Catalá propone debatir sobre la "compensación económica suficiente que permita la dedicación exclusiva" de los diputados

Los casos recientemente conocidos de Federico Trillo y Vicente Martínez-Pujalte sobre los trabajos de asesoría que compaginaron con su actividad como diputados del Congreso, y sobre si podrían haber supuesto un incumplimiento del régimen de incompatibilidades han servido este martes al ministro de Justicia, Rafael Catalá, para proponer la apertura de un nuevo debate: el referente a la remuneración económica de diputados y senadores y sobre el monto que debería de acordarse en el caso de que fuera dedicación exclusiva.

En el marco de un foro informativo en Pamplona, Catalá ha manifestado que hay que atender las demandas de la sociedad española respecto de que se debería ser "más exigentes y más restrictivos con la posibilidad de compatibilidades de diputados y senadores". No obstante, el ministro ha añadido que este debate llevaría a otro "sobre cuáles deben ser las obligaciones y las compensaciones por el ejercicio de una actividad parlamentaria". "Yo creo que eso también es un buen debate: cuál es la compensación económica suficiente que permita la dedicación exclusiva", ha indicado.

Hay partidos, como la CUP o Podemos, cuyos representantes se fijan un tope y el resto lo donan al partido u otras entidades, ya que no pueden renunciar unilateralmente a una parte del salario. Por ejemplo, el diputado de la fuerza independentista David Fernàndez recibe 5.802 euros del Parlament, pero dona 4.402 a la CUP y él se queda con 1.400 euros. Por su parte, el eurodiputado y líder de Podemos, Pablo Iglesias, ingresa 8.020 euros del Parlamento de Bruselas, de los que se queda 1.930.

Asimismo, el titular de Justicia ha destacado que también debe de analizarse "quién queremos que se dedique a la política, con qué compensación, con qué obligación". "Generalmente las obligaciones y las compensaciones forman parte de la misma balanza y hay que tenerlas de manera equilibrada", ha indicado.

CAMBIAR LA LEY

Preguntado sobre si considera escasas las compensaciones de los cargos públicos, Catalá ha dicho que no sabe si es escasa, "porque además cada Parlamento tiene sus sistemas de compensaciones, de dietas y salarios, un sistema muy fragmentado que habría que ir viendo caso por caso, pero en todo caso, en este momento el sistema de incompatibilidades es muy restrictivo y muy exigente y se está cumpliendo estrictamente".

Según ha explicado, la legislación actual contempla para los altos cargos "una transparencia absoluta y una incompatibilidad radical con todo tipo de actividades" y ha indicado que en el caso de los diputados y senadores hay una ley singular que "se está aplicando". "Si queremos dar un paso más allá, habrá que modificar la ley", ha zanjado.