"Por favor, no me dejen morir", suplicó Chávez

"Yo no quiero morir, por favor, no me dejen morir". Hugo Chávez lo pidió hasta quedarse sin fuerzas, moviendo apenas los labios. El jefe de la guardia presidencial, general José Ornella, contó que el presidente se aferró al último hilo de vida que le quedaba con ese ruego. "Él quería a su país, se inmoló por su país".

Las declaraciones de Ornella añadieron otra capa de dramatismo al deceso del mandatario venezolano. De acuerdo con el militar, Chávez falleció el pasado martes debido a un "infarto fulminante". Había regresado de Cuba dos semanas atrás y fue internado en el hospital militar del oeste de Caracas.

Día antes del deceso, el Gobierno había informado sobre una "severa infección" y el "empeoramiento" de las funciones respiratorias. Los médicos que, según el alto oficial, eran los "mejores" y venían "de todas partes del mundo", ya no pudieron hacer nada entonces. El cáncer que acabó con la vida del bolivariano "estaba bastante avanzado".

El testimonio de Ornella provocó una fuerte impresión entre los venezolanos que ganaron las calles para despedirse de su líder. "Sufrió bastante. Nosotros, que estábamos al lado, vimos que sufrió mucho esa enfermedad. Y bueno... La historia la escribiremos; algún día alguien escribirá; algún día el médico escribirá...", señaló.