Los paretenses Miguel Luque y Sergi Mingote cruzarán el estrecho a nado

El reto de cruzar el estrecho de Gibraltar a nado y por relevos está ya en mente del deportista de élite paretense Miguel Luque y el alcalde de Parets y también atleta, Sergi Mingote.

La fecha prevista para esta hazaña solidaria es la primera semana de junio, a pesar que el día exacto dependerá del estado de la mar. El objetivo será recaudar fondo para alguna causa que aún no se ha dado a conocer.

“El reto nace de una amistad que tenemos con Sergi, con quien ya hemos hecho cosas parecidas juntos”, explica el nadador paralímpico, Miguel Luque.

Mingote recuerda que el primer reto juntos fue ya hace más de una década cuando hicieron “el ascenso a la vía ferrata de Centelles para demostrar que las limitaciones solo están en nuestras cabezas y que una persona paraplégica, con esfuerzo, puede conseguir muchas cosas”.

15 KM POR DELANTE

Cruzar el estrecho conlleva unas dificultades de preparación logística que ambos conocen bien. "Para poder cruzar el estrecho hay que pedir día, porqué hay un gran tráfico naval", cuenta Luque.

Él mismo explica que a esto se le debe sumar el hecho que "tienes que nadar a más de 2,5km por hora y sino te sacan del agua porqué luego tiene que seguir el trafico marino".

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Migote añade también la dificultad de la distancia variable del recorrido que puede "ir de 14 a 22 kilómetros en función de dónde esté la meta", está, cuenta, puede variar en función de las mareas, las corriente o la niebla.

A los dos nadadores les acompañará una barca "para en caso de imprevisto tener ayuda", dice Luque. La normativa establece que para que el reto sea válido, nunca puede haber más de un nadador en contacto con la embarcación.

"Tendremos que hacer una estrategia de travesía para poder llegar al otro lado en menos de 6 o 8 horas, porqué por ejemplo, con corrientes de más de 3 nudos de corriente, Miguel no puede nadar", explica el alcalde de Parets.

PREPARACIÓN FÍSICA

A pesar de que Luque sea nadador profesional y Mingote un habitual de las pruebas multideporte que cuenta en su haber el ascenso a la cima del Everest, el reto actual les exige una preparación específica.

"Entreno 5 horas diarias entre pesas, agua y físico. Ahora lo que tendré que hacer es nadar muchos más metros y nadar dentro del mar para habituarme" cuenta Luque, que va camino a convertirse en el primer paralímpico que consigue la hazaña de cruzar el estrecho por relieves.

A su vez, Mingote cuenta como hasta la altura no ha podido entrenar mucho y que cuando lo hace tiene que buscar maneras para combinarlo con su tarea política. A pesar de esto, para los próximos meses se propone "ir más a la piscina y los fines de semana coger el neopreno y ir al mar a intentar acumular distancia".

Para el día 19 de marzo, tienen ya previsto el primer test conjunto en aguas abiertas.

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