Calle 13 reina en unos Grammy latinos con pocos éxitos españoles

Calle 13 reinó el jueves en la gala de los Grammy latinos celebrada en Las Vegas, donde hubo una gran representación de artistas españoles pero con poca suerte en el reparto de galardones. Solo triunfaron dos artistas nacionales, Niña Pastori, que se llevó el premio a mejor álbum flamenco por Esperando verte (imponiéndose a estrellas de la talla de Vicente Amigo, Enrique Morente y Miguel Poveda) y Jarabe de Palo, que consiguió el premio a la mejor ingeniería de grabación por Orquesta reciclando, en el que han intervenido Micky Forteza, Dani Espinet, José Luis Molero, Jordi Solé y Tom Baker. Pau Donés optaba también al Grammy al Mejor álbum vocal de pop para dúo, que finalmente fue para los mexicanos Reik.

David Bisbal se vio distinguido de forma indirecta por su participación en la canción Aquí estoy yo, que canta junto a Luis Fonsi, Aleks Syntek y Noel Schajris. Fonsi se llevó el Grammy a la Mejor canción del año frente a otras letras candidatas como Me fui, de Bebe. La extremeña aprovechó su presencia en la gala para confirmar su embarazo: «Es el mejor Grammy de vida», dijo.

Enrique Bunbury, La Oreja de Van Gogh, La Quinta Estación, Álex Ubago, Rosana, Miguel Ríos, Shaila Dúrcal, Miguel Bosé, María Dolores Pradera y Amaia Montero se fueron de la fiesta sin los gramófonos dorados a los que aspiraban.

Los puertorriqueños Calle 13 fueron los grandes triunfadores con cinco galardones, entre ellos, los de Mejor álbum del año y Mejor grabación por Los de atrás vienen conmigo y No hay nadie como tú.

Amenizaron la velada, entre otros, Bisbal, que cantó con Luz Ríos, Luis Fonsi, Laura Pausini, Alejandro Sanz (interpretó Looking for paradise con Alicia Keys) y Natalia Jiménez, de La Quinta Estación.