Cospedal sostiene que Bárcenas pactó su salida con Rajoy

María Dolores de Cospedal explicó ayer al juez Pablo Ruz, que investiga la supuesta contabilidad opaca del PP, que Mariano Rajoy y Javier Arenas pactaron con Luis Bárcenas, en presencia de su mujer, Rosalía Iglesias, en marzo del 2010 las condiciones de la salida del extesorero del partido. En este encuentro no se habló de la remuneración que recibiría, según mantuvo la número dos del PP, contradiciendo así la versión ofrecida por el extesorero el pasado 15 de julio.

La declaración de Cospedal se prolongó durante dos horas y 20 minutos. La secretaria general del PP compareció en calidad de testigo y transmitió su enfado por la difícil situación en la que Bárcenas ha colocado a su partido. Como era previsible, la número dos de los conservadores negó la existencia de una caja opaca y el cobro de sobresueldos. Y confirmó al juez -como hizo el día anterior uno de sus antecesores en el cargo, Javier Arenas- que en marzo del 2010 hubo una reunión en la sede del partido para buscar una salida al extesorero, que había sido imputado en elcaso Gürtel.En este encuentro, del que fue informada unos dos o tres meses después «por el presidente del partido», se acordó que Bárcenas podía ocupar un despacho en el edificio de la madrileña calle de Génova, disponer de secretaria y de coche oficial. Sin embargo, no se habló de las condiciones de su finiquito, según la versión de la secretaria general.

PAGOS A LETRADOS/ La número dos del PP, según fuentes presentes en la declaración, aseguró no poder informar sobre la persona que había autorizado que el extesorero siguiera dado de alta en el partido tras ser despedido para que cobrara en mejores condiciones su indemnización.

También admitió que reclamó una factura cuando se le pidió su autorización para abonar las minutas de los abogados de Bárcenas y que trasladó el cobro al departamento de contabilidad. Los letrados del extesorero percibieron durante tres años casi 300.000 euros. Asimismo, reconoció que sus relaciones con el extesorero eran «inexistentes» desde el año 2009, y que este iba a la sede del partido tras su despido «para saludar a sus amigos».

Cospedal eludió referirse con su nombre y apellido al extesorero, según fuentes jurídicas, aunque descargó sobre el departamento de tesorería la responsabilidad sobre las cuentas del partido como hicieron el día anterior sus antecesores Javier Arenas y Francisco Álvarez-Cascos. Según explicó, la contabilidad de la fuerza conservadora está firmada por la gerencia y ella aseguró que no revisa los números. Precisamente ayer, Cascos consideró «normal» no haber controlado las cuentas mientras estuvo al frente de la secretaría general del PP. Y puso la mano en el fuego por «todos los compañeros» de su expartido.

PREGUNTAS VETADAS / Durante el interrogatorio, Ruz impidió por «prudencia procesal» a las acusaciones preguntar a la dirigente popular sobre el cobro de una supuesta comisión de 200.000 euros de esta fuerza en Castilla-La Mancha, como denunció Bárcenas en su última comparecencia en la Audiencia. El juez le interrogó sobre esta cuestión y ella negó rotundamente la acusación. Además, el magistrado reveló que su juzgado está investigando estos hechos antes de decidir si remite o no este presunto cobro al Tribunal Superior de esta comunidad, ya que están involucrados aforados.

Otro de los focos de la declaración de Cospedal se centró en aclarar la existencia o no de una comisión de infraestructuras en el PP que se creaba antes de cada proceso electoral para decidir qué obras se debían incluir en el programa de las elecciones. La secretaria general fue tajante y negó la existencia de esta comisión, a pesar de que el pasado martes fue admitida por Cascos.

La número dos de Rajoy en el PP también rechazó que en su partido exista un registro de DNI de sus donantes y aseguró que eran los militantes del partido, y no empresarios como sostiene el extesorero, los que realizaban las donaciones anónimas que eran ingresadas en las cuentas bancarias de la fuerza.