Europa se rinde a 'Toni Erdmann'

Que Pedro Almodóvar no tenía opciones este año en los Premios de la Academia del Cine Europeo (EFA) era algo sabido de antemano. Todas las quinielas tenían claro que 'Toni Erdmann' sería la ganadora. Y no solo porque su directora, Maren Ade, es alemana y la EFA es una organización liderada por un director alemán, Wim Wenders, con sede en Berlín y con una membresía de mayoría germana. También, sobre todo, porque es película hilarante, profundamente conmovedora y maravillosamente rara. Nadie esperaba, eso sí, que su triunfo en la ceremonia celebrada anoche en Breslavia (Polonia) fuera tan avasallador.

'Toni Erdmann' ganó todos los premios a los que aspiraba, cinco. Además de ser considerada Mejor Película Europea del Año Toni Erdmann se llevó el galardón a la Mejor Dirección. También sus protagonistas, Sandra Hüller y Peter Simonischek, se fueron a casa con una estatuilla cada uno. La primera sorprendida sin duda debió de ser la propia Ade. “Mi película es una comedia en la que nadie ríe, y que dura tres horas. Yo misma no entiendo la respuesta que ha tenido”, había comentado horas antes de la ceremonia.

Almódovar: "El boicot a Trueba representa el peor de los totalitarismos"

La película, que llegará a España el próximo 20 de enero, es el retrato de los traumas afectivos de un padre y una hija que se comunican entre sí intercambiando embarazosas bromas adornadas con pelucas ridículas, dentaduras postizas y cojines que se tiran pedos. A partir de esa extraña premisa, Ade encadena magistralmente situaciones crecientemente bizarras y desternillantes, nutridas de vergüenza, humillación y resentimiento.

Sin duda el otro protagonista de la gala de anoche fue la propia Europa. En cierto modo, la ceremonia en su conjunto fue una llamada de auxilio en pos de la unidad del continente: sobre el escenario se desplegó una bandera de la Unión Europea; el alcalde de Breslavia, Rafat Dutkiewicz, dedicó su discurso a soltar exabruptos contra los nacionalismos y animar a Europa a darse una ducha para deshacerse de ellos. El vicepresidente de la EFA, Mike Downey, llamó bufón a uno de los artífices del Brexit, el exalcalde de Londres Boris Johnson. Y el presentador de la ceremonia hizo su primera aparición protagonizando un gag que criticaba el tratamiento que nuestros líderes están dando a los refugiados.

Aunque del todo merecidos, los galardones interpretativos obtenidos por Hüller y Simonischek pillaron a casi todo el mundo por sorpresa. Se daba por hecho Dave Johns sería considerado Mejor Actor por 'Yo, Daniel Blake' –Ken Loach obtuvo la Palma de Oro de Cannes por segunda vez en su carrera gracias a ella--, y que la inconmensurable actuación ofrecida por Isabelle Huppert en 'Elle' le proporcionaría el premio a la Mejor Actriz. También damnificados por el paseo militar de Toni Erdmann fueron los actores españoles nominados, Javier Cámara por 'Truman' y Emma Suárez y Adriana Ugarte por 'Julieta'.

APOYO A TRUEBA Y BERTOLUCCI

Horas antes de la ceremonia, durante un encuentro con periodistas españoles, Almodóvar describió como “algo atroz y monstruoso” la llamada al boicot orquestada a través de las redes sociales contra el estreno de la última película de Fernando Trueba, 'La reina de España'. “Representa el peor de los totalitarismos, y evoca el peor de los fantasmas que hemos vivido a lo largo de nuestra historia. Lo siento mucho por él y por las 100 personas que se han dejado la vida durante meses y meses para hacer esa película”.

Asimismo, el director también tuvo palabras en defensa de su colega Bernardo Bertolucci, tras la controversia generada en los últimos días alrededor del rodaje de la polémica escena de la mantequilla en 'El último tango en París' (1972). “Como lo de Trueba, eso también demuestra la intolerancia moral que impera en el tiempo que vivimos. Acusar de violadores a Brando y Bertolucci sobre algo que pasó en el año 72 es algo que no viene a cuento, sobre todo habiendo tantos casos de violación reales como hay. No sé muy bien en qué mundo estoy viviendo”.