Rajoy alude al nuevo puente de Cádiz como mejor ejemplo de entendimiento entre los pueblos

"Este puente es el mejor ejemplo de lo que somos capaces de hacer sobre los pilares de la concordia y el entendimiento". El presidente del Ejecutivo Mariano Rajoy metaforizaba así esta mañana sobre la importancia del diálogo entre territorios durante la inauguración del nuevo viaducto que une Cádiz con la localidad de Puerto Real, que ha definido como "una obra de ingeniería de tala mundial". Considerada una de las mayores infraestructura de España y un prodigio de la tecnología, el puente ha tardado ocho años en construirse tras numerosas modificaciones que han elevado su coste de los 200 a los 510 millones de euros, una desviación presupuestaria del 60% en la provincia con mayor tasa de desempleo de España.

El puente de la Constitución de 1812 es ya el tercer puente atirantado más largo de Europa y sus 185 metros de altura impactan, más aún los 69 metros de distancia entre el mar y el tablero, que lo convierten en el segundo con mayor gálibo vertical de todo el mundo tras el de Verrazano Narrows de Nueva York y por delante del Golden Gate de San Francisco.

EL PUENTE DE LA POLÉMICA

La inauguración de este hito de la ingeniería española no ha estado sin embargo exenta de polémica, tras las acusaciones de electoralismo y deslealtad institucional de los ayuntamientos unidos por el puente -- ambos de partidos vinculados a Podemos-- al no ser invitados a consensuar la fecha de apertura del mismo. Finalmente, la inauguración se ha convertido en un pequeño acto en el que solo han intervenido el presidente del Gobierno central y la responsable de la Junta de Andalucía, Susana Diaz. El regidor de Puerto Real ni siquiera ha acudido al acto.

Durante su intervención, Rajoy ha presumido del buen hacer de las empresas ingenieras españolas, aclamadas ha dicho por todo el mundo. "España es un gran país y una gran nación, con cosas de las que sentirse orgullosos", ha subrayado, citando entre otras las infraestructuras o los servicios públicos. Y ha reconocido que aunque hay que mejorar muchas cosas, "es importante que seamos conscientes de lo que somos".

METÁFORA

Tras glosar las bondades de la obra,el jefe del Ejecutivo ha tirado de metáfora para referirse al actual momento político, y ha subrayado que el puente es el mejor símbolo de la "unión entre territorios". "Conecta personas, estimula el intercambio, nos acerca al mundo y al tiempo ofrece nuevos horizontes", ha elogiado, insistiendo en que es el "mejor ejemplo" de lo que los españoles son capaces de hacer cuando hay diálogo y cooperación entre las instituciones.

En la misma línea, la presidenta de la Junta y líder del PSOE-A Susana Díaz, ha alabado esa cooperación entre administraciones, que ha permitido entre otras cosas incluir una modificación en el proyecto para incluir una vía ferroviaria en el puente, pero ha subrayado que ese entendimiento y el esfuerzo tiene que continuar para construir "un nuevo puente que traiga bienestar a Cadiz, el del empleo". También ha reclamado que el puente "no es de nadie", y ha hecho un llamamiento a que "todos los ciudadanos sintamos el puente como nuestro" porque "eso será que las administraciones hemos hecho bien nuestro trabajo".

EL PUENTE EN CIFRAS

El  nuevo puente de la Constitución de 1812, conocido popularmente como 'de la Pepa' descongestionara los accesos a la ciudad atravesando la Bahía. La obra acumula cinco años de retraso sobre la fecha prevista de inauguración. Ha sido diseñado por el ingeniero Javier Manterola y ejecutado por la UTE formada por Dragados y Drace, y en su construcción -cuyos últimos detalles se remataban todavía el miércoles- llegado a precisar 650 operarios, más de 100.000 metros cúbicos de hormigón y 70.000 toneladas de acero (nueve veces y media más que el acero empleado en la Torre Eiffel).

El nuevo enlace de la Bahía de Cádiz tiene una longitud de cinco kilómetros, de ellos, 3.092 metros transcurren salvando el mar, y el resto le une con el Río San Pedro en Puerto Real y con la barriada de Astilleros en Cádiz. En total, unos cinco kilómetros que le convierte en un enlace más largo que otros tan conocidos como el Golden Gate y el de Brooklyn, en Estados Unidos.

Su anchura es de 36,8 metros para albergar dos carriles por sentido para el tráfico viario y una plataforma para un tranvía u otro transporte público que se prevé incorporar más adelante, así como un tramo móvil para el paso de barcos.