La revolución de Marsillach

El estreno de 'Marat-Sade' en 1968, que hoy vuelve al Teatre Tívoli en una versión del grupo Animalario, convulsionó la escena y suscitó polémica y excitación política

GONZALO PÉREZ DE OLAGUER / BARCELONA

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La noche del 2 de octubre de 1968 marca un antes y un después del teatro en España. Fue la noche del estreno en Madrid dePersecucióny asesinato de Jean-Paul Marat, representado por el grupo teatral de la Casa de Salud de Charenton bajo la dirección del señor de Sade, del dramaturgo sueco Peter Weiss. La obra, teatro dentro del teatro, conocida con el título deMarat-Sade, se instaló e hizo temporada en el teatro Poliorama de Barcelona el 9 de octubre de ese mismo año.

Adolfo Marsillach, empresario, director y protagonista del espectacular montaje, con más de 60 actores y una concepción rupturista que nada tenía que ver con el habitual teatro "de tarde y noche" de esos años, decía que llevarla a escena "parecía más bien empeño de un hombre terco que de un profesional con sentido común".Marat-Sadelevantó fuertes polémicas y excitación política, y vivió toda suerte de avatares.

Guión con seudónimo

Aunque estaba previsto su estreno absoluto en Barcelona, se programó antes (2, 3 y 4 de octubre) en Madrid, abriendo en el Español la nueva temporada del Teatro Nacional de Cámara y Ensayo. Lo hizo en un clima de gran expectación, con José María Prada y Marsillach encarnando, respectivamente, a Marat y Sade, y con una traducción de Alfonso Sastre, que, por razones de censura, firmó como Salvador Moreno Zarza. En el reparto estaban Serena Vergano (Charlotte Corday) y Gerardo Malla (Roux), y la escenografía era de Francisco Nieva. El grupo delocosde Charenton, encerrados en jaulas a lo largo del pasillo central del teatro, pertenecía al grupo Los Cátaros, de Barcelona, dirigido por Alberto Miralles.

El estreno en Madrid acabó con el público puesto en pie, con bravos y emociones, pero sin incidentes. La segunda función se convirtió en un acto de rebeldía. "Se notaba a los espectadores excitados, nerviosos y, sobre todo, politizados. Advertí en seguida que aquella función iba a transformarse en un acto de oposición al régimen. Y así fue", contó después Marsillach en sus memorias. Hacia el final de la representación y en un momento en que se alzaban gritos a favor de la revolución francesa, se lanzaron octavillas desde el último piso del Español contra la dictadura franquista. La tercera función programada se hizo con los alrededores del teatro tomados por la policía.

Estado de excepción

La misma expectación creó el estreno, cinco días después, en Barcelona. Fue en el Ciclo de Teatro Latino, en el Poliorama, donde seguirían las representaciones ya fuera del festival. El teatro se llenó todas las noches hasta finales de enero de 1969. El día 24 de ese mes el Gobierno de Franco implantó el "estado de excepción" y Peter Weiss, en contra de la opinión de Marsillach, obligó a retirar la obra. Meses después, cuando se quiso hacer temporada en Madrid, Fraga, ministro de Información y Turismo, prohibió las representaciones.

Marat-Sade, la confrontación dialéctica entre el individualismo y la idea de la agitación política y social, según Weiss, vivió su estreno mundial en 1964, en Berlín occidental. Weiss dijo que el director que no hiciera triunfar a Marat traicionaría su intención al escribirla. Ese año Peter Brook la llevó a escena, y en 1967, al cine.

Ver más información sobre 'Marat-Sade' en el suplemento Exit