El PSC reta a CiU a aceptar que se investigue la gestión sanitaria

Para dar ejemplo de que su oposición es cada día más intensa, el PSC se ha sacado de la manga todo un órdago a lo grande. Los socialistas van a plantear a CiU el desafío de aceptar que el Parlament investigue en una comisión la gestión sanitaria del Govern, ante el cúmulo de escándalos que, de este ámbito, han llegado a manos de la justicia. En el paquete figuran las presuntas irregularidades en el Hospital de Sant Pau, la opaca trama de empresas que integran el hólding Innova de Reus -dirigido hasta hace poco por el presidente del Institut Català de la Salut (ICS), Josep Prat- y elcaso Crespo,la controvertida gestión del exalcalde de Lloret de Mar y actual diputado de CiU Xavier Crespo al frente de Centres Mèdics Selva Maresme. La iniciativa persigue acorralar a CiU, ya que solo sus votos pueden permitir que la comisión vea la luz. Y para presionar a la federación, el PSC enarbola la bandera de la transparencia, a pesar de que las sospechas, en muchos casos, se remontan a la etapa del tripartito, durante la que los socialistas pilotaron siempre la Conselleria de Salut.

El líder del PSC, Pere Navarro, justificó la solicitud, que el grupo parlamentario registrará hoy, en la necesidad de «despejar cualquier sombra de duda» sobre cómo se han gestionado algunos consorcios sanitarios, a raíz de las investigaciones judiciales que se han abierto en las últimas semanas. No obstante, el plan esconde una encerrona a CiU. Reglamento en mano, los socialistas solo podrían forzar la creación de la comisión si la apoyan, en total, tres grupos parlamentarios. Pero ICV-EUiA, ERC, Ciutadans y Solidaritat no podrán respaldarla porque un partido no puede firmar más de una petición de comisión en un mismo periodo de sesiones, y en el actual ya han impulsado la de las cajas catalanas.

VOTACIÓN EN EL PLENO / La otra vía que habilita el reglamento exige menos apoyos (dos grupos o 27 diputados, y el PSC tiene 28), pero requiere que el pleno apruebe la propuesta por mayoría absoluta, algo que vuelve a dar la llave a CiU, puesto que el PPC dejó claro ayer mismo que considera

«inútil» la comisión y no la suscribirá. El portavoz nacionalista en el Parlament, Jordi Turull, mostró poca predisposición a aceptar el órdago socialista y sostuvo que CiU es poco partidaria de este tipo de instrumentos de control. A la espera de conocer con detalle la propuesta, Turull sospechó que se trate de un «perdigonazo» motivado por determinadas informaciones periodísticas, y no dejó de recalcar que algunos de los casos que el PSC quiere investigar corresponden a la época del tripartito.

En la dirección socialista han tenido en cuenta este hecho y lo utilizarán, precisamente, como elemento de presión contra los nacionalistas. Desde Girona, Navarro aseguró tener «plena confianza en el sistema público de salud y en las personas que han llevado a cabo su gestión desde los gobiernos de izquierda», informaFerran Cosculluela.No obstante, la idea de promover la comisión se ha topado con reticencias en la cúpula del partido y en el grupo parlamentario, por el desgaste que pueda producir. Según fuentes de la dirección, el PSC piensa solicitar la comparecencia de «responsables de primer nivel» de los consorcios sanitarios, del actualconsellerde Salut, Boi Ruiz, y de su antecesora, la socialista Marina Geli.

Laexconsellera,en una reunión reciente de la ejecutiva del partido, reclamó a sus compañeros que tratasen asuntos como elcaso Crespocon «responsabilidad». No obstante, las mismas fuentes señalaron que, a pesar de que hubo diversidad de opiniones, ningún diputado planteó «abiertamente» su oposición a la iniciativa en la reunión que el grupo parlamentario mantuvo ayer, en la que se tomó la decisión definitiva de plantear el órdago a CiU.

El último de los casos en saltar a la palestra ha sido el que afecta al exalcalde de Lloret. El Tribunal de Cuentas le acaba de abrir diligencias para esclarecer las irregularidades que, en el 2006, halló la Sindicatura de Comptes en la empresa que gestionaba los hospitales de Blanes y Calella. Con el voto de CiU, PSC, PPC y ERC, el informe que denunciaba el uso indebido de, al menos, 1,3 millones de euros, fue archivado. ICV-EUiA remitió ayer este informe ante el órgano fiscalizador estatal.

ENTRAMADO OSCURO / En elcaso Innova,es probable que el PSC solicite también la comparecencia del anterior alcalde de Reus, el socialista Lluís Miquel Pérez, en un intento por conocer las entrañas de un grupo de empresas que gestiona 290 millones de euros del erario. Tras ser demandado por incompatibilidad por la CUP, Prat dimitió como director general, pero a esta denuncia se sumó ayer otra del grupo municipal Ara Reus por estafa, apropiación indebida y malversación de fondos públicos, informaRafa Morales.