático lo agitó y lo puso incandescente, hasta convertirlo en volcán. Lo sucedido debería convertirse en un ejemplo de manual, un aviso a navegantes, para que otros desahogados sepan que el tráfico de influencias tiene, como los icebergs, su zona sumergida, la que puede hundirte y cortarte la coraza de acero.

21 El abanico. Fue la prehistoria del aire acondicionado y lo mismo servía para mitigar calores que para buscar sofocos. El abanico ventilaba, pero la trampa consistía en exigir un esfuerzo que podía no compensar la producción eólica. En señales amorosas, era como el móvil de hoy aunque de cobertura limitada.

22 Ruiz-Mateos. La forma más castiza de hundimiento financiero y personal. De notable empresario jerezano a supermán y eurodiputado. Su lucha contra Miguel Boyer fue digna de Marvel y su frase«¡que te pego, leche!»pasó inmediatamente al imaginario español. Su regreso a los negocios no ha desmerecido su leyenda. Ruina y esperpento se repiten.

23 Seseña. La residencial Francisco Hernando es casi una ciudad edificada para mayor gloria de Paco el Pocero. Tras el colapso inmobiliario, el Banco Santander ha llegado a vender pisos en esa zona residencial por el precio de coste de construcción, en un intento de llenar de vida la primera ciudad fantasma del siglo.

24 La televisión analógica. Justo al desaparecer, se enteró la mayoría de los enganchados de que su televisor era analógico, porque la trayectoria del aparato distinguió solo entre blanco y negro y color. Y en ese momento, también, se supo que ser analógico equivale a ser antiguo, y lo que toca es ser digital. De momento.

25 Mario Conde. La imagen más glamurosa de la rampante España de la democracia. Su gomina y su pose de galán cuadraban con la moralyuppie que dominaba los 80. Cuentan que quiso mandar demasiado y que por eso le sacaron de circulación. Por eso y por el delito de estafa. Salió de la cárcel convertido en una especie de gurú encorbatado melifluo y derechista.

26 El milagro de Berna. Le llamaban Aranycsapat (Equipo de Oro) Era la selección húngara de los 50. Kubala, Puskas, etcétera. Final del Mundial de Suiza-54. Contra todo pronóstico, ganó una Alemania que levantaba cabeza tras la guerra. Dos años después, estalló la revolución y loscrackshuyeron. Justo antes de morir, en 1986, Gusztáv Sebes, el entrenador, dijo su última palabra:«Perdimos».

27 El ladrillo. Un día, el ladrillo cobró vida propia, y de tocho pasó a convertirse en pilar de la economía. Pero su hormigón especulativo no era más que un mal pegamento y terminó por derrumbarse. Con la caía del barro, pues eso son los ladrillos, barro cocido, aparecieron las caras de cemento. Del duro.

28 La 'Hoja del lunes'. La mayoría de periodistas hacía fiesta el domingo, como las personas normales, porque la semana comenzaba con laHoja del lunes.Pero alguien tuvo la idea de sacar los periódicos todos los días, y laHoja del lunesmurió de pena, la misma que ahoga a los diarios sin lectores.

29 Los 'esvorancs' del AVE. Momento histórico de alto contenido metafórico. En su llegada a Barcelona en el 2007, el AVE encontró en Bellvitge unos socavones que retrasaron las obras. La ministra de FomentoMaleniÁlvarez se convirtió, con su gracejo, entrending topic avant la lettre y la lengua catalana incorporó una palabra olvidada,esvoranc,al acervo popular.

30 El 'Costa Concordia'. Observamos a los pilotos, a ver si muestran seguridad en sus rostros, y lo damos por hecho. No cabe en mente humana que el responsable de 4.000 vidas decida ponerlas en peligro, quizá porque nadie ha imaginado nunca que la estupidez se aloja en cualquier cabeza, aunque lleve gorra de capitán.

31 El 'crack' del 29. La matriarca de todas las crisis. El Jueves Negro, un 24 de octubre, el pánico se apoderó de la Bolsa de Nueva York. Un pánico que atenazó al mundo en un macabro carrusel de sustos que acabó cuando Hitler se pegó un tiro en 1945. Un gran experto en esa catástrofe, Ben Bernanke, es quien gobierna la crisis desde la FED e intenta que tenga otro final.

32 El 'Odissey' y el tesoro de 'Nuestra Señora de las Mercedes'. Un barco hundido en tiempo de paz por los arteros ingleses. Un tesoro. Unos yanquis mitad emprendedores mitad bucaneros y un viejo reino europeo tocado en su orgullo. Pero nadie recuerda a Diego de Alvear, quien perdió a su mujer y ocho hijos en el naufragio. Fue capturado y en Inglaterra se volvió a casar y tuvo otros 10 hijos con la irlandesa Lisa Ward. Es como una versión deTitanicdirigida por Rocco Siffredi.

33 La máquina de escribir. Las bandas de Gates, de Jobs y de otros menos populares lograron meter en negocios y casas los ordenadores, entre cuyas posibilidades estaba la escritura sin tachaduras, corregible, insertable¿, mucho más manipulable. La máquina de escribir se arrinconó como el arpa del salón en el ángulo oscuro.

34 La hiperinflación alemana. En noviembre de 1923, una cervecita costaba en Alemania 4.000 millones de marcos. Era la hiperinflación, una espiral de devaluación que empezó a finales del 22 y duró algo más de un año. La exigencia de los vencedores de que Alemania pagase reparaciones por la Gran Guerra está detrás de esa locura que quebró la sociedad alemana, con funestas consecuencias.

35 Mubarak / Gadafi / Ben Alí. Un carrito de frutas se llevó por delante a tres dictadores. Cuando Mohamed Bouzazi se quemó porque la policía le había requisado su carrito y medio de vida, los árabes entendieron que había llegado el momento. Tahrir, los blogueros, la resistencia de Bengasi, Yemen, la revuelta en Siria¿ La primavera árabe ha hundido en un año un siglo de regímenes corruptos.

36 Chiringuitos de la Barceloneta. Mientras aquellos camareros de mandiles blancos servían paellas, los diseñadores trabajaban, silenciosos, en medio de sus malas digestiones. A golpe de Almax, decidieron que la ciudad sería otra y que aquellos restaurantes a la vera del mar desmerecían a la Barcelona de la UE. Con la ley en la mano borraron de la arena los chiringuitos. Todo está hoy más ordenado, pero ni siquiera los gurús de las nuevas maneras han sido capaces de transportar el sabor a través del tiempo. Barceloneta, pura nostalgia.

37 Los 'hippies'. La tribu tuvo sus años de vigencia, y hasta ideó una forma de vida que cuajó entre muchos jóvenes, pero su desaparición estaba cantada. Paz y amor es el binomio de un lema llamado a desaparecer, no cae bien entre quienes manejan los hilos de la guerra y el amor estructurado. Nada puede interrumpir el negocio de las guerras, que eso sí trae la paz, si acaban. Así que el mundo siguió su ritmo, y loshippiesfueron margaritas ante los tanques.

38 Sofico. No inventaron el pelotazo, pero sí fue una sociedad que quiso instaurarlo a nivel popular. Un caramelo para sacar buenos rendimientos a los ahorrillos caseros, pero la pirámide o el círculo no cuadró y fue un escándalo en pleno franquismo. El ladrillo ya daba un aviso en balde.

39 El 'SS Persia'. Creta, 1915. El pérfido capitán de submarino alemán Max Valentiner hunde alSS Persia.En él viajan el Maharajá de Kapurthala y sus incontables joyas. Una colección de Rolls Royce y una singular pareja. El Baron Montagu y su amante Eleonor Velasco. En el naufragio, ella murió en los brazos del barón, que sobrevivió. Como en Titanic,los pobres tienden a ahogarse más que los ricos.

40 Aeropuerto de Castellón.«¿Os gusta el aeropuerto del abuelo?».Sin pretenderlo, Carlos Fabra pasará a la historia con una frase que retrata la España hundida en la crisis. El aeropuerto de Castellón, terminado y sin aviones, es el mejor símbolo que dejó la burbuja. Habrá que preguntar a los nietos de Fabra, de aquí unos lustros, si les gusta o no.

41 El radiocasete extraíble. Y se lo puede llevar consigo. Lo decían los vendedores de coches cuando anunciaban que el modelo elegido disponía de radiocasete extraíble, para evitar los robos. Y allí iban ellos y ellas, camino de casa con un bolsito en bandolera donde iba la caja de música móvil. El cedé ni estaba ni se le esperaba.

42 Lehman Brothers. Va para cuatro años. Fue un 15 de septiembre. Obviamente el día de la virgen de los Dolores. Lehman Brothers, banco de inversión fundado en 1850, quiebra. Primero solo vimos unas imágenes de unos trabajadores encorbatados sacando de la oficina sus cosas en cajas de cartón. Hoy vamos para los seis millones de parados en España.

43 Parque Warner. El político es aquel ser que tropieza una y otra vez con el mismo tipo de inversor. Aquel que llega con megaproyectos de relumbrón. Que promete trabajo y dinero, lujo y, sobre todo«proyección».Mientras el parque Warner en las afueras de Madrid languidece porque la comunidad ya no puede invertir más, se va haciendo sitio al próximo pelotazo: Eurovegas.

44 DSK. Dominique Strauss-Kahn protagoniza uno de los más estratosféricos descensos nunca vistos. De tener muchas posibilidades de ser presidente francés a verse acusado de proxenetismo para organizar orgías. Todo comenzó en la suite del Sofitel de Nueva York donde Nafissatou Diallo entró a limpiar. ¿Complot? ¿Lujuria?

45 Luchino Visconti. El cineasta italiano dejó una trilogía imprescindible sobre las diversas formas de naufragio moral y espiritual. EnLa caída de los diosesvemos a una gran familia alemana embrutecerse con el nazismo. EnMuerte en Veneciaasistimos a la pérdida de la belleza y la esperanza mientras que Ludwig nos muestra el hundimiento en la locura del Rey de Baviera.

46 'Endeavour'. Desde 1992, el transbordador espacialEndeavour capturaba satélites, los ponía en órbita y atendía al telescopio Hubble. En junio del 2011 cubrió su último servicio con su estancia de 16 días en la Estación Espacial Internacional. Seis tripulantes fueron sus últimos usuarios. Las naves también caducan.

47 La república española de 1931.«España se acostó monárquica y se despertó republicana».Una manera muy española, improvisada y sorprendente de enviar (por segunda vez) a la familia Borbón al exilio. Aunque largamente deseada, nadie creyó que fuese a través de unas elecciones municipales que Alfonso XIII cogiese un tren hasta Cartagena dejando España en la primavera feliz del 31.

48 El reformismo de Roca.«Hay otra forma de hacer España /que a nadie ahoga, que a nadie engaña».Así era la canción electoral con la que Miquel Roca se lanzó a la conquista, en 1986, de la Moncloa con su Partido Reformista Democrático. Una formación con Florentino Pérez como secretario general. Logró cero diputados. Por lo visto, no había otra forma de hacer España.

49 El futbolín. Hubo un tiempo en el que bares y salones recreativos contaban con los futbolines. El ruido de las bolas contra los jugadores formaba parte del ambiente y nunca faltaban retos, ya se ocupaban los fabricantes de vestir a sus muñecos con el traje adecuado para excitar los derbis. ¿Los mató la consola?

50 Terra Mítica. La obra magna del estadista Eduardo Zaplana. Terra Mítica fue, como su nombre indica, el termómetro de un Mediterráneo dedicado al golf y las Montañas Rusas. En el 2000 se inauguró y cuatro años después estaba ya en quiebra. En 1992, se declaró un incendio en el terreno no urbanizable donde hoy está el parque. Casualidades que favorecen el desarrollo.

51 El padre Apeles. Es uno de los sabios más destacados de la historia. Ocho carreras universitarias y conocimientos como piloto de avión, sumiller o detective privado le convierten en unthink tanken sí mismo. A pesar de tanta sabiduría, el pasado 2011 apareció enLa Noriadiciendo que quería morir. El polemista busca mimos. El inmisericorde implora caridad.

52 Mickey Rourke. Un caso clarísimo de autodestrucción de las que se dan en el cine. De mito actoral enManhattan Sur (1985) a mito erótico enNueve semanas y media (1986) su carrera parecía estelar. Pero decidió ser boxeador, lo que le destrozó la cara y la cartera. Tras varios reintentos, aparece en el 2008 conEl Luchador. Pero¿

53 'El crepúsculo de los dioses'. Si alguien representa al hundiendo lento y doloroso desde la cima de la gloria al olvido esa es norma Desmond. El personaje que borda Gloria Swanson enSunset Boulevard,la película de Billy Wilder. El fin del cine mudo, la juventud marchita, la locura de la vanidad y el cine mismo como arte fantasmagórico en un filme que desaconseja acercarse a las piscinas.

54 Thom Yorke. La cabeza del cantante de Radiohead se sumergía poco a poco en el vídeo deNo surprises. Él aún no lo sabía (era 1997), pero estaba dictando la metáfora del hundimiento de las discográficas, que olían el mortal tufo delgratis total:10 años después, su banda publicóIn rainbowsen internet a cambio de la voluntad.

55 El fax. Alguno queda, siquiera para demostrar que ellos también existieron. Pero su reinado fue efímero: aquella especie de fotocopiadora a distancia se murió de un infarto cuando vio nacer el correo electrónico. Pero hubiera muerto igual: en el oeste de la tecnología sobrevive la que desenfunda antes.

56 Venecia. Nada hay de natural en el hundimiento de Venecia. Son ellos, los turistas, quienes le dan vida con sus visitas y, al mismo tiempo, los que la van echando al fondo del mar con su peso. Aguanta el puente de Rialto, pero hasta las máscaras saben que un día llegará elvaporettoy ya no estarás.

57 Los serenos. Vigilaban las calles de noche, abrían los portales a quienes lo necesitaban y daban conversación, pero los porteros automáticos acabaron con una profesión que en más de una ocasión se echa de menos. El hundimiento de los serenos explica cómo los ingenios del progreso se imponen a las personas.

58 La final de Atenas. Los grandes mitos merecen morir en grandes catástrofes. Y eso es lo que le ocurrió en 1994 al invicto Dream Team de Cruyff. Un exceso de confianza tras ganar la Liga, el agotamiento o un mal planteamiento táctico. Poco importa. Cuatro goles del Milán de Fabio Capello añadieron a la tradición de la tragedia ateniense un relato futbolístico.

59 Toros en Catalunya. Por más pasodobles que suenen, los toros andan a la baja. En Catalunya ya les aplicaron el estoque antitaurino, pero la tendencia del siglo señala que el arrastre de los astados no se quedará ahí. Es difícil hincar una espada sobre un animal doliente en un mundo de mascotas que van a la peluquería.

60 Las cartas. Nadie, no solo el coronel, tiene quien le escriba. Al hábito de escribir cartas lo ha hundido la inmediatez. Prima el teléfono móvil y triunfa la red, no se pega un sello para que«al recibo de ésta te encuentres bien; yo, bien, gracias a Dios».A lo mejor es que eso ya no importa.

61 El 'Prestige'. Aquel petrolero se hubiera llevado al fondo a cualquier vicepresidente que, como Rajoy, calificara de hilillos lo que fue una catástrofe ecológica. Que se hunda un barco, puede pasar con cualquier gobierno, pero gestionar de manera tan nefasta el suceso quedó para la historia.

62 Caja Navarra. La CAN fue el barco insignia de las finanzas navarras, una vez que engulló a la Caja de Ahorros Municipal de Pamplona. Luego, ella quedó absorbida en Banca Cívica, y la puntilla ha llegado con la integración en La Caixa. Comer o que te coman, he ahí la cuestión.

63 'Andrea Doria'. En julio de 1965 el capitán Piero Calamai estaba feliz. Iba a ser su último viaje tras 40 años de servicio y lo hacía en uno de los más bellos buques de pasajeros: elAndrea Doria. Una joya que fue abordada y hundida entre la niebla por un rudo transatlántico sueco llamadoStockholmque hoy se hace llamar Visión Athenay hace cruceros por España.

64 Los créditos. Fue una oleada que alcanzó a casi todo el mundo. Los bancos recibían con los brazos abiertos a quienes pedían créditos, y se concedían créditos para pagar otros créditos o para vestir el piso de protección oficial con mobiliario salido del Art Déco. La juerga se acabó, el crédito echó la persiana.

65 Borrell, 111. Una dirección maldita del Eixample: tres edificios volaron en diciembre de 1990 debido a una explosión de gas. El accidente causó tres muertos y dejó la imagen de los espectaculares rescates de ancianas a cargo de los bomberos.

66 Urtain. José Manuel Ibar fue un mocetón vasco reconvertido en boxeador. En él se resume la historia de muchos púgiles de éxito que acabaron hundidos. Urtain debutó en 1968 y llegó a campeón de Europa del peso pesado, en medio de rumores de tongos,dolce vita, malas compañías¿ Su retirada lo llevó a emprender negocios que no le fueron bien y murió en 1992 al arrojarse desde la ventana de su piso, el décimo, en Madrid.

67 Lorca. En nefanda fecha capicúa (11-5-11) un terremoto redujo a cascotes buena parte de la ciudad murciana, más de mil casas, y se llevó nueve vidas por delante. Un lugar hundido que aún hoy es víctima de otra clase de crisis del ladrillo.

68 La máquina de coser. No faltaba en ninguna casa, al principio con un gran pedal para impulsar su funcionamiento. Luego, con motor. Cada familia tenía su cosedora particular ¿normalmente era la madre¿, para arreglos e incluso para hacer sus pinitos de costura con modernas innovaciones copiadas de las revistas. Hoy la cosa va más de cantar que de coser.

69 'El hundimiento'. Retrato cinematográfico de los últimos días de Hitler en su búnquer. El fin del soñado Reich de los mil años. Un trabajo actoral de Bruno Ganz inmenso pero que la cultura digital ha convertido enmeme. Un lugar común sobre el que subtitular cualquier chorrada. El dictador más cruel de la historia convertido en protagonista de toda banalidad.

70 Grecia. En la orgía del bienestar pocos se libran de haber estirado más el brazo que la manga. Pero los gobiernos de Grecia añadieron mucha irresponsabilidad y torearon las normas de la UE. Llevaron al país al desastre y ahora toca pagar la factura.

71 Fukushima. Hace una semana se descubría una fuga de agua contaminada de uno de los reactores de Fukushima, catástrofe candidata aTitanic del siglo XXI. El científico Wolfgang Weiss lo definió perfectamente:«Es un Chernóbil a cámara lenta».Nunca sabremos cuándo acabará la pesadilla y su daño invisible vertido al mundo.

72 El régimen de Castro. Poco queda del aire de la sierra traído por los barbudos que liquidaron el régimen prostibulario de Batista. Los vientos de revolución se asustaron ante la responsabilidad de dar al pueblo libertad por encima de todo. Castro se enrocó y sepultó el plan, y persiste en agonizar.

73 Pechos de silicona. Son prótesis suntuarias que se enfrentan descaradamente a la física y ponen la proa a fundamentos incuestionables como la gravedad o el volumen. Su misión de relleno y aguante contra la tendencia natural a la inclinación fueron argumentos que calaron hondo y que ya no convencen demasiado.

74 El Búlgaro de Cropán. La pastelería industrial no tuvo que devanarse los sesos para dar con la tecla de fabricar dulces tentaciones llamadas al éxito consumista de los niños. En los patios de los colegios triunfaba el Búlgaro de Cropán, un pastelito al que, como a otros, les ha plantado cara la fruta. La batalla sigue abierta.

75 James Cameron en las Marianas. La pasión del director canadiense por hundirse no solo es metafórica, laboral y sentimental. Es el hombre que más abajo ha llegado al tocar fondo en la Fosa de las Marianas, a 11 kilómetros de profundidad, con el Deepsea Challenger. El director deAbyssyTitanicsabe que cuanto más hondo bajas, más pasta sueles encontrar.

76 Otto Kretschmer. Con 47 barcos hundidos, fue el capitán de submarino más eficaz de la segunda guerra mundial. A bordo de su mítico U-99, fue apodadoel Silenciosopor su habilidad para no ser detectado. De manera trágica para un lobo de mar, murió en 1998 en un accidente en el Danubio, ahogado en agua dulce.

77 El luto. Brazaletes, botones negros en la solapa¿ Eran signos de que su portador sufría la muerte de alguien querido. Ellas, ropa negra. El luto vivía en la calle, y a las personas enlutadas se las miraba en el tranvía como con un poco más de respeto. Hoy, el luto va por dentro, o al menos eso dicen.

78 Los Buddenbrook. Thomas Mann escribió esta larga y filosófica saga familiar a los 25 añitos. Era su debut literario pero fue, sin duda, una de sus mejores novelas. Habla de una familia de comerciantes de Lübeck a la que vemos transitar por el siglo XIX a través de cuatro generaciones que pierden el pulso moral y económico con la música de Wagner de fondo.

79 La censura. Demos por hecho que se hundió con sus censores a una, pero siempre habrá flecos sueltos en tan espinoso asunto. Desapareció, eso sí, aquella manía propia de dictaduras en escarbar en los pensamientos ajenos y cambiarlos a voluntad. Bien mirado, se entiende que la crítica sea un pilar de libertad.

80 Las finanzas vaticanas. El Vaticano es un Estado. Casi nadie lo diría a simple vista, pero si la noticia es que se hunden sus finanzas, ¡ay!, entonces ya parece un Estado serio. Y eso es lo que ocurrió en 1974. El Vaticano fio su dinero al banquero Michele Sindona, cuyo afán especulativo e imprudencia acabaron por hundir su imperio financiero y arrastrar en la caída el dinero que la Iglesia le había confiado. El pequeño territorio, a cuyo frente estaba Pablo VI, pudo sufrir pérdidas por valor de mil millones de dólares.Fiat voluntas tua,amén.

81 El tripartito. Pactar en política es sobrevivir, hacer una pirueta a las urnas y quedarse con el poder aunque los votos no alcancen. Todo es legítimo y legal, de manera que la unión hace la fuerza. Los problemas suelen aparecer después, cuando la convivencia se complica y el reparto del pastel provoca indigestiones. Los matrimonios políticos a tres bandas se ven obligados a lidiar sus diferencias con más frecuencia de la deseada, y un día se decide que hasta ahí se ha llegado porque el entendimiento para acceder al poder se ha hundido en el mar de la discrepancia, el desgaste y el hastío.

82 La mili. El servicio militar truncaba trabajo y estudios. Podía irse voluntario y adelantar la entrada en el Ejército con los 18 cumplidos. Pero calificar eso de voluntario era más un eufemismo que una realidad: o ibas antes o cumplías después. Los defectos físicos evitaban la mili, y el más socorrido fue alegar pies planos. En el 2001, el servicio militar dejó de tener sentido en favor de soldados profesionales y, se supone, mejor preparados. Pero, sobre todo, se ganó en calidad de vida al desaparecer aquellas narraciones insufribles de tipos empeñados en contar las experiencias de su etapa caqui.

83 La mariconera. Murió como se hunden muchos artículos superados por el tiempo, y pasó de ser un complemento de moda a mutarse en objeto obsoleto. La mariconera no aguantó, la dictadura del trazo permanente la fumigó para inventar otros continentes, otros impulsos de acercamiento al comercio. La vida sigue.

84 El submarino 'Tritón'. En 1960 elUSS Tritón, un submarino de la clase SSR, realizó la primera circunnavegación de la Tierra bajo el agua. Irónicamente, el capitán que dirigió tal gesta fue Edward L. Beach (playa en inglés) que, lógicamente, vio muy pocas durante el desempeño de la operación Sandblast. Pasaron por Cádiz para honrar a Magallanes, que hizo lo mismo pero flotando.

85 El Algarrobico. Un hotel con aspecto setentero demasiado cerca del mar y del parque natural. Ese es el caso de El Argarrobico en Carboneras, Almería. Construido en el 2003 y paralizado por una batalla judicial que parece no tener fin, su carcasa vacía se asemeja al casco de un inmenso barco, el del desarrollismo, embarrancado en las bellas y agrestes costas de Mojácar.

86 Las revistas porno. No hay mejor publicidad para la venta de un producto que su prohibición, si se es capaz de actuar con inteligencia y abrir con ingenio el grifo del objeto deseado. Aquí hubo sequía pertinaz de pornografía, y eso llevó, incluso, a elevar elPlayboya la categoría del erotismo exacerbado. Poco a poco, el alud de porno y la libertad de adquirirla terminó por rebajar la importancia de una industria que ofrecía mucho más que lo demandado. De las revistas y del superocho se pasó a las nuevas tecnologías, y el porno entró en las casas por internet. Normalizada la situación, se acabó la fiebre.

87 Britney Spears. Típico producto de la factoría Disney que ha tenido mal reciclaje: de estrella infantil a Lolita de éxito. Siguiendo el camino asignado, pasó por unafase dirtyy otra de mala malota. Pero algo del personaje se le quedó dentro de su rubia cabecita que acabó rapada al cero en un rapto de locura / cordura. Recemos para que Justin Bieber nos salga mejor.

88 La moqueta. La mató el polvo, la suciedad acumulada, el pelo perdido, las manchas evidentes¿ Qué fácil es hablar de los muertos, porque su llegada fue una innovación, una manera elegante y práctica de cubrir un suelo frío, un remedio contra las prisas y la falta de zapatillas. A veces, los pies la añoran.

89 La mantilla. Ninguna mujer iba a misa, hasta bien entrada la segunda mitad del siglo pasado, sin cubrirse con su mantilla o, en caso de apuro, poniéndose un pañuelo en la cabeza. Hoy, solo la Semana Santa recuerda en algunas ciudades un uso común que se hundió en el recuerdo.

90 'La aventura del Poseidón'. Película señera del género de catástrofes de los años 70 pero que tiene una inusitada e inquietante actualidad. Un cataclismo en Grecia provoca un tsunami que da la vuelta a un crucero de lujo al que los armadores exigen demasiado. En un notable acto de humor involuntario, el capitán del desastroso Poseidónestá interpretado por Leslie Nielsen.

91 El boxeo. De las veladas semanales se ha pasado a los combates esporádicos y nada aireados en los medios. La sociedad decidió que pegarse, aun con normas, no es deporte y, así, se ha ido perdiendo la afición con ayuda de las nuevas generaciones, que nunca han estado por la labor de zurrarse sobre la lona.

92 Brasil y el 'Maracanazo'. No habrá un topetazo igual en la historia del fútbol. 1950, estadio de Maracaná, todo Brasil espera el triunfo en el Mundial, nadie cuenta con Uruguay, el rival en la cancha, la víctima en el matadero. Pero el cordero rompió el cuchillo: 1-2 para los rioplatenses, y la mayor depresión del siglo para el país donde ese deporte es la vida entera.

93 El coñac. La decadencia del coñac es evidente y, fuera de los carajillos, muy poca gente consume ese licor que fue una de las bebidas alcohólicas más solicitadas. En España, el patrioterismo llegó a inventar eljeriñac(intento de acrónimo de Jerez y coñac), pero vino el whisky y acabó con la tontería.

94 Jaime Bores. Era el yerno ideal. Rubio, guapete, presentador de éxito en los 90 y depositario de afectos maternales para compensar lo mucho que le castigaba la crítica. Pero desapareció del mapa, se lo tragó la tierra. Aunque a principios de este año volvió de las tinieblas con un programa en Tele 5, el hombre tiene vocación de topo y ya está otra vez en el hoyo.

95 La combinación. No se salía de casa sin esta prenda extraña de nailon o de seda, según el bolsillo, que se llevaba oficialmente para que no sepegarala falda a las piernas, aunque su misión preconstitucional era impedir que se adivinaran los muslos al trasluz. Como la faja y otras cosas opresivas, fue desapareciendo de las mercerías. Se impuso el tanga y similares miniaturas.

96 'LA Confidential' y 'The full monty'. ElTitanic de James Cameron fue un iceberg para esas dos películas, que se hundieron en la ceremonia de los Oscar de 1998 ante tan colosal adversario.

97 El corralito argentino. Tras unas décadas de hiperinflaciones, la economía Argentina, atenazada por la deuda y las restricciones del FMI, no daba más de sí. En el 2001, el Gobierno prohibió sacar de los bancos más de 250 dólares semanales. Los ahorros quedaban encerrados así, en lo que Antonio Laje bautizó como«corralito». Un fenómeno austral que sobrevuela hoy el sur de Europa.

98 Howard Hughes. Multimillonario, seductor, aventurero y gran aviador. Con una biografía desmesurada, Hughes fue el prototipo de magnate de la era de Hollywood. Y su caída hacia el fondo fue, también, inolvidable. Sus trastornos obsesivo compulsivos le llevaron, hacia el final de su vida, a recluirse en un estado de semioscuridad acrecentando su leyenda.

99 Winehouse, Houston, Cobain. La cultura pop funciona como un volquete de Mentos en una piscina. Todo fuerza y espuma. Y nada hay tan inevitable como el hundimiento de una gran estrella. Suicidios y autodestrucciones trágicas por obvias. Los chavales no estaban bien pero no supimos salvarlos. O quizá queríamos, por una secreta venganza, verlos caer.

100 Trabajo para toda la vida. Con 5,2 millones de parados en España y una inestabilidad económica de aúpa, el concepto de tener un trabajo vitalicio es ciencia ficción. Veremos dentro de otros cien años.