Un año turístico excepcional para España

Catalunya ya esperaba registrar un año récord turístico a finales del primer trimestre. Esas eran las previsiones que realizaba  el 'conseller' de Empresa i Coneixement de la Generalitat, Jordi Baiget. Se esperaba que el ejercicio pudiera cerrarse con 18 millones de turistas extranjeros y un volumen de gasto de 16.000 millones de gasto. "Se pone de manifiesto la importancia del sector para el país, tanto a nivel económico como de reequilibrio territorial porque la actividad se lleva a cabo en todo el territorio y ayuda a la cohesión social",  destacó entonces el 'conseller'. Los datos posteriores no solo confirman esa tendencia, sino que parecen superarla.

Según la última encuesta realizada por la Asociación Catalana de Agencias de Viajes Especializadas (Acave), el número de reservas de viajes había aumentado un 10% con respecto al inicio de la temporada de verano del 2015. Además se ha venido reservando con mayor tiempo de antelación: "Se ha consolidado plenamente como hecho normal que se hagan las reservas para vacaciones con una antelación de hasta seis meses", ha comentado el presidente de la asociación, Martí Sarrate. En resumen: catalanes y españoles en general viajan más fuera este verano, pero además llegan a España más extranjeros que en otras temporadas. "Nuestra previsión es un aumento del 10% en el número de turistas", ha destacado a este diario. 

El estudio que elabora Exceltur referido a la demanda turística del segundo semestre ya anticipaba los datos dados a conocer este viernes por Frontur. Hasta junio han acabado marcando un adelanto de la temporada en la mayor parte de destinos vacacionales e impulsado la creación de 88.124 empleos adicionales (5,7%) en las actividades turísticas. Las zonas del litoral, las de sol y playa, son los destinos que se benefician del impulso. El aumento de la actividad está muy asociado a las oleadas de turistas extranjeros en la costa.

REPUNTE DE LA DEMANDA EXTRANJERA

Los casi 141 millones de pernoctaciones registradas en los seis primeros meses del año, se sitúan muy por encima de los valores máximos de los últimos 15 años, con todos los indicadores de demanda turística nacional y extranjera creciendo de manera notable. Pero es que los 4,6 millones de turistas perdidos por Turquía, Egipto y Túnez hasta mayo explican buena parte de las imprevistas oleadas de turistas que han venido a España.

De todas formas se trata de un "turismo prestado", en palabras de José Luis Zoreda, vicepresidente de Exceltur, "no es sostenible a largo plazo, ni es deseable", ya que se está empezando a generar problemas en la capacidad del país para absorber volúmenes tan grandes y de forma tan inmediata.