Maduro lanza su ira contra la visita de González

Felipe González se ha convertido en la nueva bestia negra del chavismo venezolano que desarrolla una campaña de opinión en contra del exmandatario español, quien llegó a Caracas el domingo para participar como «asesor técnico externo» en la defensa de los dirigentes opositores presos Leopoldo López y Antonio Ledezma.

El presidente Nicolás Maduro calificó la visita de González como una acción de chantaje internacional. «La derecha extrema que ha dado golpes de Estado en Venezuela pretende imponer un chantaje internacional para que queden impunes sus crímenes», dijo el mandatario venezolano en uno de varios mensajes publicados en Twitter justo cuando el exgobernante español aterrizaba en Venezuela.

Maduro calificó la visita como parte de un intento de injerencia foránea en contra de su Gobierno. «El eje Bogotá-Madrid-Miami actúa desesperado, envían personajes para legitimar su guerra contra Venezuela, quieren ponerle la mano a la Patria», advirtió, y agregó en otro mensaje: «En el pasado, las oligarquías corruptas entregaron el país a mafias españolas que saquearon Venezuela, hoy el pueblo se hace respetar».

Los tuits de Maduro eran parte de una campaña de repudio del oficialismo en contra de González, que estuvo acompañada de mensajes que recordaban el 'caso GAL' y que vinculaban al exmandatario español con Carlos Andrés Pérez y Álvaro Uribe, expresidentes de Venezuela y Colombia, respectivamente.

En España, el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, aseguró que el viaje de González se estaba desarrollando con «absoluta normalidad» y deseó «vivamente» que ayude a mejorar la situación en el país. Margallo confirmó que González estaba alojado en la embajada española en Caracas y que se habían tomado «todas las medidas oportunas» para garantizar su seguridad.

COMUNICACIÓN FLUIDA

El titular de Exteriores agradeció la «comunicación fluida» que está manteniendo Gónzalez sobre su viaje y destacó que las relaciones de España con Venezuela «son absolutamente normales». En cambio, el exnúmero tres de Podemos, Juan Carlos Monedero, criticó que la visita de «un consejero de Gas Natural», en referencia a González, fuera portada en «todos los periódicos».

La iniciativa del «tuitazo» contra González había sido anunciada por el alcalde del municipio Libertador, Jorge Rodríguez, quien este lunes fue más allá en sus esfuerzos por vincular al visitante con situaciones turbias. Rodríguez dijo que los españoles le echaron del poder por la corrupción en su Gobierno y que le llamaban «el señor 20%». Aseguró que estaba en Venezuela como empleado del multimillonario mexicano Carlos Slim, enfrentado con el oficialismo venezolano tras la negativa del extinto Hugo Chávez de permitirle comprar la telefónica local, Cantv.

ENTREVISTA CON LEDEZMA

Tras llegar el domingo, González se reunió con la familia de Leopoldo López, que está enjuiciado como incitador de las 43 muertes ocurridas en las protestas callejeras del 2014, e incluso logró entrevistarse con el alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, que está acusado de haber participado en un supuesto plan conspirativo y se halla bajo arresto domiciliario.

Tras esta reunión, González consideró positivo el compromiso de Maduro con la celebración de elecciones este año y llamó al diálogo. «En Venezuela falta diálogo para resolver los problemas. Hay que dialogar, recomponer, reconciliar y reconstruir instituciones», apuntó.

Este lunes al mediodía, Felipe González se reunió con los representantes de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática, y anunció que estaba gestionando una autorización para visitar a Leopoldo López, en huelga de hambre desde el día 24. González afirmó que acatará la decisión del Supremo de no permitirle formar parte de su equipo de defensa jurídica, pero señaló que aún así espera poder asistir a la audiencia del juicio prevista para mañana.